2. Tomás de Aquino (1224-1274)
Nacido en Roccasecca. Estudia en la abadía de
Montecassino y después en la universidad de Nápoles
Entra a la orden benedictina en 1244 con oposición
familiar
Discípulo de Alberto Magno en París (1245-1248) y
Colonia (1248-1252)
Profesor en París de 1252 a 1259, después recorre
varias universidades y vuelve a París de 1269 a 1272
6-XII-1273 visión de Dios. “Doctor angélico”
3. Principales influencias
Aristóteles: Santo Tomás retoma la filosofía aristotélica que le llega gracias a
las traducciones árabes; la importancia de la experiencia sensible en la
construcción del conocimiento, la noción de acto y potencia, y el
hilemorfismo (todos los cuerpos están formados de materia y forma) son
algunos de los elementos aristotélicos que Tomás adopta. Tomás se refiere a
él como “El filósofo”
San Agustín: Aceptó sus propuestas teológicas (la Trinidad, el pecado y la
gracia) pero mostró reserva frente a las filosóficas
Dionisio Areopagita: De él tomó buena parte de las doctrinas de los
trascendentales, el valor de la teología negativa y positiva, para el
conocimiento de la esencia divina, la doctrina sobre el orden cosmológico del
universo, la solución al problema del mal, etc.
Boecio: tomó de él varias e importantes definiciones, como las de eternidad,
persona, destino, providencia, etc.
4. Alberto Magno (ca. 1199-1280)
“Doctor universalis”
Preparó la síntesis que habría de realizar su discípulo
Le transmitió el método por el que Santo Tomás parte de la
experiencia
Asimiló, refutó y corrigió la obra de Aristóteles y sus
comentadores. Aristóteles a la filosofía lo que Agustín a la
teología
Refutó la existencia de materia espiritual
Distinción y autonomía entre filosofía y teología
5. Santo Tomás admite la autonomía de cada una como la
autonomía entre filosofía y teología.
La diferencia no radica en lo que aborda cada una pues ambas se
preocupan por los mismos temas (Dios, el hombre y el mundo)
sino en que la filosofía alcanza verdades limitadas que la teología
puede aclarar.
La filosofía aporta a la teología los “preámbulos de la fe”, es
decir, aquellas verdades alcanzadas por la razón que después
utiliza la teología para mostrar una verdad de fe. La fe
perfecciona a la razón como la teología a la filosofía.
Fe y razón
6. Los universales
In re: existen en las cosas, connotaciones
ontológicas
Realismo moderado: los universales existen
ante rem en la mente de Dios, in re como forma
de las cosas y post rem como concepto mental
7. Este es el principio fundamental de su metafísica y una de sus
mayores aportaciones.
La distinción hecha por Aristóteles potencia-acto, fue llevada al
ámbito trascendental por Santo Tomás pues distinguió la esencia
del acto de ser o la esencia de la existencia; es decir, la esencia “lo
que la cosa es” es en potencia (no implica necesariamente su
existencia extramental o en la realidad), no puede existir por sí
misma, necesita recibir de fuera el acto de ser por medio del cual
exista.
En Dios no existe tal distinción, Dios es mientras todo lo demás
tiene ser. Dios es la causa del ser de las cosas.
La noción de acto de ser
8. Analogía: Atribución de un nombre común a varias realidades en sentidos que
son en parte diversos y en parte idénticos.
El concepto de “ser” es análogo, es decir, se predica de toda realidad pero de
modos distintos. El fundamento de la predicación análoga de ente es el acto de
ser, pues algo puede llamarse ente en la misma medida en que tiene «esse»
Cuando decimos que Dios es, el hombre es, la sustancia es, etc., nos referimos a
algo en parte igual (todos “son”) pero en parte distinto (cada uno “es” pero no
del mismo modo).
Entre Dios y las creaturas existe una relación de analogía, lo que se dice de las
creaturas puede decirse de Dios en tres modos:
Afirmación: Una perfección de las creaturas es afirmada en Dios como su
causa.
