4. Por el Tratado de Corbeil quedaron delimitadas las fronteras entre los reyes de Aragón y los de Francia
5. Los territorios del Norte de los Pirineos para el francés, los del Sur para el aragonés
6. Otro de los objetivos del tratado de Corbeil fue apartar al rey de Aragón de la sucesión de Provenza, que pasó a los Anjou, e impedir la expansión aragonesa en Francia
7. Si Jaime I quería engrandecer su reino, debería hacerlo a costa de los musulmanes. Era el precio impuesto por Francia tras vencer en la cruzada contra los Cath-arios
8. Pero Don Jaime tenía un problema: era el heredero de su tío, Nuño Sánchez, señor de los Condados del Rosellón y Cerdeña
9. Don Nuño había acogido en sus posesiones a la nobleza cath-alauna, huída de los territorios tomados por el rey de Francia en la Marca de Gothia
10. Un Pueblo sin estado y sin un territorio en el que asentarse era una fuente inagotable de conflictos. Jaime I determinó conquistar el reino musulmán de Mallorca para que se estableciesen en él
11. Además, debería continuar con la conquista de la taifa musulmana de Valencia que los nobles aragoneses llevaban muy adelantada
13. De ese modo, Don Jaime pasó de gobernar un reino, el Reino de Aragón, a regir una Corona, la Corona de Aragón, compuesta por tres reinos independientes entre sí, pero con el mismo rey
14. Sin embargo, no todo fueron alborozos. El incumplimiento de las promesas hechas a Blasco de Alagón provocó el enfado del conde de Sástago
15. Los varones de la Casa Alagón abandonaron al monarca aragonés y partieron a Sicilia para servir al enperador, Federico II StuporMundi
16. Corrían los días en que las terribles luchas entre los güelfos papales y los gibelinos imperiales anegaban Italia de sangre
17. La contienda terminó con la derrota del emperador Federico y con el apresamiento de su hijo Enzo, para el que había constituido el Reino de Córcega y Cerdeña
21. Al mayor, Pedro III de Aragón, con muchas posibilidades de conseguir Sicilia por su matrimonio con CostanzaHohenstaufen, le dejó los reinos de Aragón y de Valencia haciéndolo señor, únicamente, de la nobleza aragonesa
22. Al segundo, Jaime, le asignó el señorío sobre los Cath-alaunes al darle en herencia el Reino de Mallorca con los Condados del Rosellón y de Cerdeña. Ello lo dejaba en una posición óptima para conquistar el Reino de Cerdeña y Córcega
23. Pero Pedro III de Aragón no compartía la decisión de su padre. Considerando que le correspondía todo a él por ser el primogénito. Decidió reconquistar Mallorca por la fuerza de las armas
24. Sin embargo, las cosas se estaban complicando mucho en Sicilia
25. Corradino, el legítimo heredero, había intentado recuperar el trono pero Carlos de Anjou, coronado rey de Sicilia por el papa, lo había apresado y lo había hecho decapitar
26. Esta desgraciada decisión terminó en un baño de sangre, conocido como Vísperas Sicilianas. Los nobles sicilianos echaron a los Anjou de la isla y ofrecieron la corona al rey de Aragón
27. Sin pensarlo un segundo, Pedro III aceptó y se dirigió a Palermo donde fue coronado
28. Las reacciones no se hicieron esperar: El papa Martín IV excomulgó a Don Pedro y decretó la cruzada contra Aragón
29. Además, concedió los Reinos de Aragón y de Valencia a Carlos de Valois, hijo del rey de Francia
30. Acto seguido, Felipe III de Francia invadió los condado de la Marca Hispánica desde el Rosellón
33. Entonces, Pedro III de Aragón se dispuso a conquistar el Reino de Mallorca . No vivió para conocer el éxito alcanzado por su hijo mayor
34. El primer logro del reinado de Alfonso III de Aragón consistió en someter a vasallaje al rey de Mallorca y convertirlo en tributario de la Corona de Aragón
35. Después, prometió al papa organizar una cruzada a cambio del levantamiento de la excomunión y la devolución de la investidura de la Corona de Aragón
36. Aceptó su propuesta el papa Nicolás IV, pero para firmar el acuerdo exigió que Don Alfonso sacase a su hermano, futuro Jaime II de Aragón, del trono de Sicilia
37. Por aquel entonces, la situación del Reino de Jerusalén había llegado a un punto crítico
38. Tanto es así que San Juan de Acre, la principal plaza fuerte de los latinos, cayó en poder de los musulmanes dos semanas antes de la muerte del rey Alfonso
39. El rey de Sicilia se apresuró a acudir a Zaragoza para coronarse como rey Jaime II de Aragón
40. Eran fechas negras para la Iglesia Católica. La pérdida del Imperio Latino, reducido a la isla de Chipre, la había debilitado hasta la extenuación
41. En Francia ocupaba el trono Felipe IV el Hermoso quien, con el Imperio casi destruido y el papa en la ruina, acumulaba cada vez mayor poder
42. Acuciado por las exigencias del rey francés y por la difícil situación de Sicilia, Bonifacio VIII reclamó a Jaime II de Aragón que renunciase a Sicilia
43. Jaime II aceptó, pero con la condición de que el papa le enfeudase el Reino de Cerdeña, del que se habían apoderado los genoveses tras vencer a los pisanos en la batalla de Meloria
