El tubo digestivo comienza en la boca y se extiende hasta el ano, midiendo aproximadamente 10-12 metros. Está compuesto de cuatro capas concéntricas y se divide en siete secciones principales que incluyen la boca, faringe, esófago, estómago, intestino delgado, intestino grueso y ano. La faringe conecta la boca y la nariz con la laringe y el esófago, ayudando a la respiración y deglución de alimentos.