Este documento discute los factores que contribuyen al abandono escolar y las estrategias que los docentes pueden implementar para abordar este problema. Señala que la reprobación a menudo lleva a los estudiantes a abandonar la escuela y dedicarse a actividades laborales o delictivas. Sin embargo, los docentes pueden ayudar a mantener a los estudiantes alejados de estas situaciones siendo figuras de ejemplo y motivándolos a estudiar. Las estrategias propuestas incluyen ayudar a los estudiantes a reflexionar sobre la importancia

1. Actividad ¡Volemos!
Para este trabajo se tomará como factor de abandono el de reprobación;
que como se ha visto en este curso, orilla al estudiante a dejar la escuela y
dedicarse a actividades laborales, o en el peor de los casos, los condena a unirse
a la delincuencia; siendo ello un factor de riesgo para el estudiante y su entorno
social.
Sin embargo, como se ha venido desarrollando en el curso, los docentes
somos una figura medular para que nuestros estudiantes estén alejados de dicha
problemática, pues además de ser una figura de ejemplo para ellos, en muchos
casos, también la manera en la que los motivamos a seguir adelante y el diseño
correcto de estrategias de enseñanza que conduzcan a inculcar hábitos de
estudio, los encamina para que éstos reflexionen sobre el impacto que la escuela
y sus contenidos tienen en su vida diaria.
Las estrategias para comenzar a erradicar esta problemática, es primero
que nada, como ya se había señalado, es conducir a los estudiantes a que
reflexionen sobre el impacto que tiene la escuela para mejorar sus condiciones
sociales; dos el docente debe motivar a que el alumno lleve a cabo prácticas de
estudio para mejorar su situación académica, en entornos y ambientes escolares
armónicos y de confianza, como parte de las habilidades socioemocionales de los
estudiantes, finalmente, diseñando estrategias de trabajo colaborativo que faciliten
al alumno el aprender (trabajo entre pares, asesorías individuales, implementar
talleres de tareas, etc.)
Sin duda alguna de estas estrategias, se apegan a los objetivos de
programas como Yo No Abandono y CONSTRUYE-T que justamente están
centrados en que el alumno tenga una eficiencia terminal de la EMS eficiente, que
sean alumnos altamente competentes y que su estancia por la escuela sea
satisfactoria, al igual que su desarrollo y formación integral.
Estos dos programas hacen énfasis en el papel que desarrolla el docente
en aula y fuera de ella, por medio de uso de herramientas tecnológicas; pues él no
sólo es la guía hacia el conocimiento, sino también es quien ayuda al andamiaje

2. de los aprendizajes significativos y las prácticas de vida saludable con su entorno
social; es decir, el docente a través de las habilidades socioemocionales, ayuda a
que sus alumnos autorregulen sus emociones y prevenir acciones que pongan en
peligro su vida y/o integridad física y emocional al sufrir acoso escolar; Bullying.
Finalmente, todo lo anterior argumentado, es posible con la correcta
ejecución de la pertinencia para actuar de manera rápida y razonada sobre los
factores de riesgo que a nuestros estudiantes vulneran, y aunque el docente
muchas veces sus funciones no las puede expandir más allá del contexto escolar,
las emprendidas en el aula, sí son básicas para ello, pues el alumno desde clase
tiene una orientación clara hacia dónde deberá dirigir sus prácticas escolares y
sociales.
Por ello, no es válido decir que como docentes nuestra tarea es sólo de
transmitir el conocimiento, cuando en realidad en muchos de los casos somos el
motor de inspiración de mejora de nuestros alumnos, y máxime cuando en casa
no se tiene una figura de autoridad porque simplemente nuestros estudiantes se
encuentran abandonados.
Por: Carla Angélica Colín Domínguez