Negación: Se niega de Dios el modo ilimitado en que la perfección se
encuentra en las creaturas.
Eminencia: Se afirma esa perfección en Dios como infinita o eminente, se
atribuye a Dios una determinada perfección según el modo subsistente o
infinito.
La analogía
9. Tipos de analogía:
Atribución. Depende de que se refieran los diversos analogados
considerados a un mismo tiempo. Exista un analogado principal que posee
intrínsecamente la razón significada por el término considerado, los
analogados secundarios reciben la atribución de manera extrínseca, es decir
por su relación con el primer analogado. Algo se predica de varios con
analogía de atribución si se dice de uno de ellos en plenitud y de los demás
por participación, o de un modo derivado.
Extrínseca: Sólo el analogado principal posee propia y formalmente la
perfección analógica, y de los demás sujetos se dice a título extrínseco e
impropio (x.ej: comida sana, clima sano, medicina sana... en realidad la
salud sólo se predica del animal, las demás son analogía).
Intrínseca: El concepto análogo se dice con propiedad de varios sujetos,
pero principalmente de uno de ellos, por ser la causa de la que procede
esa perfección que se comunica a los otros. Su fundamento es la
causalidad, los efectos constituyen una semejanza disminuida de la
perfección de su causa propia (x.ej: el ser humano es bueno... la causa
de la bondad del ser humano es Dios, Él es el bien).
La analogía
10. Proporcionalidad. Depende no de las relaciones que tengan relativamente
a un término único, sino por sus mutuas proporciones. Un concepto se
predica de varios sujetos con analogía de proporcionalidad, si éstos poseen
la perfección significada no del mismo modo, sino de una manera
semejante.
Propia: Existe una relación de proporcionalidad formal. (x.ej: la luz es
al ojo lo que el sonido al oído; la materia es a la forma lo que la potencia
al acto).
Impropia o metafórica: se verifica cuando la perfección significada no
se realiza formalmente en uno de los términos analogados (x.ej: los
cielos lloran, la tierra gime).
"El ser se dice de muchas maneras" (Aristóteles), el carácter análogo de la noción
de ser se da por los modos de la atribución intrínseca y de la proporcionalidad
propia
La analogía
11. 5 vías tomistas
Expuestas en “Summa Theologiae” Primera parte, cuestión 2, artículo 3.
Aplicación de los principios de la metafísica del ser. Ascenso metafísico,
no deducciones ni demostraciones experimentales ni físicas.
Demostraciones a posteriori que parten de diversos aspectos de la criatura
en cuanto tal, efectos conocidos por la experiencia que se remontan a Dios
como causa.
Principio de causalidad. Dependencia causa-efecto entre las cosas.
Todo lo que empieza tiene una causa.
Todo lo que se mueve es movido por otro.
Todo lo contingente necesita una causa.
Todo lo que le conviene a algo y no es de su esencia, le pertenece por alguna
causa.
Nada puede ser causa de sí mismo.
Ninguna causa puede producir un efecto superior a sí misma.
12. 5 vías tomistas
Principio de causalidad:
Parten pues de la consideración de las criaturas como entes causados.
Se parte del efecto propio a la causa propia.
Si no hubiera Causa Primera, no habría causas intermedias, ni efectos,
ni nada.
Elementos integrantes de las vías:
Punto de partida: Hecho de experiencia considerado metafísicamente.
Aplicación del principio de causalidad.
Imposibilidad de proceder al infinito.
Termino final: Necesidad de la existencia de Dios.
14. Bibliografía
• N. Abbagnano, Historia de la filosofía, t. 1, Hora,
Barcelona 1994
• M. Beuchot, Historia de la filosofía medieval,
FCE, México 2013
• G. Reale – D. Antíseri, Historia de la filosofía, t. 2,
UPN/San Pablo, Colombia 2010
• J. I. Saranyana, Historia de la filosofía medieval,
Eunsa, Navarra 2007