1. GUÍA PARA REALIZAR LOS TRABAJOS SOBRE LOS LIBROS
DE LECTURA.
Antes de leer el libro
FICHA TÉCNICA:
- Título: Didáctica de la Lengua Castellana y la Literatura
- Autor: Varios autores. Coordina Uri Ruiz Bikandi
- Ilustrador:
- Editorial: GRAO
- Colección: Formación del Profesorado. Educación Secundaria 10. Vol. II
- Fecha de publicación: Mayo 2011
Mientras lees el libro
RESUMEN DE CADA CAPÍTULO:
Cada vez que termines de leer un capítulo del libro, debes hacer en tu cuaderno un
resumen. Lo harás en forma de borrador, para después pasarlo a limpio en la
presentación final del trabajo.
DICCIONARIO:
Busca en el diccionario y copia el significado de las palabras que no entiendas, según
vayas leyendo el libro. Deberás anotar, al menos, el significado de tres palabras de
cada capítulo. Si las entiendes todas, busca y copia las que te parezcan que tienen más
relación con el tema que se desarrolla en el capítulo.
Después de leer el libro. Resumen – Opinión Personal
El Objeto de la Didáctica de la Lengua y la Literatura.
Tradicionalmente la enseñanza de la Lengua, ha tenido un enfoque tradicional: una
orientación enciclopédica donde todo el saber residía en el profesor. En la actualidad se nos
ofrece una visión más amplia, donde se tienen en cuenta los factores implicados en la
enseñanza-aprendizaje de las lenguas. Factores que por sí solos no pueden explicar la
complejidad de los procesos que surgen entre los componentes del sistema didáctico.
Desde este punto de vista, el propio sistema didáctico es el objeto de la didáctica de la
lengua y Literatura, donde el alumno es agente activo de la construcción de los conocimientos
y donde se concibe el aprendizaje como la apropiación de unos saberes que se interrelacionan
con unos conocimientos adquiridos, en un proceso complejo de construcción y reconstrucción.
“La Didáctica de la Lengua constituye un campo de conocimiento que tiene como
objeto el complejo proceso de enseñar y aprender lenguas con el fin de mejorar las practicas y
adecuarlas a las situaciones cambiantes en que esta actividad se desarrolla”. De esta definición
podemos extraer que “hacer didáctica no es enseñar Lengua o Literatura sino construir
conocimiento sobre su enseñanza y aprendizaje...”
2. Este complejo sistema está representado por un triangulo en cuyos vértices se sitúan
el docente, el alumnado y el objeto de enseñanza-aprendizaje en este caso la lengua.
En relación con los contenidos científicos, estos deben ser transformados y adaptados.
No pueden ser enseñados tal cual han sido formulados. Para que puedan ser aprendidos
tienen que sufrir cambios que les hagan accesibles y les den una nueva coherencia. (Concepto
de transposición didáctica).
Con respecto a los agentes de la relación didáctica (alumno y docente), esta relación
ha de entenderse como un proceso de construcción dinámico donde las actividades permiten
a los aprendices construir su conocimiento lingüístico comunicativo.
Por último, existe una relación entre práctica y teoría a través de la investigación en
didáctica de la Lengua, la cual aspira a la creación de un cuerpo de conocimientos. A partir de
la práctica surge la elaboración teórica: investigación acción. La investigación tiene su objeto
en la complejidad de las actividades relacionadas con la enseñanza y el aprendizaje y su
objetivo es elaborar un conocimiento sistemático de esta realidad con la intención de poder
intervenir y de esta manera mejorarla. Los ejes de la investigación son:
El sistema didáctico, en sentido estricto.
La delimitación de los contenidos de enseñanza
La didáctica de la Lengua es una disciplina poco delimitada y una disciplina de
investigación aun muy joven, con múltiples referentes teóricos y que se está construyendo
como ámbito especifico de creación.
