La comunicación de masas se dirige a un gran número de personas de forma rápida a través de medios como la radio, la televisión y las redes sociales con el fin de influir en sus emociones y comportamiento. La cultura de masas se asimila por muchas personas y a veces tiene un objetivo comercial, utilizando técnicas para vender productos o ideas. Existen cuatro tipos de normas que regulan la conducta social: normas religiosas, morales, de trato social y jurídicas.