1. Introducción
Los padres jugamos un papel muy importante en el desarrollo madurativo de nuestros hijos.
Esta en nuestras manos ayudarlos a practicar nuevas experiencias, jugando constructivamente
y ofreciéndoles distintos materiales. De esta manera, se puede estimular al máximo el potencial
de nuestros hijos sin sobreexigirlo.
Estimular a un niño no significa realizar actividades complicadas sino, más bien, darles
importancias a aquellas vivencias cotidianas que fomentan su crecimiento. Una estimulación
comienza con un buen vínculo afectivo entre la mamá y el hijo. A partir de ahí los papás nos
convertimos en los proveedores de los estímulos adecuados para nuestro bebé. En un principio
los momentos ideales para ir alimentando la relación con nuestros hijos serán ocasiones
sencillas, como al cambiarles los pañales, el contacto piel a piel, el baño y la alimentación. Más
tarde, será el propio cuerpo del bebé su campo de experimentación. Luego empezará a
interesarse por los objetos y más tarde por las otras personas. A través de cada una de estas
vivencias se irá formando su mundo exterior e interior.
Es fundamental que se tenga en cuenta que, si bien generalmente los chicos atraviesan ciertas
etapas de desarrollo en el mismo orden, cada uno evoluciona de manera diferente. Por lo tanto,
para estimular adecuadamente a un bebé, el adulto debe ofrecerle las herramientas necesarias
para promover el aprendizaje de la actividad en la que ese bebe se esta iniciando. De nada
sirve proponer actividades que el pequeño no puede lograr,adelantándose a su desarrollo. Es
importante recordar que el niño no alcanza su crecimiento más rápido de lo que su cuerpo y su
sistema neurológico le permitan. Siempre es aconsejable consultar con el pediatra si el bebé no
evoluciona adecuadamente o si no presenta conductas esperadas en la etapa correspondiente
esa edad. Por ejemplo si tu hijo tiene 12 meses no debera preocuparte si aun no camina ya que
la mayoría de los niños recién comienzan a ensayar sus primeros pasos a esta edad, pero si
debes consultar si aun no se sienta solo ni permanece sentado jugando con los objetos, porque
esta actividad se logra en la etapa anterior.
Con el fin de aportar respuestas a muchas de estas preguntas, se creó este libro, que funciona
como una guía que acompañara el desarrollo de su hij. Aquí encontrarás propuestas adaptadas
a las diferentes etapas madurativas, en las que van variando la calidad de los estímulos y el
modo de presentarlos.
Para facilitar la comprensión, las actividades que se proponen se han dividido por trimestre de
la vida explicando los puntos a tener en cuenta y la estimulación adecuada en cada situación.
Para asegurarse de que los estímulos sean los que el niño necesita, te presento un test para
cada etapa, que te servirá de guía para saber por donde comenzar y cuanto va progresando tu
bebé a medida que crece y los estimulan adecuadamente. Estos test y las guías de
estimulación no intenta reemplazar el diagnóstico y la terapia de un profesional especialista en
estimulación Temprana para niños con necesidades especiales.
Los objetos y juguetes juegan un rol significativo como apoyo para la estimulación, siempre y
cuando sean los indicados para la edad.también puedes encontrar en el libro un listado de
ejemplos de los más apropiados. Con la inmejorable colaboración de Silvia Campagna, hemos
investigado e ideado diferentes juguetes que satisfagan las necesidades para cada etapa,
teniendo en cuenta las habilidades motoras, perceptivas, cognitivas y comunicativas de los

2. niños en cada una de ellas. Para que se puedan realizar en casa, se anexa el paso a paso de
cada uno de los juguetes.
La higiene y la seguridad cumple un rol fundamental en el tema de la estimulación. Cada
juguete u objeto que se le ofrece al bebé debe estar limpio y cumplir con todas las normas de
seguridad que se expresan en la sección “objetos y juguetes seguros”; no obstante, la
supervisión del adulto es irremplazable tanto en los juegos como en el uso, almacenamiento y
mantenimiento de los elementos que se le ofrecen al niño.
También, quise compartir contigo la incomparable experiencia de ser mam. Al comienzo de
cada capítulo vas a encontrar mis vivencias con mis hijas, María Celina e Inés, desde su
nacimiento hasta los dos años de edad.