El documento habla sobre las problemáticas y desafíos que enfrentó Aldo Juan al comienzo de su carrera como maestro. Inicialmente, las condiciones económicas y el nacimiento de su hija lo desmoralizaron y quiso renunciar, ya que no le gustaba la docencia. Sin embargo, durante su práctica intensiva aprendió mucho jugando con los niños y conociendo sus historias. Finalmente, se dio cuenta que los niños son lo más importante y que había elegido la mejor profesión.