Programar en Lengua y Literatura
Programar ha de entenderse como un proceso consciente y reflexivo de toma de
decisiones sobre la enseñanza de la Lengua y la Literatura. Ahora bien esas decisiones se
toman en diferentes niveles.
El nivel más alto es el de la legislación educativa, tiene un carácter prescriptivo, y
define currículo como el conjunto de objetivos, competencias básicas, contenidos, métodos
pedagógicos y criterios de evaluación de cada una de las etapas educativas.
Estas intenciones educativas tan generales han de ser trasladadas a cada grupo de
alumnos, a través del resto de niveles de decisión: la programación didáctica que elabora el
departamento de área de cada centro (y que forma parte del proyecto curricular de etapa) y la
programación de aula que es responsabilidad de cada profesor.
El currículo oficial establece objetivos generales de cada etapa, contenidos y criterios
de evaluación distribuidos por cursos. Los objetivos son capacidades cuyo desarrollo no se
observa directamente, sino a través de comportamientos como los previstos en los criterios de
evaluación, esperables tras el trabajo con los contenidos. Estos son esenciales en la
programación porque marcan la dirección en la que ha de desarrollarse el currículo y
determinaran la selección y la organización de los contenidos.
3. Objetivos, contenidos y criterios de evaluación mantienen entre sí una correlación no
univoca, es decir para un determinado objetivo general se seleccionan un conjunto de
contenidos de cada curso y unos determinados criterios de evaluación.
En el currículo oficial se indican las aportaciones que el área de Lengua y Literatura al
desarrollo de las competencias básicas. El área de Lengua y Literatura contribuye al logro de
seis de las ocho CCBB (exceptúa la competencia matemática, y la competencia en el
conocimiento y la interacción con el mundo físico). Dicho de otra forma al finalizar la etapa se
espera que los alumnos hablen y escriban bien, que se sepan escuchar y dialogar… Para todo
esto es necesario articular los contenidos de manera que no se trabajen de forma dispersa,
sino relacionados con el comportamiento comunicativo.
En el siguiente nivel, la programación, la cual ha de adecuar los objetivos generales de
etapa para cada curso, establecer la relación de los saberes implicados en el aprendizaje
lingüístico – literario y garantizar la progresión del aprendizaje, según las metas esperadas.
La adecuación de los objetivos generales viene orientada por la selección de
contenidos que el currículo oficial establece para cada curso y que también supone una
primera gradación entre los mismos. Dada esta distribución, la programación didáctica ha de
relacionarlos y organizarlos, para que se puedan plantear aprendizajes significativos en las
Unidades Didácticas (UUDD). Para ello los contenidos tienen que guardar una coherencia
interna, estar vinculados a otros aprendizajes significativos y resultar accesibles para su
aplicación.
No existe una opción única de jerarquización y organización de contenidos, pero si
opciones que parecen más coherentes. Estas opciones son aquellas que inciden en el principio
de que el saber lingüístico y literario es un saber relacional y que por tanto exige la utilización
coordinada y dependiente de las diferentes habilidades lingüísticas.
La programación de aula es un conjunto de UUDD que establece cada profesor para un
grupo de estudiantes en un periodo temporal determinado y es el elemento decisivo de la
concreción del currículo, por ser el más cercano al alumnado y por plantear un plan de
actuación real del aprendizaje lingüístico y literario.
Objetivos y contenidos de cualquier área de conocimiento se concretan en el proceso
de enseñanza-aprendizaje mediante UUDD o Secuencias Didácticas que persiguen unos
objetivos de aprendizaje determinados mediante la realización de unas actividades especificas,
organizadas para su realización en el aula.
La manera de entender las UUDD determina el proceso de enseñanza aprendizaje. Hay
UUDD concebidas como una acumulación de actividades en torno a un tema, sin articulación
entre sí. Y UUDD que integran los aprendizajes y los articulan en función de los objetivos que
persiguen. Solo estas últimas se pueden denominar Secuencias didácticas
En el caso del área de Lengua y Literatura, estas deben plantearse relacionando los
contenidos lingüísticos y literarios de forma diversa, y en todos los casos el trabajo sobre
habilidades lingüísticas se relaciona con la reflexión sobre la lengua, con la educación literaria,
o con ambas.
