El documento contrasta el saber religioso con otros saberes como el mítico, literario y la filosofía. Explica que el saber religioso se basa en lo revelado en los textos sagrados y la tradición, a diferencia de otros saberes. También describe que la esencia del saber religioso contiene una fuerte dimensión vital y personal que impregna todos los aspectos de la vida de los creyentes debido a su fe.