El documento describe los termorreceptores de la piel que detectan el calor y el frío. Los corpúsculos de Krause se encuentran en la dermis y son sensibles al frío, especialmente en la lengua y los órganos sexuales. Los corpúsculos de Ruffini son poco numerosos, alargados y profundos, y son sensibles al calor. El documento también explica los mecanismos fisiológicos de termorregulación del cuerpo, como la evaporación, la conducción y la convección para mantener una temperatura corporal estable.