El documento describe la política exterior de Estados Unidos como el resultado de un proceso complejo con debates entre diferentes actores como la presidencia, el Congreso y la sociedad civil. La toma de decisiones es compartida entre el poder ejecutivo y legislativo, que se influyen mutuamente. El Congreso tiene el poder de declarar la guerra y aprobar tratados, mientras que el presidente negocia tratados y dirige las fuerzas armadas.
1. La política exterior de los Estados Unidos es el resultado de un proceso de elaboración
compleja, de grandes debates contradictorios zanjados por arbitrajes. Por otra parte, el
sistema constitucional estadounidense prevé una distribución precisa de poderes (checks and
balances), lo que les da a los diferentes actores (presidencia, Congreso, sociedad civil,
etcétera) un poder capaz de influir de un modo muy diferenciado sobre la elaboración de la
política exterior de los Estados Unidos. Esta constatación difiere de la opinión corrientemente
admitida acerca de la idea de un poder reunido en las manos de algunos pocos, acabando en
una política monolítica y sin debates.
Ciertos fundamentos de la política exterior de los Estados Unidos están presentes desde su
creación. Es indispensable conocerlos para aprender el conjunto del proceso de decisión. Por
otra parte, la toma de decisiones es compartida entre el poder ejecutivo (lapresidencia y la
administración) y el poder legislativo (el Congreso). Los dos sufren la influencia de la sociedad
civil (grupos de presión, electorados, think tank, etcétera).
Toma de decisiones[editar]
El presidente negocia los tratados con naciones extranjeras. Él es, también, el Comandante en
jefe de las fuerzas armadas, y como tal tiene la amplia autoridad sobre éstas, una vez que se
despliegan. El Secretario de Estado es el Ministro de Relaciones Exteriores de los Estados
Unidos y es el conductor primario de la diplomacia internacional.
El Congreso tiene el poder de declarar la guerra, pero el presidente tiene la capacidad de
enviar tropas militares a un área durante 60 días sin la aprobación del Congreso, aunque en
todos los casos lo hayan concedido después. El Senado (una de las dos cámaras del
Congreso) también tiene el derecho exclusivo de aprobar los tratados hechos por el
presidente. El Congreso es de la misma manera responsable de aprobar los proyectos de ley
que determinan el carácter general de la política exterior de los Estados Unidos.
El tercer brazo del gobierno es la Corte Suprema, que tradicionalmente ha desempeñado un
rol mínimo en la política exterior del país.
Breve historia[editar]
La política exterior estadounidense puede ser considerada, por haber sido la primera surgida
con el inicio de la "política de la rama de olivo", una tentativa de parte del nuevo
país americano para reconciliarse con Gran Bretaña. Durante la Revolución estadounidense,
los Estados Unidos establecieron relaciones con varias potencias europeas:Francia,
principalmente, España y los Países Bajos por intervenir en la guerra contra Gran Bretaña, un
enemigo mutuo. En el período siguiente, Estados Unidos osciló entre una política y sea o pro-
2. francesa o pro-británica. En general, los Estados Unidos permanecieron a distancia de las
discusiones europeas, enfocándose en la extensión territorial enNorteamérica.
Existen diversos pueblos indígenas en lo que hoy constituye el Estado de
Nicaragua. De acuerdo a sus características históricas se pueden
agrupar en dos grandes corrientes, quienes sufrieron la colonización
española y pueblos indígenas de la Costa Caribe de Nicaragua, que
constituyen las poblaciones aborígenes que han persistido como cultura
y pueblos organizados, con sus propias tradiciones y expectativas.
Por lo general, los pueblos indígenas han conservado su hábitat en la
zonas más agrestes de la región de trópico húmedo que se localiza en la
región central y noreste del país, alrededor de los principales y más
grandes ríos del país. Actualmente constituyen el 10% del total de la
población, pero comparten un territorio común de aproximadamente 59
mil kilómetros cuadrados.
La interacción de los pueblos indígenas y sus recursos naturales ha sido
la principal constante a lo largo de la historia y por consiguiente tiene
diversos significados. Muy especialmente es la relación de los pueblos
indígenas con los bosques.
