La carta iberoamericana de gobierno electrónico busca establecer las bases conceptuales y componentes del gobierno electrónico en Iberoamérica. Las tecnologías de información y comunicación han sido fundamentales para la implementación del gobierno electrónico. Los valores centrales son igualdad, legalidad, transparencia y accesibilidad. Aún queda trabajo para lograr los objetivos de la carta, como mejorar el acceso y homologar la información entre canales.
1. UNIVERSIDAD FERMÍN TORO
VICE-RECTORADO ACADÉMICO
FACULTAD DE CIENCIAS JURÍDICAS Y POLÍTICAS
ESCUELA DE DERECHO
Ensayo
Carta Iberoamericana de gobierno electrónico.
Alumna:
Eva Sánchez
C.I: 20.540.464
Materia: Informática jurídica
Profesor: juan Capote
Sección: SAIA F
2. Uno de los objetivos de la Carta Iberoamérica es
determinar las bases conceptuales y los componentes que
constituyen el Gobierno Electrónico para Iberoamérica, esto
requiere mucho trabajo para así poderlos lograr y este debe
estar dirigido por el liderazgo gubernamental.
Las Tecnologías de Información y Comunicación (TIC)
han sido determinantes en la implementación del Gobierno
Electrónico, es una preocupación de los entes
gubernamentales en cuanto a la información, la importancia
del gobierno electrónico tiene por objeto revisar el rol
de la información su gestión y calidad.
Las organizaciones públicas deben definir sus propios
objetivos en gobierno electrónico. No cambiarán su
estructura de manera significativa, pero deben adaptar sus
procesos para brindar mejores servicios y con mayor
alcance.
Entonces se entiende al “Gobierno Electrónico” como el
uso de las tecnologías de la información y la comunicación
en los órganos de la Administración para mejorar la
información y los servicios ofrecidos a los ciudadanos,
orientar la eficacia y eficiencia de la gestión pública e
incrementar sustantivamente la transparencia del sector
público y la participación de los ciudadanos.
Los valores centrales predicados por esta Carta son:
igualdad, legalidad, conservación, transparencia y
accesibilidad, seguridad, responsabilidad y adecuación
tecnológica. También hay coincidencias en que se debe poner
el foco en los destinatarios del gobierno electrónico: el
ciudadano y la sociedad.
3. Luego de esas primeras iniciativas se presentan, a
nuestro juicio, dos prioridades que deben atenderse:
Primera, de lograr la plena accesibilidad al gobierno
electrónico ya que sino se logra esto atenta contra el
derecho de igualdad de oportunidades de los ciudadanos
Segundo, es homologar la información que se brinda a
distancia para acceder a los servicios con la información
que se provee en forma presencial: la normativa, los
procedimientos, los requisitos. Los ciudadanos son cautivos
del sector público en tanto tienen obligación de concurrir
a sus oficinas para ejercer sus derechos y cumplir
obligaciones. No conocen toda la legislación ni el alcance
de los programas y servicios que se diseñan en la Nación y
que tienen alcance regional y local. Desean perder el menor
tiempo posible ante el arduo proceso: ubicar los puntos de
contacto de la organización, horarios de atención, recibir
información clara sobre requisitos, resolución de dudas,
sus aranceles, tiempo de demora durante el trámite. No les
interesan tanto los procesos internos de los trámites como
el resultado obtenido.
Se han desarrollado en forma creciente las páginas web
institucionales con mucha y variada información. Pero no
hay que descuidar el hecho que ordenar la trastienda es
prioritario antes que colocar atractivos frentes de
presentación.
Los directivos reconocen la importancia de la
innovación y de compartir información con otros organismos
para evitar la duplicidad de datos, pero son reacios a
suministrar datos producidos ya que aducen el costo de la
carga, del mantenimiento y la intimidad de los mismos.
4. La línea de funcionarios de atención de público es
consciente del atraso tecnológico en la prestación directa
de servicios pero adjudica las demoras en la actualización
de tecnología y mejora de procesos, y con razón, a los
niveles directivos.
La implementación del gobierno electrónico requiere
mucho trabajo aún para lograr los objetivos enunciados en
la Carta Iberoamericana. Un gran potencial debe ser
dirigido por el liderazgo gubernamental, la normativa, la
agenda de gobierno, las constelaciones de trabajo y el
diseño de indicadores y análisis de resultados para
aprovechar el desarrollo de las nuevas tecnologías de la
información y la comunicación para lograr un estado más
accesible e igualitario.
Como consecuencia de diversos factores no habrá un
modelo único de gobierno electrónico en Iberoamérica. El
estado nacional definirá objetivos centrales y resultados
esperados, un portal de acceso central en red con su
estructura y vinculado con los niveles provinciales de
gobierno.
Las organizaciones públicas deben definir sus propios
objetivos en gobierno electrónico. No cambiarán su
estructura de manera significativa, pero deben adaptar sus
procesos para brindar mejores servicios y con mayor
alcance.
El sector privado debe ser invitado a trabajar en
conjunto con el sector público, a participar del trabajo en
equipo y el diseño de propuestas.
Uno de los alcances que tiene esta carta es Dirigir
por vía electrónica todo tipo de escritos, recursos,
reclamaciones y quejas a los Gobiernos y las
Administraciones Públicas quedando así obligados a
5. resolver como si se hubiera realizado por medios
tradicionales.
Por medios electrónicos se pude realizar todo tipo de
pagos, presentar y liquidar impuestos y cualquier otra
clase de obligaciones.
Algo que quiero resaltar es que las Administraciones
serán responsables de la integridad, veracidad y calidad de
los datos, servicios e informaciones en sus sitios
electrónicos y portales.
No se podrán figurar avisos de exenciones de
responsabilidad por el contenido de las mismas si se ven
dichos avisos no podrá considerase una sede electrónica
El gobierno electrónico quiere que haya relación entre
la administración pública y dicho gobierno electrónico en
todo momento. Los Estados iberoamericanos regularán sobre
los registros electrónicos y su régimen jurídico, de forma
que se garanticen la seguridad y autenticidad de las
comunicaciones, así como la forma de acreditar la fecha y
hora en que se han realizado, que en todo caso serán
automáticas.
Los estados deberán tomar en cuenta el derecho de
los ciudadanos a emplear medios electrónicos esto exige
tiempo de ahí que entre la eficiencia la planificación
para el establecimiento del gobierno electrónico con
criterios de flexibilidad.
Toda esta preparación deberá incluir de forma
permanente y las iniciativas de cambio desde espacios
flexibles y aprendizaje situado a fin de garantizar la
transformación de las culturas organizacionales y
reformulación de prácticas.
6. Los Estados deben tener en cuenta que los sistemas y
programas deben ser de uso fácil. Para que los puedan
manejar de forma correcta tienen que ser disponibles,
accesibles y manejables intuitivamente por el ciudadano. Y
también se debe promover mecanismos de accesos a los medios
electrónicos para las personas que no lo disponen, todo
ciudadano se debe beneficiar. En especial, para América
Latina es indispensable crear, mediante medidas
específicas, condiciones favorables que le permitan a las
etnias y comunidades indígenas acceder, participar y
beneficiarse de los servicios electrónicos.