4. El tema de la infalibilidad de los Obispos y
del Papa en las definiciones dogmáticas
se trata dentro de la Teología, concretamente
en la Eclesiología, ciencia que trata sobre el
misterio de la Iglesia y sobre los dones que
Dios concede a los hombres a través de ella
5. La palabra «dogma» proviene del griego, y significa
«afirmación». Para los griegos, cualquier persona
que afirmara algo, era dogmático
Con el tiempo, la Iglesia aplicó esta palabra
para indicar las afirmaciones o verdades de fe
reconocidas por los Obispos y el Papa
como básicas o necesarias de creer
para ser considerado como cristiano
7. Las principales leyendas negras sobre este tema son:
1)Los Obispos y el Papa son hombres y comenten
errores, por lo que no pueden ser infalibles en algo que
afirmen como «dogma»
2)La infalibilidad de los Obispos y del Papa en la
definición de dogmas de fe coarta la libertad humana, por
lo que no es humano ni cristiano
3)Cuando el Papa hace una definición de un dogma de
manera solemne o «ex cathedra» sí es válida, pero no
cuando habla de manera ordinaria, por lo que en este
caso no hay obligación de obedecer
9. ««Jesucristo concedió a su Iglesia
el carisma de la infalibilidad»
( Concilio Vaticano I, Pastor aeternus )
«Tú eres Pedro, y sobre esta piedra edificaré mi
Iglesia, y las puertas del infierno no prevalecerán
contra ella. A ti te daré las llaves del Reino de los
Cielos; y lo que ates en la tierra quedará atado en
los cielos, y lo que desates en la tierra quedará
desatado en los cielos» (Mt 16, 18-19)
10. "Quien a vosotros oye, a mí me oye; quien a
vosotros escucha, a mí me escucha« (Luc 10,16)
«Id pues y haced discípulos a todas las gentes
bautizándolas en el nombre del Padre y del Hijo y
del Espíritu Santo, y enseñadles todo lo que yo os
he mandado. Y he aquí que yo estoy con vosotros
todos los días hasta el fin del mundo» (Mt 28,18)
11. El don de la infalibilidad es propio de Dios.
Él se lo quiso reglar a sus apóstoles o representantes en
la tierra para que, con la asistencia del Espíritu Santo,
pudieran cumplir la misión encomendada por
Cristo de enseñar, hacer discípulos y bautizar a todas las
gentes.
12. El don de la infalibilidad presente en la Iglesia a través
del Papa y los Obispos, sucesores de Pedro y los Apóstoles,
se expresa por medio de la expresión “dogma de fe” o
“afirmación de fe divina y católica”, la cual el Concilio
Vaticano I ( Dz 1792 ) define como:
13. «Todas aquellas cosas que se contienen en la
palabra de Dios escrita ( Escritura ) o
tradicional ( Tradición ), y son propuestas por la
Iglesia para ser creídas como divinamente
reveladas, ora por solemne juicio, ora por su
ordinario y universal Magisterio»
Ej.: Dogma de la Encarnación del Hijo de Dios
14. El Magisterio es la función y el carisma
otorgado por Cristo a sus Apóstoles y sus
sucesores, de enseñar, conducir y gobernar
al Pueblo de Dios, que es la Iglesia
15. Hay dos tipos de infalibilidad dentro
del Magisterio de la Iglesia
1. Infalibilidad del Magisterio Episcopal
a) Magisterio episcopal ordinario ( Vat. II, LG, 25 )
Magisterio no solemne o extraordinario, pero infalible,
que se da cuando los Obispos enseñan:
1°) en materia de fe y costumbres;
2° ) sujetos a la autoridad del Romano Pontífice;
3°) en plena concordia entre sí; y
4°) queriendo actuar usando el grado supremo de su
autoridad.
