2. En reiteradas oportunidades se ha dejado clara la magnitud
de la hazaña que logró el médico trujillano Arnaldo
Gabaldón en su lucha contra la malaria; sin duda un
profesional que aprovechó su salida del país para
especializarse y luego contribuir con sus conocimientos en la
lucha de una enfermedad que se cobraba la vida de los
venezolanos por hora.
Carlos
Enrique
3. Desde el mismo Congreso del país se
denunciaba que cada tres horas moría
un venezolano a causa de la malaria, lo
que llevó incluso a aprobar una ley
contra el paludismo; fue allí cuando el
doctor Gabaldón comenzó a pensar
cuál podría ser el paso adecuado a
seguir para hacer efectiva la lucha
contra la enfermedad.
Carlos
Enrique
4. Es así como se crea la Dirección Especial de
Malariología que entre sus planes estuvo la
distribución organizada de la quinina; la
idea era que cada ciudadano se convirtiera
en un distribuidor de esta pastilla que
ayudaba en la lucha contra la enfermedad.
En la primera iniciativa se sumaron
docentes, jefes civiles, hacendados,
párrocos y muchísimas otras figuras;
además, la dirección creada por Gabaldón
se encargó de formar a personas que
tuvieran la capacidad de ser visitadores
urbanos y rurales, en unos cursos que
llevaban solo cuatro meses realizarlos.
Carlos
Enrique
5. Pero la acción también trascendió a los
medios, que siempre han sido una
herramienta fundamental para
comunicarse con las masas, sobre todo en
circunstancias como estas; por ello se
estrenó "Tijeratazos sobre la Malaria" que
no era más que un boletín sumamente
importante que era traducido por
Gabaldón y relataba los avances que se
tenían hasta el momento sobre esta
patología; era la única de este tipo en toda
América Latina.
Carlos
Enrique
6. Otra de las medidas que se tomó para la
época de la mano del médico trujillano fue
la limpieza de las aguas. Sin embargo, para
el año 1940 se tomó en cuenta la llegada de
una segunda ola de malaria, era necesario
importar al menos 12 toneladas de quinina
pero la guerra de la época hacía de esto
una tarea difícil, por lo que solo se
lograron ocho toneladas con las que de
cierta forma se pudo sobrellevar la
situación.
Carlos
Enrique