1. Leo Mamani Peñaranda, MD.
Profesor de Medicina Familiar
Universidad Nacional de San Agustín – Arequipa
I Curso Nacional de
Medicina Familiar
ARTROSIS, más allá de la
inercia clínica
4. CONCEPTO. Inercia clínica en enfermedades crónicas.
• Se entiende por “inercia clínica” la omisión en iniciar o
intensificar una terapia médica que está clínicamente
indicada y de la que se conoce su efectividad, para abordar un
problema de salud crónico insuficientemente controlado.
5.
6. En este caso el medico esta actuando con inercia
clínica.
7. El concepto de inercia clínica fue introducido en la literatura
médica (Phillips 2001). La idea de inercia clínica surge
principalmente del análisis del comportamiento médico frente a
tres enfermedades crónicas:
8. Una de las características propias de las enfermedades
susceptibles de provocar la inercia clínica es que son
generalmente asintomáticas (Phillips 2001).
9.
10.
11. La resistencia a la aplicación de las GPC tiene muchas causas
posibles, los factores que condicionan la inercia clínica, se
señalan tres grupos:
16. CONCLUSIONES
1. La inercia clínica es un problema común en el manejo de
pacientes con enfermedades crónicas asintomáticas, como la
hipertensión arterial, la dislipidemia y la diabetes. Podemos
decir que también existe en la artrosis.
2. Una causa fundamental de la inercia clínica es la falta de
educación/hábito y entrenamiento del médico en dirigir el
tratamiento al logro de las metas terapéuticas, lo que causa
la sobre-estimación de la atención provista, así como del uso
de razones inconsistentes para evitar la intensificación del
tratamiento.
17. CONCLUSIONES
3. Otra causa importante es la falta de organización del servicio
con los diferentes recursos destinados a facilitar el logro de
las metas terapéuticas: uso de flujogramas, recordatorios en
papel o computarizados, sesiones en equipo y feedback
periódico sobre el desempeño del médico. Son estrategias
que ayudan a evitar la inercia clínica y tienden a mejorar el
desempeño del médico.
18. CONCLUSIONES
4. Se requiere que los programas de educación médica en
pregrado y postgrado pongan énfasis no solo en el
conocimiento de los mecanismos de la enfermedad, su
diagnóstico y tratamiento; sino en su aplicación en la práctica
clínica habitual con estrategias que faciliten una adecuada
atención y generen comportamientos pro-activos capaces de
vencer esta ”inercia clínica” De igual modo, los programas de
Educación Médica Continua deben incluir el estudio de guías
basadas en la evidencia y el concepto de la inercia clínica.
19. CONCLUSIONES
5. Permitir algunas excepciones dentro de las guías que
atiendan aspectos particulares del paciente pueden evitar el
sobre-tratamiento proporcionándole una atención
individualizada.
6. La sobrecarga asistencial a la que está sometida el médico de
familia puede ocasionar que en alguna ocasión priorice las
intervenciones a realizar, aún consciente de que otras
también son requeridas. Por ello, procurará intervenir con
más intensidad en aquellas patologías con mayor repercusión
en la mortalidad (enfermedades y factores de riesgo
cardiovascular) antes que sobre las que generan “sólo”
morbilidad, como la artrosis.