2. Poco se conoce de su infancia. Nació
en 1771. Quedó huérfana de madre
como consecuencia de la epidemia de
viruela y con 15 años, tuvo que
empezar a trabajar por proceder de una
familia con escasos recursos
económicos
Con 22 años nació su hijo
(aunque en algunas fuentes se
recoge que era adoptado).
A los 30 años ya era rectora de la
Casa de Expósitos de la Coruña
3. Inicialmente la misión fue propuesta a Francisco Javier Balmis, pero
finalmente, necesitaron contar con Isabel en la Real Expedición
Filantrópica de la Vacuna cuyo objetivo era llevar una vacuna para
combatir la viruela en América.
Fue la última en unirse a la expedición con varias condiciones:
cuidaría de los niños y contaría con un camarote individual para
evitar el contacto con los hombres.
4. Fue incorporada a la tripulación como enfermera para
atender, asear, entretener, serenar y dar cariño a los niños
huérfanos que serían los portadores de la vacuna.
5. Después de todos los preparativos, la corbeta María Pita parte del puerto de La
Coruña el 30 de noviembre de 1803 con veintidós niños, que fueron utilizados para
transportar la vacuna brazo a brazo durante la travesía por el océano Atlántico.
La rectora acompañó la expedición durante la travesía, llegando a Canarias el día 9 de
diciembre de 1803. Después llegaron a Puerto Rico; pero, como la vacuna ya se había
establecido en la isla y conocían las dramáticas noticias de los estragos de la viruela en
el territorio de la Nueva Granada, el director adelantó la salida de la expedición
rumbo a Caracas, donde llegaron
el 20 de marzo de 1804.
6. Cuando el director conoció las grandes distancias a recorrer y la
necesidad de abarcar más cantidad de territorio en menor tiempo,
dividió la expedición en dos. La dirigida por Balmis llegó a la capital
novohispana el día 9 de agosto de 1804. La Rectora y los niños se
instalaron en el Hospicio de la ciudad de México, mientras que los
encargados vacunaban por todo el territorio del norte novohispano.
7. El 7 de febrero de 1805 partió la Expedición dirigida por Balmis con Isabel,
su hijo y veintiséis niños mexicanos para hacer la vacuna brazo a brazo.
Después de un viaje accidentado, llegaron a Manila el 15 de abril de ese
mismo año. Al igual que ocurrió en México, la rectora se instaló en el
Hospicio de Manila y allí cuidó a los niños.
Los problemas políticos y las primeras luchas por la Independencia les
impidieron volver a la Península y la rectora se quedó en Puebla de los
Ángeles con su hijo. Del final de su vida conocemos poco;
ni fecha ni lugar de fallecimiento.
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Información extraída de : http://dbe.rah.es/biografias/52862/isabel-zendal-gomez
8. Tras el estudio de su vida y esfuerzo, considero que fue un gran ejemplo a seguir para cualquiera de
nosotros.
Luchadora en una época en la que las mujeres no cumplían ningún papel relevante en la sociedad
(su principal función
era la de atender y criar a sus hijos o trabajar en casas ajenas realizando las tareas del hogar).
Fue capaz de ponerse al frente de un hospicio y de tomar la decisión tan difícil de trasladarse miles
de kilómetros con sus pequeños para salvar la vida de millones de personas (aunque esta travesía
supusiera arriesgar sus vidas; de hecho uno de los niños falleció durante el viaje).
Por todo lo anterior, considero que, aunque realizó una labor inmensa para la sociedad y, a pesar de
que el reconocimiento le ha llegado no hace mucho, no ha tenido la repercusión mediática ni se le
conoce todo lo que debería.
COMENTARIO SOBRE ISABEL ZENDAL
Fue uno de los puntos de partida que sirvió para demostrarnos que con iniciativa,
seguridad, conocimientos y corazón, se puede conseguir cualquier sueño; en su
caso, fue una heroína que nos continúa ayudando para hacer frente a la viruela.