16. b) Magisterio episcopal extraordinario ( Vat. II, LG, 25 )
Magisterio extraordinario y solemne de los Obispos
dentro de un Concilio ecuménico,
con la finalidad de responder a temas importantes de la fe y
costumbres, evitando toda posible tergiversación y ofreciendo
la mayor claridad en el mensaje
17. 2. Infalibilidad del Magisterio Papal
a) Declaraciones “ex cathedra”
( Vat I, Pastor aeternus; Vat II, LG, 25 ):
“En ciertas ocasiones, la infalibilidad de la Iglesia se expresa
en declaraciones del Romano Pontífice cuando habla ex
cathedra, es decir, cuando cumpliendo su cargo de pastor y
doctor de todos los cristianos, define por su suprema autoridad
apostólica que una doctrina sobre fe y costumbres debe ser
sostenida por la Iglesia universal”
18. El término “ex cathedra” alude literalmente a las
declaraciones hechas por el Papa “desde la cátedra de
Pedro”, es decir, apelando a la autoridad dada por
Cristo a Pedro y sus sucesores para “atar y desatar en
la tierra y en el cielo” ( Mt 16, 18-19 )
El último dogma definido
por un Papa fue el de la
Asunción de la Virgen María
al cielo, por Pío XII en 1950
19. Existen dos formas de Magisterio papal “ex cathedra”
+ Magisterio ordinario del Papa
( Vat I, Pastor aeternus; Vat II, LG, 25 )
Cuando el Papa, en cualquier lugar del mundo,
se dirige a toda la Iglesia y dice con claridad
que una doctrina sobre fe o moral debe ser sostenida por
todos
20. + Magisterio extraordinario del Papa:
declaraciones solemnes hechas por el Papa en ocasiones
y ceremonias especiales
( concilios, sínodos, solemnidades, etc )
21. b ) Declaraciones no “ex cathedra”
Si el Papa, enseñando en materia de fe y costumbres
a los fieles en general, no hace constar su intención
de imponer la máxima obligatoriedad, su Magisterio
no deja por ello de ser auténtico y universal
22. A este tipo de declaraciones pertenecen los documentos
doctrinales del Papa, que pueden emanar de él mismo
( cartas encíclicas, o cartas y escritos con
destinatarios de diversa índole ) o emanar de las
Congregaciones Romanas, interesando al caso sólo los
documentos que llevan una aprobación específica
del Papa
23. Recuerda el Vaticano II que a este Magisterio
«se debe de modo particular una religiosa sumisión
de la voluntad y del entendimiento, de manera que
se reconozca y reverencie ese Magisterio supremo y
con sinceridad se le preste adhesión»
24. Sin embargo, en este tipo de declaraciones no
se impone una religiosa sumisión del entendimiento,
si las doctrinas propuestas no fueran ciertas,
o si las afirmaciones de connotación histórica y
de carácter prudencial, que, aunque no sean falsas,
pueden variar si cambian las circunstancias
Si consta con claridad que las circunstancias son distintas,
pierden su fuerza vinculante
26. Las respuestas a las principales leyendas negras sobre
este tema son:
1)Los Obispos y el Papa son hombres y comenten errores,
por lo que no pueden ser infalibles en algo que afirmen como
«dogma»
Respuesta: Sí son hombres y pecadores, pero son además
Apóstoles enviados por Cristo con la misión de enseñar y
decidir en su nombre respecto a la fe y las costumbres
cristianas, para lo cual Crsito aseguró su presencia en
la Iglesia y la asistencia continua del Espíritu Santo,
fuente del don de la infalibilidad
27. Cristo prometió a Pedro y a los Apóstoles
que Él estaría con ellos
«todos los días hasta el fin del mundo» (Mt 28,18)
y que serían asistidos continuamente
por el Espíritu Santo, quien les
«enseñará todo» lo que tengan que decir (Jn 14, 26)
28. Nombró a Pedro su Vicario en la tierra,
la piedra sobre la que edificó su Iglesia,
otorgándole el poder de decidir en su nombre
A los Apóstoles les encomendó la misión de enseñar la fe
y las costumbres que Él les había transmitido, afirmando
que el que escucha a sus Apóstoles a Él lo escucha
29. 2) La infalibilidad de los Obispos y del Papa en la
definición de dogmas de fe coarta la libertad humana,
por lo que no es humano ni cristiano
Respuesta: los dogmas no coartan la libertad de los
cristianos, pues el Papa y los Obispos se limitan a
enseñar sobre verdades de fe que ya se encontraban
presentes en la Sagrada Escritura y en la Tradición
viva de la Iglesia, fuentes de la Revelación que el
cristiano acepta libremente al incorporarse a la Iglesia
30. 3) Cuando el Papa hace una definición de un dogma de
manera solemne o «ex cathedra» sí es válida, pero no
cuando habla de manera ordinaria, por lo que en este
caso no hay obligación de obedecer
Respuesta: existen varios tipos de infalibilidad dentro de
la Iglesia, como el magisterio ordinario y extraordinario
de los Obispos, y el magisterio ordinario y
extraordinario del Papa. Existe obligación de creer y
obedecer cuando hablan sobre fe y costumbres
apelando a su autoridad recibida de Cristo. Cuando
hablan de otros temas y sin apelar a su autoridad de
pastores, se debe a su palabra una religiosa sumisión
de la voluntad y del entendimiento
31. Finalmente, se recomienda para fomentar la virtud de
la fe y la obediencia cristianas en el Santo Padre y
en los Obispos, así como en los fieles de la Iglesia,
orar unos por otros y pedir a Dios aumento de la fe
y amor a Él para imitarle en la obediencia
32. “Venid a mí todos los que estáis cansados y agobiados,
que Yo os aliviaré. Cargad con mi yugo y aprended
de Mí, que soy manso y humilde de corazón,
y encontraréis descanso para vuestras almas”
(Mt 11,28-29)