4. Las secuencias didácticas conciben el aprendizaje como un proceso y buscan la
coherencia entre las actividades planteadas, en función de las opciones de relación entre
contenidos adoptadas.
Una opción metodológica importante es la integración del trabajo por proyectos en la
secuencia didáctica. Este plan de trabajo, bajo la dirección del profesor, consiste en un
conjunto de actividades organizadas y secuenciadas en función de un resultado o producto
determinado. En Lengua y Literatura este enfoque globalizador ha dado lugar a secuencias
didácticas que integran el trabajo por proyectos con el aprendizaje de las habilidades
lingüísticas.
En el trabajo por proyectos podemos distinguir las fases de preparación, de realización
(fase central del aprendizaje) y la fase de evaluación. Es en esta última fase donde se pretende
que el estudiante tome conciencia de lo que ha hecho, lo que requiere de la recuperación
metacognitiva de los procedimientos seguidos, los resultados obtenidos y de los contenidos
utilizados.
Las actividades de aprendizaje establecen como se trabaja en el aula, el papel que
tiene el alumno, el profesor y la forma de plantear los contenidos. Al respecto se pueden
realizar diversas clasificaciones, pero solo algunas son de utilidad para la clase de lengua y
literatura:
Actividades que plantean el desarrollo, total o parcial de un proceso de comunicación y
actividades donde dependiendo del tipo de respuesta que se espera del alumno las actividades
pueden ser abiertas o de respuesta múltiple. Estas últimas sitúan al profesor como un
mediador que orienta y ayuda, y permite trabajar con alumnos de distinta capacidad, y que
conseguirán el objetivo según sus posibilidades y el aprovechamiento de las ayudas recibidas.
También hemos de hacer mención a un último nivel de concreción curricular. La
programación de aula ha de tener en cuenta a todo el alumnado y para ello, ha de establecer
criterios para ayudar a los alumnos con mayores dificultades de aprendizaje. Si estas
dificultades no impiden la participación en el trabajo de aula, hablamos de adaptaciones
curriculares no significativas, ya que no suponen la variación de los objetivos generales. Las
adaptaciones curriculares son una medida de atención a la diversidad que el profesor debe
regular en relación a los objetivos de aprendizaje programados y las necesidades del
alumnado.
Evaluar en Área de Lengua y Literatura
El capítulo III discute el valor de ciertas evaluaciones y sus posibles efectos, para centrarse en
la evaluación formativa, la autoevaluación y sus instrumentos. Atiende a la evaluación en el
área de Lengua y literatura, cuyo propósito central es el desarrollo de la competencia
comunicativa del alumnado, entendida como un conjunto de habilidades, estrategias y
conocimientos que abarcan la lengua oral, la lectura oral, la lectura y la escritura en sus
aspectos textuales y discursivos, así como los conocimientos sobre la lengua y la literatura.
5. Al concepto evaluación se le otorgan diferentes significados y se le relaciona con muy
diferente terminología. Pero centrándonos en el sistema educativo, la evaluación puede
considerarse un proceso con tres fases:
Delimitar y observar un objeto
Analizarlo a partir de unos criterios o de un referente
Tomar decisiones que se comuniquen a los implicados.
La conceptualización del término va ligado a la idea de juzgar y valorar, y a la
preocupación de los profesores para saber si los alumnos están aprendiendo los contenidos
que quiere enseñar. Al respecto, existe la creencia de que la evaluación ha de ser objetiva
¿pero es posible esta objetividad? Lo cierto es que se necesitan ciertos instrumentos y
métodos que ayuden a efectuar una evaluación fiable y valida.
