Autores: Por: Jhon Jairo Lozano Ramirez y Miguel Ángel García Pulgarín Tema: Los ambientes de aprendizaje emergentes desde un enfoque lúdico. El ambiente escolar, es vital para la movilización de aprendizajes entre docente-estudiante, estudiante-estudiantes y estudiante-contenidos

1. LOS AMBIENTES DE APRENDIZAJE EMERGENTES DESDE UN ENFOQUE
LÚDICO-PEDAGÓGICO
Por: Jhon Jairo Lozano Ramirez y Miguel Ángel García Pulgarín
Los ambientes de aprendizaje son espacios interactivos donde los sujetos educativos
disfrutan y comparten experiencias de vida, sacándole provecho al disfrute del tiempo libre.
Para Romero y colaboradores (2020, p. 9), un ambiente de aprendizaje es entendido como
“el medio que rodea a las personas y los demás seres vivos con los cuales interactúan, de esta
forma el ambiente se deriva de la interacción del hombre con su entorno natural y social,
donde es necesario unos recursos mediadores como: aulas, polideportivos, patios, áreas
verdes, paredes, enseres, materiales, juegos y ayudas audiovisuales.
Ahora, la definición semántica sobre la categoría ambientes de aprendizaje, es
extrapolada de las corrientes ambientalistas y la pedagogía liberadora que buscan que el
proceso de aprender se constituya en un espacio lúdico, participativo y dialógico que permita
las relaciones humanas y la exploración planetaria. Por tanto, el concepto de ambiente de
aprendizaje supone una comprensión focalizada al dinamismo interactivo entre las personas.
Complementando lo anterior, Sepúlveda (2004, p. 78) señala que “se asume el ambiente
como un complejo sistema de interrelaciones, entre el espacio físico y sociocultural, en medio
del cual está la especie humana, actuando como motor de ese dinamismo”, donde el diálogo

2. posibilita el entendimiento de diversas actividades lúdico-pedagógicas, conducentes al
aprendizaje.
En la relación con lo expuesto, es muy importante que los maestros propicien
ambientes de aprendizaje mediados por diferentes recursos educativos para favorecen
aspectos relacionados con los componentes cognitivos, socio-afectivos, socio-emocionales y
de convivencia, dado que los ambientes están directamente relacionados con lo social y el
ambiente natural. Complementando lo anterior, Hernández (1999, p. 109) afirma que “el
ambiente natural designa una parte del mundo físico”, donde están inmersos diferentes
factores: físicos, biológicos, psicológicos, culturales y sociales. Ahora, el ambiente es
eminentemente geográfico y en él interactúan los sujetos de aprendizaje, asimismo, otros
seres vivos y abióticos, los cuales se nutren y se benefician de elementos naturales, como: el
aire, la luz solar, la temperatura, la radiación ultravioleta, la atmosfera, el agua, el clima y la
topografía. Fuera de ello, también dentro del espacio planetario, existen los recursos físicos
y los dispositivos tecnológicos que median el aprendizaje, siendo la exploración del medio,
la interacción humana y el uso de recursos una conjugación indispensable para crear y recrear
el intercambio de saberes.
Por su parte, el ambiente escolar, es vital para la movilización de aprendizajes entre
docente-estudiante, estudiante-estudiantes y estudiante-contenidos (Sánchez, 2020, p. 3), de
ahí que, la escuela sea una institución social por excelencia que posibilita la interacción
comunicativa y la puesta en escena de diversas prácticas socio-culturales, entre ellas, el juego

3. como una actividad recreativa que propicia el disfrute del tiempo libre y el aprovechamiento
de diferentes recursos educativos para aprender juntos. Otra práctica socio-cultural que se
fomenta en el contexto escolar es la acción comunicativa, donde su propósito es el
entendimiento de los unos con los otros que permita el pleno goce de la convivencia y la
ciudadanía.
Por tanto, el ambiente escolar es un espacio complementario que permite reforzar las
relaciones socio-afectivas y del mismo modo, es un medio geográfico que favorece el
intercambio de saberes en dos direcciones: la primera de manera vertical, donde interactúan
el maestro y los estudiantes y la segunda de manera horizontal, donde existe un dinamismo
entre los estudiantes y el maestro. Dichas relaciones han permitido la emergencia de nuevos
paradigmas educativos en la última década, como: la clase invertida, las comunidades
virtuales de aprendizaje, los complejos virtuales de aprendizaje, la tele-educación, el
aprendizaje mediados por la multimedia y los textos multimodales, la creación de salas
virtuales de aprendizaje y la concreción de espacios lúdicos mediados por la pedagogía del
juego, cada uno de los anteriores ambientes de aprendizaje se focalizan desde una perspectiva
lúdico-pedagógica.
De otro modo, es relevante señalar que en un ambiente de aprendizaje emergente es
relevante la gestión del capital humano, la gestión de los dispositivos educativos y la gestión
de las variables que intervienen en los procesos de enseñanza y aprendizaje (gestión de
personas, gestión del currículo, gestión de recursos educativos y gestión del tiempo). En ese

