Este documento presenta los objetivos y ejes temáticos de la unidad 3 sobre los procesos afectivos. Los objetivos incluyen comprender los postulados del psicoanálisis, las motivaciones y emociones humanas. Los ejes temáticos exploran el inconsciente, las teorías de Freud, la teoría del apego de Bowlby, y diferentes concepciones de la personalidad evaluada a través de pruebas psicológicas.
1. Unidad 3. Los procesos afectivos
Objetivos:
Comprender los postulados fundamentales de la teoría psicoanalítica.
Adquirir un conocimiento básico sobre los procesos de motivación. Reflexionar sobre la importancia de los motivos que mueven a las acciones humanas.
Adquirir un conocimiento básico sobre la expresión de las emociones.
Entender la importancia de la inteligencia emocional o interpersonal en el
desarrollo humano y la vida social.
Conocer algunas concepciones teóricas de la personalidad.
Ejes temáticos:
El Psicoanálisis en sus postulados fundamentales se ocupa de las
manifestaciones del inconsciente, las leyes de su funcionamiento, la 1º y
2º tópica, la evolución psicosexual y los mecanismo de defensa.
Las motivaciones constituyen tendencias de acción que dan sentido a la
actividad propia y de los otros.
Se establecen relaciones entre las necesidades, las motivaciones, los
conflictos y la frustración de un sujeto.
En la actualidad no es posible analizar y explicar la complejidad de la
mente humana dejando de lado la vida emocional y afectiva. El “edificio de
la razón” se desmorona sin una adecuada organización de las emociones
de una persona.
La teoría del apego formulada por John Bowlby sostiene que existe una
predisposición de origen biológico en los seres humanos para entrar en
una sintonía emocional con sus cuidadores. Se destaca la importancia del
contacto afectivo, la búsqueda de protección y vinculación interpersonal
característica de la especie.
Hay diversidad de definiciones de la personalidad según el marco teórico
desde el que se la aborde.
La búsqueda de instrumentos psicológicos válidos y confiables para la
evaluación de la personalidad fue una constante en el ámbito de la psicología.
Si bien cada sujeto es diferente a los demás, único, original e irrepetible,
se han procurado hallar patrones comunes subyacentes a las diversas formas de comportamiento. Entre los instrumentos utilizados encontramos
las observaciones, las entrevistas clínicas y los test (o pruebas) psicológicos, entre los que se encuentran los cuestionarios o inventarios de personalidad y los test proyectivos.