2. Nunca te da retroalimentación
• Tu jefe te da órdenes, te puede dar las gracias, una palmadita en
la espalda e incluso decirte “bien hecho” o mencionarte en algún
evento público, pero: nunca te ha dicho cómo mejorar, cuáles son
tus áreas de oportunidad ni te ha otorgado una crítica
constructiva, con lo que definitivamente te ayudaría a crecer
dentro de la empresa.
• ¿Qué puedes hacer? Pídeselo, sin miedo; dile algo como “Gracias
por decirme que lo hago bien, pero eso no ayuda en dasa; me
gustaría saber cómo mejorar y perfeccionar mi trabajo,
agradecería pues, retroalimentación positiva para saber en qué
puedo mejorar”.
3. No reconoce tu potencial
• Has realizado las mismas actividades durante siempre, lo haces
bien porque sabes hacerlo y tu jefe también lo sabe pero, no has
tenido nuevos retos, proyectos ni tareas que demuestren que
tienes mayor potencial: Estás estancado y tu jefe no hace nada
por sacarte de ahí.
• ¿Qué puedes hacer? Manifiéstate, expresa tus deseos por
adquirir nuevas responsabilidades, demuestra tu interés por
nuevos retos o proyecta las ideas que le darán realce a tu puesto
en beneficio de la empresa.
4. No tiene idea de lo que haces
• Tu jefe te ve trabajando, como siempre, pero no tiene idea en
qué; cree que haces tus deberes y que cumples con tu horario, y
demás; siempre es un problema el asunto de las horas extras y no
entiende cómo es que apoyas a la empresa.
• ¿Qué puedes hacer? Habla con tu jefe y dile cómo es que te
sientes ignorado, que no te toma en cuenta a ti ni a tu trabajo el
cual es beneficio para la empresa.