Discurso de despedida a los alumnos de septimo grado
1. DISCURSO DE DESPEDIDA A LOS ALUMNOS DE SEPTIMO GRADO
Chicuelos y Chicuelas, como les suelo decir a los chicos mas chiquitos. Todos los
padres, tenemos muy presente el tiempo que paso, 7 años, pero en este instante ,
miramos hacia atrás y decimos, 7 añitos pasaron, porque parecieron pasar demasiado
rapido y recordamos con un cúmulo de temores que cada uno tenia bajo el brazo, los
llevamos por primera vez a la escuela y eran pequeñitos soñando a aprender a y llegar
llegar a ser grandes. Ahora, aquéllos temores pasaron, pero llegan algunas dudas sobre
lo que vendra en la historia de cada uno, con nuevos amigos, otras materias, con la
secundaria ya asomando solo a unos meses de distancia, y con esto, algo que si
sentimos tambien es un poco de tristeza, n o de la mala, sino noltalgiosa, por los
compañeros que se van, por los lazos que se cortan, por la etapa que termina , si , es
hora de una despedida, entre Uds. de decir:¡Adiós! Se despiden de su escuela, de sus
maestros que los formaron en estos años y atrás, quedarán sus puertas abiertas y un
recuerdo tan nítido de sus horas de recreo, los juegos divertidos y los no tanto, tantas
cosas. Han sido 7 años de esfuerzo y, en ocasiones, las tareas escolares fueron muy
complicadas. Pero fueron también 7 años de recompensas y de satisfacciones, de
amistades y recuerdos que permanecerán para siempre en el libro de sus vidas.
Sus maestros los recordarán como estudiantes honestos y responsables, alegres y
comprometidos. A partir de este momento, la primaria será un capítulo en el libro de sus
vidas. Ahora se enfrentarán a un presente con nuevos desafíos. En las turbulencias que
pudieran surgir en su camino, cada uno de Ustedes deberá reafirmar una visión de
justicia, de paz y de respeto a los derechos humanos y a las leyes que rigen nuestro país.
Por ahora, una cosa les debe quedar clara: el estudio, y nada más que el estudio, será la
llave que les abrirá las puertas del mañana. En un mundo cambiante como el que les
tocó vivir, la preparación es la mejor estrategia para enfrentar las crisis de un mundo
incierto. El futuro de cada uno de Ustedes no está en manos del destino; y aún cuando
pudieran creer que el destino es el que baraja las cartas, son Ustedes quienes las juegan.
Lo que les quiero decir, es que Ustedes formarán su propio destino. Ustedes y sólo
Ustedes son quienes deben preguntarse qué es lo desean hacer con sus vidas. Sus
padres, sus maestros, han puesto los cimientos: el respeto a la dignidad de la persona; el
respeto que debe empezar por Ustedes mismos, y debe continuar con sus familias, con
todos los que los rodean y con la sociedad entera. Aprendan a decir sí, y aprendan a
decir no, cuando sea necesario. ¡Ustedes son personas valiosas! ¡No permitan que nada
ni nadie los desvíe de su camino como personas dignas y honestas! Sigan siendo buenos
hijos, respeten siempre a sus padres, protejan a sus hermanos. Sean personas cabales.
Un hombre cabal, una mujer cabal, es una persona comprometida con su familia y con
la sociedad, pero sobre todo, comprometida consigo misma. Asuman con entrega, con
coraje y con valor la responsabilidad de empuñar el timón de sus vidas, que la mar les
pertenece ¡Buen viaje!