La teoría del cierre categorial de Gustavo Bueno es una teoría epistemológica elaborada en los años 1970 que consta de cinco volúmenes y que delimita el campo de cada ciencia a través de categorías clasificadoras que cierran cada disciplina de forma racional. El cierre categorial establece los límites de cada ciencia mediante la predicación sobre la realidad y excluye pretensiones indefinidas de ampliar el conocimiento. La verdad es un elemento esencial de la ciencia según esta teoría y se entiende como la rel
1. Bueno y el cierre categorial
La teoría del cierre categorial de Gustavo Bueno es uno de los grandes
hitos filosóficos en lo que se puede denominar concepción de las
ciencias o gnoseología general. Y merece ser más estudiada, reconocida
y analizada, aunque ya sea valorada en España, Alemania y a nivel
internacional. Esta teoría que fue elaborada en los años 70 de pasado
siglo, ya consta de cinco volúmenes de los quince proyectados en un
principio. Por lo que se dispone de un muy abundante material
epistemológico, y acerca de historia y filosofía de la ciencia.
En el ámbito de las ciencias la construcción de teorías y las redes
proposicionales a ellas asociadas logran un estatuto científico,
precisamente por los límites o el cierre de categoría que determinan.
Como escribe Bueno: «El cierre químico -el de la Química clásica-,
representado por la tabla periódica, excluye cualquier vacua
pretensión de proseguir el descubrimiento de nuevos elementos de
modo indefinido». El cierre categorial es el resultado de la predicación
sobre la realidad con categorías clasificadoras estructuradas de un
modo estricto y riguroso. De este modo, el campo categorial de cada
ciencia queda delimitado de una forma racional y coherente.
Ciertamente, el sistema categorial de Aristóteles no se puede aplicar,
actualmente, para una clasificación de los campos teóricos de las
diversas ciencias existentes en la actualidad.
Como también indica Giménez Pérez: «Cuando hablamos en el
materialismo gnoseológico de “cierre categorial” se quiere decir con
ello que tal cierre no es meramente sintáctico, sino semántico,
operatorio, objetual, un cierre constituido por las cosas mismas que
cierran un campo». Porque el campo de objetos y cosas es algo
ontológico que no responde a las determinaciones del lenguaje
proposicional. Las categorías delimitan ciencias que son irreductibles
entre sí en el materialismo gnoseológico de Bueno.
Las tesis buenistas son la expresión de un pensamiento que polemiza y
critica las insuficiencias de otras alternativas dialécticas y
argumentativas que no son capaces de lograr una efectiva y potente
capacidad de análisis de las ciencias. Algo conseguido por la Teoría del
Cierre Categorial porque aplica técnicas interpretativas más finas y
minuciosas en su hermenéutica de la ciencia.
Los análisis y explicitaciones de la teoria de la ciencia de Bueno son
mejores y verdaderas, ya que las otras alternativas son erróneas. La
dialéctica circular del materialismo gnoseológico que es circular como
la platónica es verdad y se opone a la no verdad de otras teorías de la
ciencia que no definen con precisión.
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2. Como escribe Bueno: «La teoría del cierre categorial considera a la
verdad como un “predicado” esencial de la ciencia». Para el
materialismo la ciencia es el resultado de una construcción material
con términos y operaciones que fijan el campo de cada ciencia de una
forma minuciosa, y la verdad es la base o el fundamento legitimador de
la construcción misma de cada campo cientifico. Ya que la verdad no
es entendible al modo de Tarski como una especie de encaje entre
construcciones mentales o de lenguaje. Muy al contrario, la verdad es,
en el materialismo, una relación entre determinados términos de la
construcción operatoria. La verdad es lo propio de la ciencia, lo más
intrínseco de la misma. Porque la objetividad es el paradigma de la
verdad científica. A esto se une que los juicios sintéticos son los
auténticamente progresivos y originarios frente a los analíticos que son
autoexplicativos, y son conceptualizaciones que determinan límites
desde el planteamiento dialéctico materialista. De este modo, se sigue el
planteamiento kantiano acerca del aumento de conocimiento que
proporcionan los juicios sintéticos en comparación con los analíticos.
Una de las cuestiones esenciales que deja muy claras la teoría del cierre
de Bueno y, en definitiva, su gnoseología materialista es, precisamente,
la del radio temporal y espacial de la verdad, en contraposición a la
supuesta eternidad e inespacialidad de la misma. Ya que es cierto que
la materia de la verdad o sus contenidos son espacializables y
temporalizables, si bien las formas abstractas de las verdades pueden
ser intemporales desde un enfoque teórico y especulativo.
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