Harvey, David. - Paris capital de la modernidad [2008].pdf
ACTIVIDAD 7, GENETICA Y COMPORTAMIENTO
1. INTERACCIÓN GENES-AMBIENTE
YOHANA QUIÑONES LÓPEZ
CORPORACION UNIVERSITARIA IBEROAMERICANA
FAC EDUCACION Y CCS HUM Y SOC – PSICOLOGIA VIRTUAL
BIOLOGIA
MONTELIBANO – CORDOBA
2019
2. Las células son bioquímica, estructural y
funcionalmente muy complejas; es la unidad
funcional de todos los tejidos, mientras que los
tejidos con características similares forman los
órganos y éstos con funciones similares forman, a su
vez, los aparatos o sistemas. Todos los organismos
vivos están formados por células, de tal manera que
ningún organismo es un ser vivo si no contiene al
menos una célula. Algunos organismos
microscópicos, como bacterias y protozoos, son
células únicas (unicelulares), mientras que las
plantas y los animales están formados por millones
de células organizadas en tejidos y órganos
Las células contienen la información genética heredable codificada en los genes localizados en
grandes secuencias del DNA. La información genética dirige las funciones celulares y asegura
la descendencia. Las numerosas similitudes entre las células de los diversos reinos de la vida
demuestran que provienen de una célula ancestral común y que existe una relación evolutiva
entre las células modernas y las primitivas.
3. Vulnerabilidad Social en el
Síndrome de Turner:
Interacción Genes-Ambiente
El dilema entre herencia y ambiente ha marcado gran parte
de la historia de la Psicología generando fuertes polémicas
dentro de este campo.
Actualmente, la Genética del comportamiento es, sin
lugar a dudas, uno de los principales campos de
investigación psicológica.
Los avances científicos producidos en los últimos años en
las disciplinas de Genética cuantitativa y molecular se han
dado cuenta de que los genes juegan un papel importante
en la conducta humana, aportando, asimismo, la mejor
evidencia disponible sobre la importancia del ambiente en
las diferencias individuales de los caracteres psicológicos.
4. El impacto de las influencias ambientales no
compartidas.
Las correlaciones entre los genes y el
ambiente.
Las interacciones genotipoambiente.
Este último aspecto se refiere a la
sensibilidad genética de los individuos a
determinadas condiciones ambientales,
uno de los principales objetivos dentro de
este campo de investigación es identificar
factores de riesgo ambiental en individuos
genéticamente sensibles.
La Genética del comportamiento están relacionados
con tres aspectos:
5. La interacción entre determinados genes y ambientes
confiere a los individuos diferentes grados de
susceptibilidad en la aparición de una característica
determinada.
Lo anterior da cuenta que un gen no determina un
fenotipo actuando aisladamente, sino en relación
con el ambiente
Todas las células poseen un sistema genético en la molécula de
DNA, el cual forma los genes o unidades de material hereditario.
Los monómeros de nucleótidos de DNA codifican la información que
determina las características individuales de los organismos. El
código genético es universal en todas las células, lo que también
confirma la evolución a partir de una célula ancestral. Los genes
transmiten la información de generación en generación, y también
regulan el desarrollo y funcionamiento celular. El DNA transcribe su
información al RNA. El RNA mensajero traduce ese mensaje para
que se forme una determinada proteína.
6. El Síndrome de Turner es una enfermedad genética que solamente padecen las mujeres. Sucede que
sus células no tienen los habituales dos cromosomas XX, sino que les falta una X o parte de ella.
Este problema genético se manifiesta fundamentalmente
en baja estatura, falta de desarrollo de los ovarios y por
tanto, infertilidad.
En los bebés es significativo el edema linfático en manos y
pies, una de las alertas que deben siempre ser
consultadas con el pediatra si se manifiestan. Un
diagnóstico precoz es fundamental.
Se trata de un problema genético de una frecuencia relativamente alta: una de cada 2500 o 3000
niñas nacidas vivas es portadora de esta anomalía que consiste en la pérdida de uno de los
cromosomas X, es decir, tienen solamente 45 cromosomas en vez de los 46 que son los normales.
Un tercio de las niñas con Síndrome de Turner son identificadas poco después del nacimiento.
Aproximadamente otro tercio serán identificadas en la época escolar por una llamativa talla baja y el
tercio restante lo serán en la adolescencia o edad adulta por falta de desarrollo puberal, falta de
ovulación o infertilidad.
7. El análisis precedente da
cuenta de como las
particularidades genéticas,
físicas y psicológicas que
expresan las mujeres con
Síndrome de Turner afectan la
capacidad y calidad de sus
relaciones sociales. Si bien en
la infancia las dificultades en
el aprendizaje solapan esta
disfunción, en la adolescencia
se vuelve más pronunciada
teniendo repercusiones en la
edad adulta. Los modelos
propuestos para el estudio de
la disfunción social indagan
sobre la forma en que actúa el
ambiente sobre el desarrollo
psicológico, y de cómo a su
vez éste se ve afectado por
factores genéticos que actúan
en interacción.
Identificar mecanismos de
riesgo ambiental, tales
como, falta de
estimulación temprana,
retraso en la inducción
puberal, escaso apoyo
social, experiencias
educativas y familiares
negativas, etc., que
repercuten a nivel
psicológico y potencian la
disfunción social en una
población vulnerable
como las mujeres con
Síndrome de Turner,
permite el diseño de
programas de prevención
e intervención psicológica
en el ámbito individual y
familiar.
Estos programas favorecerán el
fortalecimiento y generación de
nuevos recursos en las mujeres con
Síndrome de Turner, potenciando la
calidad de sus interacciones, la
confianza en sí mismas y en sus
capacidades para comunicarse y
vincularse. Asimismo, el desarrollo
de nuevas técnicas de investigación
como la genética molecular, la
neuroimagen funcional y el estudio
de la bioquímica cerebral, así como
la incorporación de un equipo de
trabajo multidisciplinario
(neurólogos, pediatras, genetistas,
psicólogos, docentes y padres) al
estudio de los trastornos genéticos
como el Síndrome de Turner,
permite un abordaje integral, desde
un enfoque biopsicosocial, y un
mayor conocimiento y comprensión
de la interacción entre los genes y el
ambiente en la expresión de la
conducta.