El modelo que proponen los autores es el de una evaluación mas explicativa y útil que
contemple cuatro parámetros:
El contexto
La función o finalidad
El procedimiento e instrumentos que utiliza
El objeto o ámbito de conocimiento que observa.
La evaluación diagnostica últimamente ocupa un gran espacio de atención en la
opinión pública. Se trata normalmente de pruebas externas, que organizan organismos donde
docentes y alumnos no están representados, y permiten la comparación entre diferentes
centros o territorios, también a lo largo del tiempo. Uno de estos estudios son los informes
PISA, que provocan multitud de reacciones y pone de manifiesto las deficiencias de nuestro
sistema educativo.
La evaluación como proceso de regulación, hace referencia al mecanismo de ajuste o
de adaptación constante en el funcionamiento de un proceso con el fin de obtener unos
resultados óptimos. Se trata de una evaluación continuada que se inserta en la dinámica de las
secuencias de enseñanza y que proporciona retroalimentación a los diferentes participantes,
contribuyendo a hacerlos funcionar y mejorarlos.
La autoevaluación ha de entenderse como un contenido más que se tiene que enseñar
y aprender, ya que el alumno necesita gestionar sus futuros aprendizajes una vez que haya
abandonado el centro educativo. Como aprendizaje específico necesita que alumnos y
profesores adopten diferentes roles en diferentes momentos.
La autoevaluación genera espacios de interacción social que generan
retroalimentación y apoyo por parte de los actores implicados. Por tanto necesita como
condición de la participación activa del alumnado. Este sistema evaluador se convierte en la
herramienta que guía el itinerario de aprendizaje del estudiante y que requiere una buena
planificación por parte del profesor
Los instrumentos de evaluación son aquellos artefactos que sirven para llevar a cabo el
proceso de evaluación. Estos instrumentos tienen diferentes formas dependiendo del tipo de
6. evaluación a aplicar. Los instrumentos que más interesan a los profesores son aquellos de tipo
regulador, normalmente de tipo escrito, como cuestionarios o parrillas para rellenar, aunque
también pueden ser orales o mixtos.
Desde el punto de vista de una evaluación formativa, los instrumentos deben
promover un aprendizaje más reflexivo, proporcionar retroalimentación, reorientar el
proceso… Desde el punto de vista de una evaluación certificativa, los datos obtenidos sirven
para decidir si el proceso de aprendizaje ha alcanzado los objetivos previstos.
Es necesario hacer referencia a que los instrumentos de evaluación tienen como
características la contingencia y su provisionalidad, es decir, son herramientas útiles en un
momento concreto y para unos alumnos determinados, pero en otro momento pueden no ser
útiles.
Los autores apuestan como herramienta fundamental el portafolio, instrumento que
sintetiza esta nueva forma de entender la evaluación. Un instrumento que recoge los
productos finales, también el proceso de producción así como las reflexiones elaboradas
mientras se aprende. Esta herramienta también tiene una función de comunicación e
interacción entre los actores involucrados en el proceso.
Los currículos actuales están organizados en torno al concepto de competencia. El
objeto de evaluación en el área de didáctica de la Lengua y la literatura es el desarrollo de la
competencia comunicativa en los alumnos, entendida como un conjunto de habilidades,
estrategias y conocimientos que son necesarios para interactuar satisfactoriamente en
diferentes ámbitos sociales.
La evaluación de la lengua oral es un contenido difícil de evaluar debido al carácter
efímero de su producción. Se hace necesario pues el registro de estas producciones y poner en
marcha las capacidades de reflexión metalingüística que requiere toda evaluación.
En el caso de la evaluación de la lectura, el reto radica en que siempre se ha fijado la
atención en los productos más que en proceso mismo de comprensión. En el caso de la lectura
sabemos bien que cualquier tipo de cuestionario no ayuda, ni proporciona información sobre
todas las operaciones que se activan al leer.
La evaluación de la composición escrita debe estar insertada en el mismo contexto que
la determina. Este hecho radica en la misma concepción de la escritura como fenómeno social.