¿Qué son los bosques? Constituyen una comunidad de vegetales que
puede ser de especies maderables, medicinales, productos de fibra,
resina, taminos, productos de alimentos, tanto para humanos como para
animales, en la cual se manifiestan influencias recíprocas entre las
especies vegetales, el suelo, la atmósfera, el medio ambiente y el paisaje
geográfico..., pero no sólo eso, sino también los bosques significan la
fuente principal de energía, el hábitat natural de la vida silvestre, por
tanto, fuente de alimentación y curación, así como de ritos sagrados.
Por lo general se comprende al bosque sólo cuando se refiere a los
árboles. Por eso comenzaremos por señalar la extensión en materia
forestal: En este territorio se concentran aproximadamente cuatro
millones de hectáreas de bosques de los cuales 85% son latifoliadas, en
su gran mayoría bosques tropicales y naturales de pino, cuya especie
particular es única en América, denominada Pinus Caribaea. Otras
especies abundantes son la caoba y cedro real.
3. II. UBICACIÓN Y ESTADO DE LAS ZONAS BOSCOSAS EN
NICARAGUA
Nicaragua posee cerca de 6.2 millones de hectáreas de tierras de
vocación forestal, de las cuales 1.8 millones son para fines de
conservación y 4.4 millones de hectárea para producción sostenida,
según los indicadores más recientes. Como puede observarse en los
mapas comparativos de 1940 y 1992, la principal concentración de
bosques ha estado y está en la región central y de la costa caribe de
Nicaragua.
El bosque tropical
húmedo y pinares
constituyen la mayor
área boscosa. El
bosque tropical seco
casi ha
desaparecido, salvo
unas pequeñas
áreas remanentes
en el Pacífico.
Del bosque de
producción se
estima que
1.4 millones de
hectáreas están en
condiciones para
aprovechamiento
durante las próximas
décadas,
consistiendo de 1.1
millones de
hectáreas de
latifoliadas y 0.3 millones de hectáreas de pinares. El resto, 1.2 millones
de hectáreas, se encuentran en un estado de degradación y baja
productividad haciendo necesaria su restauración o recuperación natural
para que a largo plazo pueda contribuir a la producción de madera y
otros productos forestales.
4. Además del bosque existente, es importante destacar la superficie
susceptible para repoblación forestal, se estima que unos 2.5 millones de
hectáreas de tierras de vocación forestal actualmente no tienen bosque.
Estas áreas se encuentran bajo otro uso, principal mente ganadería
extensiva, y con vegetación arbustiva. Una gran parte de esas zonas
estuvo cubierta de bosque tropical seco.
La deforestación durante las últimas décadas ha reducido la cobertura
boscosa del país de una manera alarmante. De las 7 millones de
hectáreas de bosque que existían en 1950, en la actualidad quedan sólo
4.3 millones de hectáreas. Se estimó para 1985 una tasa de
deforestación bruta en 100,000 hectáreas por año. En los últimos años la
tasa de deforestación es de aproximadamente 150,000 hectáreas
anuales.
La distribución del bosque es la siguiente:
En la zona del Pacífico casi no hay bosques, ya que la mayor parte es
utilizada en actividades agropecuarias. Las pequeñas áreas de bosque
que existen se encuentra en forma de islas o bosques de galería que
sirven de protección a los cuerpos o fuentes de agua, así como en áreas
rocosas accidentadas e inaccesibles en su mayoría.
En la zonas Central y Norte, se encuentran todavía bosques de pinares y
robledales, pero que están amenazados por la demanda de leña, carbón
y madera para la construcción de muebles.
5. La mayor parte de las
áreas boscosas se
encuentran en la parte
norte de las Regiones
Autónomas del Atlántico,
en su mayoría latifoliadas
y de pino, así como áreas
de manglares en los
litorales.
III. POLITICAS DE
EXPLOTACION DEL
BOSQUE
El bosque, como uno de
los recursos naturales
menos valorados, ha sido
utilizado en diversos
momentos por intereses
extranjeros y grupos de poder que lo han explotado para su
enriquecimiento personal. Estas actividades se han reflejado en los
diversos modelos económicos que se han implementado en el país.
3.1 Modelo colonial (1502-1821)
Durante la conquista y colonización española, el modelo económico
imperante fue extractivo, de enclave y de cara a los intereses de la
Corona. La explotación maderera sirvió fundamentalmente para la
construcción de embarcaciones desde diversos puertos, principalmente
en El Realejo.
