Las coordenadas polares representan la posición de un punto en un plano mediante una distancia y un ángulo desde un origen y una línea de referencia. Expresar números complejos en su forma polar simplifica operaciones como la multiplicación, división y cálculo de raíces. Para calcular el área de figuras como triángulos y polígonos, existen fórmulas como la de Herón que usan las longitudes de los lados o la división en triángulos más simples de sumar.