Mantener un estilo de vida saludable requiere adoptar varios hábitos como beber mucha agua, comer alimentos ricos en fibra, hacer ejercicio regularmente, reducir el consumo de grasas y sal, dormir 7 horas por noche, eliminar hábitos negativos como fumar, y manejar el estrés. Siguiendo estos hábitos se puede prevenir la obesidad y mejorar la energía y juventud.