No obstante, ante el afán de extraer oro, otros metales preciosos y
especias, así como por la esclavitud de la mano de obra, el interés por la
madera y en especial maderas preciosas no fue un eje de acumulación
para los colonizadores.
Como se sabe, esta actividad del colonialismo español tuvo su asiento
principalmente en el Pacífico y parte de la región Centro-Norte del país;
6. teniendo una dinámica y comportamiento diferente la relación de las
poblaciones indígenas con el colonialismo inglés. Sin embargo, el modelo
que implementó la colonización española fue la hacienda señorial; la cual
ante un territorio despoblado generaba la concentración de la propiedad
de la tierra en unas pocas personas.
3. 2 Aborto del intento de construir un Estado nacional (1821-1909)
La independencia de Centroamérica de la Corona española no modificó
en mucho el modelo de la hacienda señorial, sino que incrementó la
concentración de tierra a costa de la reducción del bosque natural,
principalmente con la expropiación de las tierras a las comunidades
indígenas que los habitaban. No sólo los cultivos de añil y caña de
azúcar, sino la ganadería fue lo que vino a incrementar lo que se ha dado
en llamar la "frontera agrícola", sin que el bosque en sí fuera un mercado
o una producción específica.
Es a finales de este período, cuando se empieza a delimitar un modelo
agroexportador primario, con productos como el café y la ganadería la
que redujeron de forma entonces sensible las zonas boscosas en los
alrededores de los centros urbanos más poblados.
La intervención norteamericana de 1909 interrumpe este proceso del
modelo agroexportador, abortando el intento de construir un Estado
nacional y articular las diversas regiones del país.
3.3 El modelo de enclave: las "Banana Republic"(1909-1939)
Con la intervención militar, las nuevas inversiones de capital extranjero
se concentran en la Costa Atlántica a través de la explotación minera, y
simultáneamente varias empresas norteamericanas dedicadas a la
explotación de la madera, hule y banano.
La tasa de extracción de madera fue motivo de subregistros, por lo que
se conoce poco acerca de datos exactos del impacto que tuvo en los
bosques. Una de las razones fue la relativa independencia que tuvieron
las empresas norteamericanas ante el Estado de Nicaragua, así como
7. por la venalidad de muchos funcionarios que eran sobornados para
efectos de evasión fiscal y tributaria.
Sin embargo, se habla del desastre ecológico que significó la tala
indiscriminada de más de 400 mil hectáreas de bosques, principalmente
de pino y maderas preciosas.
Los enclaves norteamericanos concentraron a importantes grupos de
población alrededor de sus empresas; las cuales una vez que se
encontraron en situaciones difíciles de sostener por el incremento de los
costos de producción, las plagas como "el mal de Panamá" que afectó la
producción bananera en la Costa Atlántica, la disminución de los precios
del café y las repercusiones de la crisis de 1927, iniciaron un retiro
paulatino llevándose con ellas toda la infraestructura productiva y con ella
también a la reducción de la población.
3.4 El modelo agropexportador (1940-1979)
Con el inicio de la Segunda Guerra Mundial, a Nicaragua se le asigna el
papel de suministrar materias primas para la industria de la guerra, la
orientación del crédito se dirigió exclusivamente a la agricultura de
agroexportación, reactivando la producción cafetalera al tiempo que
estimulando la producción de algodón, caña de azúcar y ajonjolí. Desde
1950 también se expanden otros productos como la ganadería y al
contrario el estancamiento de la producción interna.
El cultivo del algodón se intensifica en los departamentos de León y
Chinandega y el desarrollo cafetalero en las regiones del Norte, sobre la
base de la expansión latifundista y la expulsión del campesinado
minifundiario de esas zonas.
La expansión de las fincas algodoneras y ganaderas condujo al
desplazamiento de los nuevos colonos hacia la frontera agrícola, que
significó la ampliación de las tierras agropecuarias de 2,5 millones de
manzanas en 1960 a más de 5 millones en 1978. Lo que significa que la
tasa simple de deforestación estuvo por las 125,000 manzanas anuales.