Por tanto las tareas de evaluación de esta habilidad discursiva tendrán que estar
contextualizadas. Para que tenga un valor formativo es necesario planificarla y preverla a lo
largo de las actividades de escritura, no solo como el final de un proceso.
Por último, en cuanto a la evaluación de los conocimientos de Lengua y Literatura:
Las actividades de reflexión gramatical deben estar integradas con la evaluación de las
diversas habilidades de uso de la lengua, teniendo como objetivos construir un saber
sistematizado que explique el funcionamiento de la lengua y promover una actitud
reflexiva sobre la lengua
7. En cuanto a la literatura, los objetivos deben ir dirigidos hacia la comprensión lectora
de textos literarios y hacia la referencia al patrimonio literario y la capacidad para
valorarlo.
Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) y Enseñanza de la Lengua y
Literatura
El tema es abordado desde una doble vertiente, como herramientas de aprendizaje y
como
El modo más común de ver las TIC es como herramientas de aprendizaje, en esta obra
se relacionan diversos recursos que el docente puede llevar al aula bajo el prisma de la
Enseñanza de la Lengua y Literatura:
Corpus de referencia del español actual de la R.A.E.
Corpus diacrónico del español de la R.A.E.
Analizador de relaciones morfoléxicas
Diccionario de neologismo
Diccionario panhispánico de dudas de la R.A.E.
Diccionario de dudas del español, de la Fundeu BBVA
Refranero multilingüe (Centro Virtual Cervantes)
Internet proporciona al área de Lengua y Literatura acceso ilimitado a una gran
variedad de textos para preparar actividades de comprensión, de expresión y de reflexión
sobre la lengua. Aun así, esto puede suponer un problema si no se dispone de las adecuadas
estrategias de búsqueda, de selección…
Al mismo tiempo la red proporciona gran cantidad de materiales, principalmente a
través de los portales educativos y los sitios de profesores (Profes.net, Averroes, Educarex…).
Dos de estos portales Centro Virtual Cervantes y Centro Virtual Leer.es tienen una gran
relevancia porque detrás tienen dos grandes instituciones: Instituto Cervantes y el Ministerio
de Educación y Ciencia.
Por otro lado también se hace necesario que el docente elabore sus propios ejercicios,
para adaptarlos al contexto, para ello también existen herramientas de uso sencillo como Hot
Potatoes, Jclic, Edilim…
Además de la consideración de las TIC como herramientas de aprendizaje, hemos de
considerar las TIC como espacio de nuevas prácticas discursivas. Internet ha introducido
nuevas formas de discurso que hace que debamos plantearnos el término alfabetización.
Leemos y escribimos a través de estas nuevas tecnologías que sitúan en un lugar difuso la
comunicación interpersonal y la comunicación colectiva. También introduce una nueva forma
de acceso a la información de la actualidad, así como una forma diferente de acercamiento a la
lectura con fines educativos.
Al respecto tenemos que tener en cuenta que:
Se hace necesario dirigir la búsqueda, y saber orientarse entre la gran cantidad
de información disponible, para lo cual necesitamos controlar diferentes
8. motores de búsqueda, enlaces que proporcionen material adecuado así como
emplear etiquetas que ayuden en este sentido.
En cuanto a la escritura en la Red, el nuevo contexto socio comunicativo hace
que la escuela tenga la necesidad de incluir el desarrollo de la estas
capacidades en medios como blogs, wikis, foros, redes sociales… cada una con
sus ventajas e inconvenientes. Teniendo en cuenta que escribir significa
construir textos realizándolos con una determinada finalidad.
La última línea que desarrolla esta obra con respecto a las TICS es el punto de vista de
estas como entorno en el cual el profesorado puede compartir informaciones y conocimientos.
En efecto, las TIC proporcionan al profesorado un óptimo entorno personal de aprendizaje,
desarrollándose principalmente a través de:
El empleo de marcadores sociales para organizar los contenidos de internet, y
por su utilidad para buscar, seleccionar, archivar y recuperar la información de
un modo eficiente.
