2. Introducción
Todos los niños se comportan mal algunas veces. Y
otros niños pueden tener problemas de
comportamiento temporales debido al estrés. Por
ejemplo, el nacimiento de un hermanito, divorcio o la
muerte de un miembro de la familia puede hacer que
el niño se comporte mal. Pero los trastornos de la
conducta son más serios. Abarcan un patrón de
conductas hostil, agresivo o perturbador que dura más
de seis meses y que no es apropiado para la edad del
niño.
3. ¿Como se que mi hijo tiene mala
conducta?
El uso de malas palabra
Comportamiento agresivo o violento
Daños a la propiedad
Mentiras
Robo
Llevar la contraria agresivamente
4. ¿Por qué se porta mal?
muchos padres dan por concluido que su hijo ha
nacido así "que le vamos a hacer..." e incluso son
capaces de establecer comparaciones con otros
miembros de su familia "ha salido como su abuelo...".
Todo ello parece dar la sensación de impotencia para
controlar la conducta por parte de los padres, situando
el origen del problema en factores externos a ellos
mismos . Lo que ignoran es que, habitualmente,
conductas como la desobediencia están fuertemente
controladas por varias variables de las que no son
ajenas los propios padres.
5.
6. Características con los padres e
interacción con hijo
Cada niño es diferente y sus necesidades de
atención por parte de los padres pueden variar de
unos a otros, es por ello que no pueden
establecerse pautas generales para todos. Sin
embargo, la aparición de conductas problemáticas
es un síntoma de alerta que debe ponernos en
guardia y hacernos más sensibles hacia las
posibles demandas afectivas que reclama el niño y
no satisfacemos
7. En definitiva, es preciso tener en cuenta, que los
problemas de conducta que presentan los niños son el
resultado de una falta de factores que es necesario
evaluar y tratar para corregir.
8. El ajuste emocional y social de los
padres.
Para una buena progresión emocional-conductual del
niño, es muy positivo que los padres, no tanto no
tengan trastornos emocionales, sino que el niño no los
perciba de forma angustiosa. Esto puede resultar difícil
en caso de situaciones de maltrato o separaciones
traumáticas. Sabemos que existe una alta correlación
entre madres deprimidas y trastornos de conducta en
los hijos.
9. Los Modelos
Hasta que no está cercana la adolescencia, los
principales modelos a seguir, en todas sus facetas,
suelen ser los propios padres o hermanos mayores. De
nada servirá que le digamos que se comporte de una
determinada manera, si los modelos que tiene a su
alrededor no son coherentes con lo que le pedimos.
Sabemos de la impotencia de muchos centros
escolares, que hacen una labor educativa impecable
pero que su labor no se ve complementada por los
modelos familiares. Otro modelo a valorar es el que
ofrecen los medios como la Tv., Internet, Videojuegos,
etc...
10. Disminuir conductas inadecuadas
Consiste en retirar al niño, por unos momentos de la situación o contexto en el
que se lleva a cabo la conducta-problema, con la finalidad de que no se refuerce
la conducta. El lugar de ubicación del niño podrá ser un sector del aula u otro
ambiente. Debemos tener en cuenta lo siguiente:
Se deberá utilizar una advertencia o aviso previo frente a la presentación de la
conducta-problema.
Si a pesar de la advertencia, el niño continúa con la conducta-problema, se le
llevará al ambiente preparado, sin regaños ni discusiones, diciéndole
únicamente que "permanecerá por unos instantes ahí para que analice" sobre
su conducta.
El lugar donde se ubique al niño deberá estar libre de estímulos reforzantes y
atractivos.
El tiempo de permanencia en dicho lugar elegido debe ser de aproximadamente
5 minutos.
Acabado este tiempo, el niño será regresado al lugar inicial, sugiriéndosele la
conducta adaptativa a realizar.
11. Ejemplo
Si en el patio, un niño empieza a tirarle los juguetes a
otro niño mientras juegan, y aunque el adulto le ha
advertido sin tener éxito en corregir dicha conducta; lo
retirará del patio y lo llevara al lugar preparado,
indicándole que reflexione sobre su mal
comportamiento. El niño se quedara allí unos minutos,
el adulto no le dirigirá la palabra ni lo juzgará durante el
periodo de reflexión. Al termino del tiempo se le
regresará a la situación inicial, sugiriéndosele que se
disculpe con su compañero, dándole además la opción
de seguir jugando con él.
12.
13. Conclusiones
La atención que un niño recibe de los adultos juega
un papel primordial en el control de la conducta de los
pequeños. Tan importante es prestarle la suficiente
atención cuando se comporta de forma adecuada, y
halagarle por ello, como retirársela cuando el
comportamiento no lo es.