Tal como ya se ha dicho, la universidad está plenamente comprometida en llevar su
tarea más allá de sus cometidos tradicionales vinculados a la docencia y la investiga-
ción. La llamada tercera misión, que la abre a tareas de innovación, emprendimiento
y compromiso social, obliga a plantearse interrogantes como los siguientes: cómo
convertir el conocimiento en innovación socialmente útil y, por otra parte, cómo
contribuir al desarrollo personal, formación en valores y educación para la ciudadanía
que exige la correcta preparación de sus titulados. Una muy amplia tarea de la que
sólo abordaremos, y aun parcialmente, el último aspecto: la formación cívico-moral
de su alumnado.
1. Cuadro comparativo
ANGIE ELENA LÓPEZ RINCÓN
Valores éticos que guían La
acción de la Universidad del
atlántico
La formación etico-civico y el
compromiso social de los
estudiantes universitarios.
La universidad tiene carácter democrático y
pluralistas; la igualdad como valor
fundamental. No limita los debes ni
restringe la libertad.
Generar capacidad de aceptación en la
formación de visas diferentes; pero
sabiendo que el deber cívico promueve la
capacidad de opiniones diferentes.
Responsabilidad social e investigación
y docencia; buscan el cumplimiento de
deberes, y lograr objetivos institucionales
de progreso.
• El universitario debe ser capaz de
comprometerse en proyectos de
ciudadanía de atreverse a cambiar
el medio o transformarlo.
• El compromiso de la universidad
por formar agentes de cambio.
Extensión y la Proyección social,
autoevaluación, asociación y
participación; permite la comunidad
universitaria tener relación con la sociedad,
hacer mejoramiento continuo de calidad,
poder trabajar en conjunto y participar en la
vida institucional individual o
colectivamente
• Formación de manera orientada al
descubrimiento y aceptación de que
los modos y estilos de vida que se
sustentan en criterios de justicia,
equidad y dignidad son los únicos
legítimos y adecuados.
• Formación específica para el
ejercicio de derechos y deberes
ciudadanos y para la participación
oportuna en contextos de debate y
decisión
Algunos valores éticos, como honradez,
responsabilidad, respeto,
transparencia, eficiencia, lealtad,
tolerancia; entre otros, permiten que como
cualidades representativas, se pueda
construir una convivencia gratificante.
Uno de los deberes cívicos es ejercer una
participación responsable por el buen de
todos, deber de conocer la comunidad
universitaria, capacitarse para tomar
decisiones éticas, desarrollo autonómico y
adecuado para el buen manejo de la
presión de la sociedad.
Bibliografía
• “La formación ético-cívica y el compromiso social de los
estudiantes universitarios”; Concepción Naval (Universidad de
Navarra, España), Rafaela García (Universidad de València, España),
Jose Puig (Universidad de Barcelona, España), Miguel Anxo Santos
(Universidad de Santiago de Compostela, España). Encounters on
Educación Volume 12, Fall 2011 pp. 77 – 91.
• “MANUAL PROCEDIMENTAL DE GESTIÓN ÉTICA Y DE BUEN
GOBIERNO DE LA UNIVERSIDAD DEL ATLÁNTICO”. Universidad del
Atlántico (2017).