4. sentido, en la gestión de personas (estudiantes, cuidadores y familia), es fundamental el uso
apropiado del lenguaje para la comprensión de tareas dosificadas y la realización efectiva de
las mismas, siendo necesario el diseño y ejecución de estrategias de aprendizaje, mediadas
por el uso de dispositivos tecnológicos y la inmersión de la vida en red. De otro modo, la
gestión del currículo educativo en este tiempo de crisis, no debe ser parametrizado, más bien
ha de ser flexible y participativo que permita que los estudiantes puedan acceder a contenidos
básicos que les enseñe a ser ciudadanos competentes en: ciudadanía, pensamiento crítico,
pensamiento resolutivo y en habilidades socio-afectivas. Asimismo, es indispensable
gestionar un currículo pensado en la interacción dialógica.
Por tanto, gestionar el currículo en tiempo de crisis, es comprender que los planes de
estudio no son rígidos ni lineales, sino que éstos deben ser orientados desde el trabajo
colaborativo y cooperativo. Incluso es necesario la creación de comunidades virtuales de
aprendizaje, dado que al estar los estudiantes en confinamiento requieren del apoyo de los
actores educativos (pares, tutores, maestros, directivos docentes, orientadores escolares,
psicólogos, cuidadores y la familia), entendiéndose que la familia no reemplaza la escuela
porque cumplen funciones pedagógicas diferentes y ello implica que la familia asuma un
proceso de re-educación para el acompañamiento pedagógico de los niños y jóvenes.
Ahora, en lo que respecta a la gestión de los recursos educativos, es importante tener
en cuenta que éstos elementos son mediadores del acto educativo porque, en primer lugar,
implica la presencia o en su efecto la voz del maestro como actor dinamizador en el proceso

5. de enseñanza En segundo lugar, se requiere la utilización de materiales, dispositivos,
herramientas e instrumentos que faciliten la mediación y la transferencia de la información y
del conocimiento en el proceso de aprendizaje. Finalmente, la gestión del tiempo, se
constituye en una variable importante para programar los ambientes de aprendizaje virtual,
bien sea de manera sincrónica o asincrónica, teniendo siempre presente que un ambiente de
aprendizaje virtual es flexible y por tanto la optimización del tiempo y las horas de
interacción dialógica no son las mismas que las de un espacio presencial.
En definitiva, se puede decir que los ambientes de aprendizaje emergentes desde un
enfoque lúdico-pedagógico, permiten el uso de diversos recursos educativos (físicos y
tecnológicos), asimismo, la implementación de actividades físicas, recreativas, motrices,
sociales y académicas. De igual manera, en los ambientes de aprendizaje emergente, es
necesario la movilización de una pedagogía humana, fundada en la empatía y el
entendimiento entre el maestro, los estudiantes y la familia.

6. Referencias
Romero J, Castro D Johana, Galvis L, Acuña B. (2020). Ambientes de aprendizaje y sus
mediaciones En el contexto educativo de Bogotá Rita Flórez. Serie Investigación
IDEP. Bogotá. Colombia.
Sepúlveda (2004). Los ambientes de aprendizaje. Artículo de revisión. Revista Educar.
Colombia.
Hernández (1999). Los ambientes de aprendizaje dentro del contexto escolar. PDF. Texto
recuperado en: internet.
Ministerio de Educación Nacional (2020). Ambientes de aprendizaje emergentes. Plataforma
Colombia Aprende. Bogotá. Colombia.
Sánchez, J. (2020). Pedagogía para la enseñanza virtual. Curso virtual. Unidad Central del
Valle (UCEVA), Tuluá, Colombia.