3.5 El modelo estatizante-cooperativista (1979-1990)
8. El modelo de la administración sandinista no modificó el carácter
agroexportador de la producción; sin embargo, se trastocaron las formas
de propiedad. Grandes empresas latifundistas del régimen anterior
pasaron a manos del Estado, en tanto que la población campesina
presionó por más tierra, esta vez no en los lugares marginales que les
ofrecía la frontera agrícola, sino en zonas más fértiles. Esta presión
condujo también a una reforma agraria, que alentó la toma de tierra en
áreas que estaban ocupadas por bosques e implementó un proceso de
legalización de las mismas. Esta ocupación dio como resultado un
acelerado ritmo de titulación a finales del período sandinista, aunque de
hecho las tierras ya habían sido ocupadas.
Sin embargo, las regulaciones impuestas por el gobierno sandinista y los
combates militares, cuyo escenario eran las zonas montañosas
impidieron la profundización de la tala indiscriminada. Los datos que se
disponen de este período se puede ver en la Tabla No. 1.
La concentración de la propiedad agroexportadora en manos del Estado,
paralela a la producción pequeña y de autosubsistencia provocó también
desequilibrios fuertes en la estructura productiva del país, generando
nuevamente una migración hacia zonas alejadas de los conflictos
políticos y militares.
3.6 El modelo neoliberal (1990-1999)
En esta fase existen dos actores principales: el gobierno de Violeta
Barrios de Chamorro (1990-1996) y el período transcurrido del Dr.
Arnoldo Alemán (1997-1999). En ambas etapas la política ha tenido casi
el mismo comportamiento: la implementación de una política de ajuste
estructural, desde 1991, como condición impuesta por el Fondo
Monetario Internacional, que implicó una drástica reducción del empleo
en el Estado, una prolongación de la recesión productiva y el
empobrecimiento generalizado; sin que las medidas paliativas pudieran
surtir efectos.
Como parte de las presiones internacionales, el gobierno de Violeta
Barrios se comprometió a decretar las áreas de reserva y de
conservación ecológica, entre ellas la de Bosawas, Indio-Maíz y cayos
9. Miskitos. Paralelo a esta decisión el gobierno debía proceder a delimitar
las tierras de los pueblos indígenas; hasta ahora este proceso no se ha
completado.
Otro factor de incidencia en los bosques ha sido la presión mantenida por
el Banco Mundial, como administrador del Corredor Biológico
Mesoamericano, para la implementación de este proyecto de
biodiversidad en la zona atlántica. Como el requisito fue la presentación
de la propuesta de Ley de Demarcación de las tierras comunales de los
pueblos indígenas, ésta fue presentada ante la Asamblea Nacional sin
contar con la aprobación de la dirigencia indígena que había reclamado
insistentemente su participación.
No obstante, tanto en su primera fase, y con mayor voracidad en la
segunda, los nuevos gobernantes de turno procedieron a una
recomposición de la propiedad: la reducción de las tierras de las
cooperativas para pasar a nuevos dueños (se conoce que las
cooperativas se redujeron de 3,600 en 1990 a 350 en 1996); de igual
forma ha sucedido con la privatización de las empresas agropecuarias
estatales. Estas acciones acaparadoras han estado amparadas en la
corrupción institucional, la cual se señala que en Nicaragua ha sido "un
mal endémico" y que "las irresponsabilidades y malos manejos cometidos
por diversos funcionarios gubernamentales de diversos rangos que,
utilizando el poder que les confiere el cargo han manejado los recursos
públicos como propios o han usado las relaciones institucionales para
obtener beneficios de carácter particular, en desmedro de un uso de los
recursos y los vínculos para el beneficio social".
Esta recomposición de la propiedad generó otra vez una ola migratoria
hacia la frontera agrícola, con el consecuente despale de los bosques;
también motivado en las antiguas leyes que otorgan derecho de posesión
a aquellas tierras consideradas baldías si el propietario les invierte
trabajo: esto es, nuevamente se despaló y sembró semilla de pasto, sin
que una actividad ganadera justificara su ampliación.
El ESAF (la política de ajuste estructural, por su siglas en inglés) más los
desastres naturales, como la erupción del cerro Negro, el huracán Mitch,
el deslave del volcán Casitas y más reciente las erupciones del volcán
Telica han significado mayores desastres para los bosques del país. En
particular, el huracán Mitch dejó una cantidad considerable de árboles en
el suelo, que por diversas circunstancias tampoco se pudo aprovechar.
10. La crítica situación para 1998 sólo pudo mejorarse con la presentación
de la propuesta de Nicaragua en Estocolmo, donde se aprobó el
financiamiento por cerca de 1,8 miles de millones de dólares. Sin
embargo, la tercera parte de este financiamiento está dedicado a la
construcción de infraestructura, principalmente a carreteras.