El acceso a las actualizaciones de los contenidos de los contenidos de la Red
mediante suscripciones a los RSS.
La interacción dentro de comunidades virtuales utilizando redes sociales y el
blog como plataformas destinadas a que sus miembros establezcan relaciones
de interés mutuo.
La Educación Literaria como eje de la programación
La enseñanza de la Literatura ha evolucionado de una forma muy notable hasta
nuestros días. Actualmente el nuevo paradigma convierte al “lector literario” en el objetivo
principal. Un cambio que supone sustituir la aspiración de formar lectores especialistas,
conocedores de la historia de la literatura por lectores con hábitos de lectura consolidados y
capaces de comprender textos literarios.
El currículo actual atiende a este cambio de paradigma aunque en las aulas aun existe
la tensión por la persistencia con modelos que aun no han sido superados completamente: los
planteamientos basados en el autor y la obra (modelo historicista) y la técnica del comentario
de texto.
La nueva tendencia de educación literaria desplazada hacia el lector, concibe el
aprendizaje literario como el desarrollo de una competencia que permite la lectura provechosa
de obras literarias, en el sentido del desarrollo de las capacidades que permiten consolidar el
hábito lector y en el progreso en las habilidades interpretativas.
Este cambio en el modelo necesita concretarse a través de una verdadera
programación literaria. Los autores de esta obra lamentan que el currículo actual no facilite
que el profesor adecue sus intervenciones a este modelo. Por ejemplo, no ofrece itinerarios de
lecturas ni dan pistas sobre cómo seleccionar libros adecuados para el fomento del hábito
lector.
Este es el motivo por el que los autores nos dan algunas orientaciones al respecto de la
formación lectora: “debemos dar oportunidades para la experimentación de la comunicación
literaria despertando el apetito lector en los adolescentes y propiciar encuentros con libros
9. con los que puedan crear vínculos personales”, el encuentro del lector con el libro significativo
es el que ayuda a dar sentido a su experiencia y a construirse, nosotros como mediadores,
debemos paulatinamente dirigir estas prácticas lectoras hacia géneros y obras de más calidad.
En cuanto a las actividades más adecuadas, es importante “desescolarizarlas”, para que imiten
las prácticas sociales en torno a la lectura como generadora de relaciones sociales y como
practica de consumo habitual.
En cuanto a orientaciones para interpretar, para dar sentido a los textos, es muy
importante la primera decisión en la selección de obras que favorezcan el acceso a la
interpretación, además de una renovación metodológica, ya que la interpretación no se presta
a ser transmitida sino que es un proceso de construcción. En este sentido recomiendan
técnicas como la discusión literaria, la lectura guiada, la escritura literaria, los proyectos
literarios… actividades que proponen diferentes accesos al fenómeno literario.
OPINION PERSONAL
Esta obra presenta la problemática general de la enseñanza de la Lengua y la
Literatura. Hace hincapié en los modos de programar y evaluar y plantea la problemática de la
enseñanza en las cuatro destrezas básicas: expresión y comprensión tanto oral como escrita.
También aborda con acierto la enseñanza de la Literatura y los recursos de las Tecnologías de
la Información y la Comunicación. Todos estos contenidos están muy bien referenciados, lo
que permite orientar la práctica de quien desee enseñar.
Es un libro técnico dirigido a profesionales, o futuros profesionales de la educación,
por tanto ningún formato de los que disponemos en los centros se adapta a esta obra para su
análisis. Creo que presenta una visión coherente de la educación. Eso si centrada en la
educación Secundaria (ESO y Bachillerato).
Me ha gustado en el sentido que presenta y sugiere nuevos enfoques para del
profesorado, para lo cual compagina el rigor científico de los contenidos, compara este nuevo
enfoque contraponiéndolo con el antiguo enfoque y porque termina cada capítulo con una
presentación practica de los mismos. Por lo tanto un libro útil.