44. No había mayor sueño para un rey de Aragón que señorear Cerdeña, la tierra de la que procedían sus antepasados Pero los nobles sicilianos, que no querían a los Anjou como reyes, proclamaron rey a Federico, hermano menor del rey Jaime II de Aragón
45. La decisión precipitó el Atentado de Anagni contra el papa Bonifacio VIII, que a la postre le costaría la vida
46. El rey de Francia podía consumar su plan de destrucción del poder papal. Los siguientes pontífices, títeres del rey galo, dejaron Roma y se instalaron en Aviñón. Se iniciaba la terrible Cautividad de Aviñón, antesala del Cisma de Occidente C
47. Poco después, Felipe el Bello obligó al papa Clemente V a disolver la Orden del Temple, el ejército del Papado Romano
48. Dada la situación, los reyes de Mallorca y de Sicilia fundaron la Gran Compañía de los Catalanes y, al mando de Roger de Flor, enviaron a los almogávares a reconquistar Levante
49. Por entonces los cathalanes del Reino de Mallorca vivían un periodo extraordinario
50. Lo había iniciado Ramón Llull y en él nada tenía que ver el rey de Aragón o los condados de la Marca Hispánica
51. Jaime II de Aragón se hallaba muy ocupado preparando la conquista de Cerdeña que pertenecía a la República de Génova
52. Involucró en ella al nuevo rey mallorquín, Sancho I, quien corrió con los gastos de la contienda creyendo que señorearía la isla por ser suyos los condados de Cerdeña
53. Acudió a Cerdeña, como comandante de las tropas, el infante Alfonso, futuro Alfonso IV de AragónSe iniciaba la guerra de la Corona de Aragón contra los pisanos y contra los genoveses de la isla
54. Pero el infante Alfonso sólo logró ganar la capital, Cagliari, y algunas plazas cercanas, en su mayoría pisanas
55. La República de Génova se apresuró a ayudar a sus nobles con estados en Cerdeña y declaró, formalmente, la guerra contra la Corona de AragónLa contienda se alargaría hasta 1520 cuando el emperador Carlos V pasó a gobernar ambos estados
56. Entretanto, Aragón y Mallorca vivían un periodo de tranquilidad, pues Jaime II de Aragón contaba con heredar a Don Sancho que no tenía hijos
57. Inesperadamente, Sancho I de Mallorca designó heredero a su sobrino, Jaime III de MallorcaLos reyes de Aragón no iban a consentir tamaña afrenta
58. El nieto de Jaime II de Aragón, Pedro IV el Ceremonioso, lanzó sus tropas contra Mallorca y mató al rey Jaime III de Mallorca
59. Al heredero mallorquín, Jaime IV, un niño entonces, lo encerró en el castillo de Játiva y anexionó el Reino de Mallorca a la Corona de Aragón
60. La orgullosa nación catalana, descendiente de los vándalo-alanos, el Pueblo del Mar, y de los altivos godos del Reino de Tolosa, volvía a encontrarse sin un territorio propio en que asentar su soberanía y gobernados por un rey extranjero, Pedro IV de Aragón
61. Tras incontables peripecias, los cath-alaunes lograron liberar a su legítimo rey, Jaime IV de Mallorca, quien se casó con la reina Juana de NápolesActo seguido, reunió a sus leales y atacó el Rosellón con el ánimo de recuperar sus posesionesMurió en Soria, en extrañas circunstancias
62. Heredó los derechos de Mallorca su hermana, la reina Isabel de Mallorca, casada con el Duque del Monferrato, de la dinastía Paleologo
63. Viuda y con grandes apuros económicos, Isabel de Mallorca se vio obligada a vender sus derechos sobre el Reino de Mallorca a Renato de Anjou
64. Pero los beneficios sobre Cerdeña y los Condados del Rosellón pasaron a su hija, Margarita del Monferrato, esposa del conde Pedro de Urgel. Con ella iban, también, los cosmógrafos de la Escuela Mallorquina
65. Las revueltas en Aragón se sosegaron un tanto cuando sucedió en el trono de Aragón Juan I, hijo de Leonor de SiciliaA fin de controlar mejor a los levantiscos cath-aulanes, Juan I trasladó la Diputación del General del Reino de Mallorca, que estaba en Perpignan, a Barcelona, su posesión más querida y leal
66. Su hermano y sucesor, Martín I de Aragón, reforzó los lazos con los catalanes de Sicilia casando a su único hijo, Martín el Joven, con la heredera del trono siciliano, la reina María de Sicilia
67. La pareja fue casada por el antipapa Clemente VI, Roberto de Saboya, al que sucedería el antipapa Benedicto XIII, más conocido como Papa Luna
68. Los objetivos de la Corona de Aragón estaban, prácticamente, cumplidos. Sólo faltaba por reducir a los bravos sardo-ginobeses de Arborea
70. La cúpula nobiliaria del Juzgado de Arborea la constituían tres familias, los Doria, los Oristán (Arborea) y los Piccolomini de Sena (Malaspina), que se mantenían leales a la República de Génova
72. Y mantenían su unión estrechando lazos por todos los medios posibles
73. El primer lugar en ser atacado fue el Castillo de Sanluri, plaza fuerte de los Piccolomini de Sena
74. Vencieron los aragoneses, pero al precio de ver morir al heredero de su Corona. La tragedia minó la moral aragonesa y los obligó a firmar un tratado con los arborenses por el que éstos mantendrían su independencia a cambio del pago de un vasallaje