2. Nos situamos en un centro pequeño, con un claustro reducido, donde las relaciones
personales adquieren una especial relevancia. El nivel de coordinación y compromiso
necesitan mejorar, esto se hace patente cuando tras concretar las actuaciones a realizar por
el claustro del centro en una determinada temática, ocurre que no se terminan de cumplir las
mismas, es decir, no se consigue el compromiso sincero de parte del profesorado a la hora
de abordar algunas actuaciones.
Además, la situación actual del centro presenta una sensación de estancamiento que parece
imposible abordar desde la disgregación existente entre sus miembros. Parece razonable
pensar que el énfasis sobre construir una visión y unas directrices claras, proyectará al
centro hacia el futuro, hacia la mejora de lo que ya existe.
Deberemos plantearnos la necesidad de motivar a la comunidad y crear una visión
compartida, de manera que promovamos en la organización el deseo de mejorar y la ilusión
por lograrlo.
Proyecto de Dirección
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Análisis de la realidad de nuestro centro. 1/3
3. Necesitamos desarrollar una visión participativa con capacidad de influencia positiva en los
otros y capaz de gestionar individualismos hacia objetivos e intereses colectivos.
Para conseguir todo lo anterior deberemos aplicar actuaciones concretas que nos permitan
ser cercanos, mostrar consideración y apoyo, escuchar las ideas del profesorado y mirar
siempre por el bienestar personal y profesional de los docentes.
Abrir canales de comunicación que permitan desde la crítica positiva reconocer y gratificar el
trabajo bien hecho y proporcionan feedback al profesorado sobre su labor.
No podemos dejar de actuar para potenciar una cultura general de colaboración, fomentar
relaciones productivas con las familias y el alumnado, y la creación de redes de colaboración
con el entorno más cercano al centro.
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Análisis de la realidad de nuestro centro. 2/3
6. 1. Potenciar la distribución del liderazgo fomentando el trabajo en equipo entre el
profesorado, incentivando el desarrollo de culturas colaborativas y compartiendo buenas
prácticas en este ámbito.
2. Gestionar el consenso para conocer la capacidad de compromiso de las personas con los
procesos que desarrolla la comunidad educativa. Por tanto, el poder y la responsabilidad son
conceptos que deben discutirse ampliamente y llegar a cierto acuerdo para obtener la
colaboración de los demás.
3. Apoyar la distribución del liderazgo, proporcionando a los líderes escolares la formación
adecuada.
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Nuestro liderazgo pedagógico o educativo. 1/2
7. 4. Animar al profesorado a evaluar y desarrollar la calidad docente fortaleciendo su
responsabilidad en la toma de decisiones relacionadas con el curriculum, de modo que
puedan adaptarlo a las necesidades locales y garantizar la coherencia entre los cursos y los
niveles.
5. Potenciar la distribución de responsabilidades de liderazgo dentro de las escuelas,
facilitando y apoyando la creación y sostenimiento de redes internas de colaboración y
aprendizaje.
6. Distribuir las labores relacionadas con la evaluación y la rendición de cuentas dentro de
las escuelas al desarrollar un grupo de personas competentes y seguras respecto del análisis
y el uso de la información para formular estrategias de mejora apropiadas.
7. Fomentar mecanismos formales de participación que permitan la implicación de la
comunidad educativa en la gestión del centro.
Proyecto de Dirección
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Nuestro liderazgo pedagógico o educativo. 1/2
9. El Proyecto Educativo de Centro supone la máxima expresión de la autonomía del mismo.
Esto es así, en cuanto que da soporte a la identidad del centro, concreta sus objetivos y
orienta su actividad favoreciendo la mejora educativa.
En su elaboración y mantenimiento debe contarse con la colaboración de toda la comunidad
educativa y es necesario partir del análisis del contexto y la detección de las necesidades y/o
singularidades del mismo a la hora de redactarlo.
Por todo lo anterior, es preciso que cada centro establezca los mecanismos para identificar
cuáles son sus fortalezas y cuáles las necesidades de su entorno, de esta manera podremos
tomar decisiones sobre cómo mejorar la oferta educativa y la metodológica aplicada en los
procesos de enseñanza aprendizaje.
Sin duda, por la variedad de aspectos desarrollados en el Proyecto Educativo de Centro
podemos considerarlo, como señalan algunos autores, como un proyecto de proyectos.
