La evaluación interna se define como un proceso permanente y formativo encaminado al mejoramiento de la práctica docente y la calidad educativa. Debe ser realizada por el director, personal docente y autoridades educativas de acuerdo a la Ley General del Servicio Profesional Docente y el Acuerdo 717. Implica cumplir objetivos de aprendizaje y normalidad mínima, además de presentar desafíos como buena coordinación, liderazgo y compromisos verificables de mejora.