Comprendiendo el significado de estas vías de comunicación para
dinamizar el mercado local, los pueblos indígenas y sectores rurales han
visto con preocupación el avance de las carreteras por cuanto también
avanzará junto a ellas la más moderna maquinaria para despalar. El
temor no es a la apertura de las vías de comunicación, sino que mientras
no se disponga de un Plan claro y concreto sobre los bosques éstos
corren el peligro de desaparecer.
Otro de los temores es que con la globalización, la presencia de
empresas transnacionales también implica la destrucción de los bosques.
Hasta el momento esta acción se ha realizado a través de las
concesiones de exploración minera que han permitido, con el supuesto
de explorar, en la práctica, el despale de amplias zonas de los bosques
naturales en donde también corren el riesgo de desaparecer muchos de
los ríos que allí se originan.
Guerra Nacional de Nicaragua
La Guerra Nacional de Nicaragua, Guerra Nacional Centroamericana, o Guerra
Antifilibustera, ocurrió entre los años1856 y 1857. El conflicto fue el resultado de una guerra
civil que involucró a los bandos legitimistas y democráticos en el territorio nicaragüense desde
1854-1855, que terminó en la toma del poder por parte del filibustero William Walker. La
conflagración provocó la unión de contingentes militares de las repúblicas centroamericanas
que acabaron expulsando a las tropas filibusteras.
Antecedentes[editar]
El año 1854 estalló la guerra civil entre las facciones democrática (liberal)
y legitimista (conservadora) que se encontraban asentadas en las ciudades
de León y Granada, respectivamente.
Los democráticos formaron un Gobierno Provisorio al mando de Francisco Castellón Sanabria,
y no reconocían el Gobierno legítimo de Fruto Chamorro Pérez. Asimismo, buscaron fortalecer
sus fuerzas militares con la ayuda externa, y para ello firmaron un tratado con el
estadounidense Byron Cole. A raíz del acuerdo arribaron a tierra nicaragüense, en junio de
1855, un grupo de estadounidenses llamados La Falange Democrática al mando de William
Walker.7
En esos años, el territorio nicaragüense tenía un enorme atractivo a nivel internacional,
especialmente por el cruce del río San Juan donde se planeaba construir un eventual canal
interoceánico. De hecho el magnate Cornelius Vanderbilt había obtenido del gobierno local el
derecho de transportar pasajeros por el istmo a través de la Compañía Accesoria del Tránsito
desde 1849. El establecimiento de esta empresa chocaba con los intereses británicos que no
11. deseaban solamente perder el "dominio de los mares" que tenían en ese tiempo, sino la
posesión de la costa este de Nicaragua a través del Reino de la Mosquitia.8 El conflicto fue
solucionado con el Tratado Clayton-Bulwer.
Ascenso al poder de William Walker[editar]
Filibustero Norteamericano William Walker
Desde el 18 de mayo de 1854, el General José María Estrada había asumido el gobierno
nicaragüense en sucesión de Chamorro (muerto durante su mandato) y tomó a su cargo
enfrentar a las fuerzas opositoras. Sendos combates fueron librados en las localidades
de Rivas y La Virgen, y la misma ciudad de Granada fue tomada por las fuerzas filibusteras
ydemocráticas el 13 de octubre de 1855. Precisamente, en esta localidad fue firmado el
acuerdo entre William Walker yPonciano Corral Acosta, comandante de las
fuerzas legitimistas, para evitar más derramamiento de sangre a raíz de una serie de confusos
hechos, donde resultaron agredidos pasajeros estadounidenses que atravesaban el país.
Mateo Mayorga, miembro prominente de los legitimistas, fue una de las víctimas de la
venganza de Walker. Del acuerdo, realizado el 23 de octubre, resultó nombrado Patricio
Rivas como Presidente Provisorio (en detrimiento del presidente Estrada), Corral, Ministro de
la Guerra, y Walker como General en Jefe del Ejército.
Sin embargo, el ex presidente legitimista Estrada inició un llamado a las demás repúblicas
centroamericanas para que acudieran a Nicaragua para obrar a
"mano armada como en causa propia hasta la desaparición de todo poder extraño y el
restablecimiento de la Potestad legítima.".7
El mismo Corral, ante el poder real de Walker, envió misivas pidiendo ayuda, las cuales
fueron incautadas y cayeron en manos de Walker, quien ordenó su fusilamiento.