Proyecto de Dirección
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El Proyecto Educativo de Centro. 1/5
10. El Proyecto Educativo de Centro es un documento realizado en 2010, por lo que cuenta ya
con ocho cursos de edad. Aunque desde entonces se han realizado algunas modificaciones
en el texto original, esto se ha debido más a la necesidad de realizar una actualización
normativa del texto y no al deseo de mantenerlo como un documento “vivo” y en proceso que
está abierto a los cambios y mejoras.
La realidad descrita junto a la elevada inestabilidad en la plantilla que presenta el centro
hace que pocos miembros del claustro actual recuerden haber participado en la redacción
del documento original. Esta situación fomenta la precepción de una parte del claustro hacia
el Proyecto Educativo de Centro, considerándolo como un documento burocrático y ajeno a la
realidad de su labor docente.
Quizás este sea el aspecto más destacable a realizar en el presente análisis, pues aunque el
documento presenta una estructura y contenidos adecuados, en el día a día de centro
presenta un desarrollo mínimo de los mismos.
Proyecto de Dirección
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El Proyecto Educativo de Centro. 2/5
11. Por último, intentaremos establecer un vínculo directo entre el proyecto educativo y nuestro
proyecto de dirección, considerando las siguientes actuaciones.
ÁREA DE LA ENSEÑANZA-APRENDIZAJE
• Establecer la mejora de los resultados académicos como referencia en el Plan de Centro.
• Aumentar el porcentaje de alumnado que prosigue estudios posteriores.
• Reducir el nivel de absentismo escolar.
ÁREA DE LA ATENCIÓN A LA DIVERSIDAD
• Ayudar a la correcta inclusión del alumnado con necesidades específicas de apoyo
educativo para garantizar la igualdad de oportunidades en el centro.
• Facilitar la adaptación del alumnado que ha cursado un PMAR a 4º de ESO.
• Mejorar los recursos existentes para favorecer la correcta la integración del alumnado
del aula de educación específica.
• Realizar un seguimiento y evaluación de las adaptaciones curriculares desarrolladas.
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El Proyecto Educativo de Centro. 3/5
12. ÁREA DE LAS COMPETENCIAS CLAVE
• Aumentar el grado de adquisición de la competencia lingüística en todos los cursos del
Centro
• Aumentar el grado de adquisición de la competencia digital tanto en el alumnado como
en el profesorado.
ÁREA DE LA PARTICIPACIÓN Y DE LAS RELACIONES CON EL ENTORNO
• Potenciar el uso de la aplicación iSéneca y la página web del centro.
• Incrementar el grado de satisfacción de los diferentes sectores de la comunidad
educativa.
• Promover las relaciones con el entorno y la utilización de las instalaciones del centro.
• Realizar un plan de formación del profesorado acorde a las necesidades del centro.
ÁREA DE LA GESTIÓN DEL CENTRO
• Actualización y dinamización de los documentos del Proyecto de Centro.
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El Proyecto Educativo de Centro. 4/5
13. ÁREA DE CONVIVENCIA ESCOLAR
• Sensibilización y análisis del estado de la convivencia escolar.
• Establecimiento de una Comisión Mixta que promueva el liderazgo compartido y facilite
el acceso de las familias a la escuela.
• Redacción y difusión de una propuesta de contenidos del nuevo Plan de Convivencia
para su posterior aprobación por parte del Consejo Escolar.
• Establecer los procedimientos adecuados para el seguimiento, evaluación y revisión del
Plan de Convivencia de centro.
ÁREA DE LA ORGANIZACIÓN Y FUNCIONAMIENTO
• Seguir avanzando en los planes y proyectos que forman parte de la identidad del centro.
• Seguir avanzando en la organización de actividades extraescolares y complementarias.
• Actualizar y mejorar el actual programa de tránsito.
• Actualizar y potenciar los procedimientos de coordinación docentes y órganos colegiados.
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El Proyecto Educativo de Centro. 5/5
15. Partimos de una premisa clara, debemos considerar nuestro centro como una comunidad.
Desde esta perspectiva nuestro trabajo docente no puede ser considerado como una
actuación aislada, sino más bien como una tarea compartida que precisa del compromiso de
toda la comunidad educativa. Pero este compromiso no se alcanzará hasta que no
dispongamos de cauces y mecanismos apropiados que faciliten la participación y el diálogo
de las familias.
En la actualidad nuestro centro se encuentra con una realidad que dista mucho de la
concepción de comunidad que hemos comentado. La participación de las familias en el
centro es muy pobre y se hace evidente en una baja asistencia a las reuniones de tutoría de
inicio y final de curso, una escasa participación en las elecciones al Consejo Escolar y al
hecho de que aunque disponemos de AMPA, sus actividades e infraestructura son mínimas.