Para el 18 de febrero de 1856, Walker influyó sobre Patricio Rivas para que revocase la
concesión otorgada a la Compañía Accesoria del Tránsito, que dio lugar a que Vanderbilt
se mostrara como un importante enemigo de su campaña. El filibustero destituyó a Rivas
y nombró en su lugar a Fermín Ferrer el 20 de junio de 1856. Convivían entonces en el
territorio tres presidentes: el legitimista Estrada, el democrático Rivas, y el entreguista
Ferrer. Por otro lado, para el 1 de marzo de 1856, el gobierno costarricense de Juan
Rafael Mora Porras había declarado la guerra al gobierno filibustero en Nicaragua en vista
12. de su amenaza sobre el territorio, iniciando así la Campaña Nacional de Costa Rica. El
mismo mandatario había alertado sobre la llegada de los aventureros desde finales de
1855.9 El 12 de julio de 1856, Walker se proclamó presidente de Nicaragua a través de
unas elecciones amañadas.
La Guerra Nacional[editar]
Por su parte, representantes gubernamentales de Honduras, El
Salvador y Guatemala firmaron en la Ciudad de Guatemala10 un Tratado de Alianza el 18
de julio de 1856, para la "defensa de su soberanía e independencia" que además
reconocía a Patricio Rivas como presidente, e iniciaba la expulsión de las autoridades
intrusas.11 Costa Rica no pudo asistir en ese momento a la alianza debido al estrago que
la enfermedad del cólera había causado en sus tropas, aunque reanudaría las acciones
posteriormente. Asimismo, las facciones democráticas y legitimistas, aliadas a Patricio
Rivas, firmaron el 12 de septiembre un "Pacto Providencial" declarando la guerra contra
William Walker.12 Para el día 14 de septiembre, fuerzas del Ejército del
Septentrión lograban la primera victoria de los patriotas nicaragüenses en la
llamada batalla de San Jacinto.
Acosadas sus tropas hacia finales de 1856, Walker ordenó la destrucción de Granada al
término de un fatídico sitio. La devastación de la ciudad enfureció a los aliados
centroamericanos y los mismos nicaragüenses.13 No obstante, para el mes de diciembre,
el ejército costarricense, coadyuvado por el empresario Vanderbilt y los ingleses, tomaría
el río San Juan cortando la ayuda externa de Walker. Para 1857 la localidad de Rivas se
había convertido en el último refugio de los filibusteros; aunado a esto, Mora había hecho
circular una nota ofreciendo perdón y repatriación que provocó deserciones en el
contingente enemigo.
Con la mediación del capitán estadounidense Charles H. Davis, William Walker se rindió el
1 de mayo de 1857.
Fragmentos de las proclamas de los presidentes
centroamericanos[editar]
Todos los leales hijos de Guatemala, El Salvador y Honduras marchan sobre esa
horda de bandidos. Nuestra causa es santa, el triunfo seguro. Dios nos dará la
victoria, y con ella la paz, la concordia, la libertad y la unión de la gran familia
centroamericana.14
Juan Rafael Mora Porras, 1 de marzo de 1856.
Nuestra vanguardia va, pues, a unirse con las fuerzas de El Salvador y Honduras,
para cooperar con Costa Rica en la honrosa empresa de librar a Nicaragua,
asegurando la independencia de todos los Estados.14
Rafael Carrera y Turcios, 5 de mayo de 1856.
Santa es la lucha a la que estamos llamados; la causa que va a sostenerse espada
en mano, es la del honor nacional, es la religión de nuestros padres, es la de
nuestra raza amenazada en su existencia política y cultural y es por último la de
Centro América.15
Francisco Dueñas, 25 de junio de 1856.
Compatriotas: El pueblo nicaragüense y su Gobierno, oprimido por sus
despojadores, y víctimas de toda clase de vejaciones, imploran en su conflicto
nuestra cooperación y ayuda; la causa que sostienen es también nuestra, no solo
13. por las simpatías que median entre ellos y nosotros, nacidas de la identidad del
origen y de otras mil consideraciones, sino también porque una vez sometidos al
yugo extranjero, no tardaremos nosotros en correr la misma suerte.14
José Santos Guardiola, 7 de julio de 1856