La figura de delegados de padres y madres se ha intentado crear en algunas ocasiones sin
éxito.
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Familias y comunidad educativa. 1/4
16. Debemos hacer accesible a las familias la información oportuna (de modo comprensible y
por vías accesibles) sobre distintos aspectos de la vida del centro, pues la participación sólo
es posible si se comparte ampliamente información con los miembros de la comunidad.
En nuestro centro debemos ser capaces de asumir el respeto como principio sobre el que
asentar las relaciones y dinámicas de participación. Todas las opiniones y experiencias son
potencialmente valiosas; todos los participantes tienen posibilidad de plantear posturas,
opciones e ideas, y negociarlas en procesos de diálogo sin tener que defenderlas
conflictivamente.
Desde la dirección tenemos la responsabilidad de potenciar una dinámica de participación
que genere la confianza y el sentimiento de que merece la pena participar con el centro.
Además, deberemos facilitar la participación de todas las familias, no sólo con las que
asisten regularmente al centro; también para aquellas familias con menos conciencia y
experiencia de relación con el centro al que asisten sus hijos e hijas.
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Familias y comunidad educativa. 2/4
17. Incrementar la satisfacción de los diferentes sectores de la comunidad educativa.
• Habilitar un espacio permanente para el AMPA del centro.
• Habilitar una zona de atención a las familias.
• Utilizar la aplicación IPASEN para la comunicación entre tutoría y familia.
• Realizar convocatorias que favorezcan la asistencia de todos los miembros de la
Comunidad Educativa en los órganos colegiados (en horario que permita la asistencia de
sus miembros).
• Potenciar la participación de los padres y madres en la vida del centro, manteniéndoles
informados de las decisiones tomadas que afectan en la educación de sus hijos, y
comunicarnos con ellos a través de diferentes medios.
• Fomentar la creación de la Junta de Delegados y Delegadas de las familias.
• Potenciar y cuidar las tutorías regulares con las familias y el alumnado como ocasión,
entre otras cosas, para conocer más su cultura y la de la comunidad local con vistas a
utilizar tal conocimiento en el trabajo en las aulas.
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Familias y comunidad educativa. 3/4
18. Promover un centro de puertas abiertas que mejore las relaciones con el entorno.
• Ofrecer las instalaciones del centro para la realización de actividades culturales y
deportivas de la localidad.
• Realizar actividades extraescolares y complementarias visitando empresas locales.
• Proyectar la imagen del instituto difundiendo las actividades que se realizan y abriendo
su realidad al entorno.
• Fomentar la colaboración con el área de juventud y deportes del ayuntamiento de la
localidad.
• Captar a entidades, organizaciones, personas particulares del entorno que puedan
proporcionar recursos educativos, apoyos y oportunidades significativas de aprendizaje.
• Rentabilizar actividades complementarias ofertadas por otras entidades y asociaciones,
programas y proyectos que ofrecen ONG…, en relación con aspectos específicos
(convivencia, crecer juntos, violencia de género, drogas y riesgos, resolución de
conflictos, de mediación, etc.).
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Familias y comunidad educativa. 4/4
20. Sin duda, es esperable de la persona que ejerza la dirección de un centro educativo posea
una serie de destrezas técnicas y personales, pero me parece muy interesante el punto de
vista que en “Factores Clave para una Dirección Eficaz” desarrolla el profesor Julián López
Yáñez.
Julián López nos señala como a la hora de autoevaluar nuestras capacidades o
competencias, debemos realizar un esfuerzo para ajustar nuestro perfil a cada contexto
particular, no solo en el sentido de dominar mejor algunas competencias, sino también en el
de moderar o aminorar el ejercicio de algunas otras.
Por tanto, se debe tener en cuenta que los valores más elevados no necesariamente
constituyen los mejores resultados. De hecho no podemos sacar conclusiones definitivas
respecto al grado de eficacia que cabe asociar a los altos o bajos resultados. Debemos
analizar si nuestro perfil de competencias de liderazgo se ajusta en mayor o menor medida a
las demandas del contexto y a las expectativas del grupo.
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Recursos humanos y habilidades. 1/3
24. ¿Qué debe hacer el mundo educativo para responder al reto de las nuevas tecnologías
aplicadas a la educación? La capacitación de los docentes es una estrategia imprescindible,
pero no la única a tener en cuenta. Los aspectos organizativos y estructurales tienen,
también, una gran importancia.
No puede haber innovación educativa sin el apoyo, la planificación y la orientación del
Equipo Directivo del centro, comenzando por su director. Tratar de utilizar las TIC en un
centro docente que no cuente con el apoyo y la planificación de la dirección es caminar hacia
el fracaso.
El apoyo se inicia con el convencimiento, por parte del Equipo Directivo, de que nos
encontramos ante una nueva situación y un nuevo paradigma y que hay que afrontar un
cambio de enfoque en el que debemos participar todos. Por lo tanto, los Equipos Directivos
deben apoyar a los docentes más motivados, animar a los dudosos y resolver las
dificultades de los profesores renuentes y negativos.
Proyecto de Dirección
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TIC en el centro educativo. 1/1
25. Proyecto de Dirección
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Seguimiento y evaluación del proyecto de
dirección.
26. Los procesos de evaluación en centros educativos presentan dos grandes finalidades: por
una parte, mejorar los procesos y los resultados y, por otra, rendir cuentas a la comunidad
educativa y ante la sociedad. Sin duda, la autonomía y la cada vez más necesaria
transparencia en la gestión de los centros así lo exigen.
Desde esta perspectiva la evaluación se presenta como un requisito para la mejora, pues
resultará difícil mejorar aquello que no se conoce. Una correcta evaluación se convierte en
un instrumento que permite encontrar los puntos fuertes y débiles del proyecto de dirección y
su análisis y valoración además facilitan los cambios necesarios para su mejora.
Por este motivo debemos entender la evaluación de la función directiva como una condición
necesaria para mejorar no solo labor de la dirección o del equipo directivo, sino también la
organización y funcionamiento del centro y de sus resultados.
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Seguimiento y evaluación del proyecto de dirección. 1/4
27. Partimos de una concepción de la evaluación como acción que se extiende más allá de la
medición de resultados, puesto que incluye, además del análisis y valoración de los logros
alcanzados, una reflexión sobre el modo en que se desarrollan los procesos que conducen a
los mismos, además del conocimiento de las causas que pueden estar facilitando o
dificultando esos procesos, y la búsqueda de estrategias que ayuden a mejorarlos.
En el proceso de evaluación deben participar como evaluadores: el alumnado y las familias,
el equipo directivo y el claustro, personal de administración y servicios del centro, otros
representantes de los servicios educativos como la inspección o la asesoría de referencia del
CEP y representantes de otras entidades como ayuntamiento de la localidad, organizaciones
sociales, etc.
No debemos olvidar que cada uno de estos agentes tiene una peculiar perspectiva y posee
condicionantes e intereses diversos. Tienen, como es lógico también, prejuicios y posibles
distorsiones que convienen tener en consideración.
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Seguimiento y evaluación del proyecto de dirección. 2/4
28. Podemos realizar una clasificación de los tiempos a considerar en el seguimiento y la
evaluación del proyecto de dirección agrupada en tres momentos, diferenciando unas
evaluaciones al principio y final de la etapa, así como otra a lo largo del desempeño.
Debemos remarcar la importancia de diseñar y planificar un calendario para el seguimiento y
evaluación, que mantendrá una relación estrecha con el propio calendario ya establecido en
el desarrollo del plan de actuación y la ejecución de las diversas tareas propuestas para la
consecución de los objetivos del proyecto de dirección.
• Evaluación inicial. Nos aporta unas primeras expectativas del proyecto de dirección.
• Evaluación a lo largo del desempeño. Esta evaluación es continua y descriptiva.
• Evaluación final. Transcurridos los cuatro años de mandato se realizará una
autoevaluación basada en los informes anuales, de la misma manera que será objeto de
evaluación por parte de la Inspección Educativa y de los distintos órganos colegiados y
sectores de la comunidad educativa.
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Seguimiento y evaluación del proyecto de dirección. 3/4
29. Con carácter general debemos considerar que los instrumentos utilizados para el
seguimiento y evaluación del proyecto de dirección deben estar en relación con los logros
previstos para los indicadores utilizados en el plan de actuación.
Atendiendo a lo anterior son instrumentos o referencias para el seguimiento y la evaluación:
• El resultado de los indicadores homologados en los informes de la AGAEVE.
• La memoria de autoevaluación y el plan de mejora del centro.
• Informe de seguimiento y evaluación anual del proyecto de dirección para los
distintos miembros de la comunidad educativa: Director, ETCP, Consejo Escolar.
• Encuestas de satisfacción a todos los agentes implicados en el proceso y distintos
sectores de la comunidad educativa, en función de los indicadores que las estimen.
• Actas de las reuniones de los distintos órganos colegiados.
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Seguimiento y evaluación del proyecto de dirección. 4/4
30. No hay forma más bella y eficaz de
autoridad que el ejemplo.
Miguel Ángel Santos Guerra
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