SlideShare una empresa de Scribd logo
Casa tomada

Julio Cortázar
 Nos gustaba la casa porque aparte de espaciosa y antigua (hoy que
  las casas antiguas sucumben a la mas ventajosa liquidación de sus
  materiales) guardaba los recuerdos de nuestros bisabuelos, el abuelo
  paterno, nuestros padres y toda la infancia.
  Nos habituamos Irene y yo a persistir solos en ella, lo que era una
  locura pues en esa casa podían vivir ocho personas sin estorbarse.
  Hacíamos la limpieza por la mañana, levantándonos a las siete, y a
  eso de las once yo le dejaba a Irene las ultimas habitaciones por
  repasar y me iba a la cocina. Almorzábamos al mediodía, siempre
  puntuales; ya no quedaba nada por hacer fuera de unos platos
  sucios. Nos resultaba grato almorzar pensando en la casa profunda y
  silenciosa y como nos bastábamos para mantenerla limpia. A veces
  llegábamos a creer que era ella la que no nos dejo casarnos. Irene
  rechazó dos pretendientes sin mayor motivo, a mí se me murió María
  Esther antes que llegáramos a comprometernos. Entramos en los
  cuarenta años con la inexpresada idea de que el nuestro, simple y
  silencioso matrimonio de hermanos, era necesaria clausura de la
  genealogía asentada por nuestros bisabuelos en nuestra casa.
 Nos moriríamos allí algún día, vagos y esquivos primos se
  quedarían con la casa y la echarían al suelo para enriquecerse
  con el terreno y los ladrillos; o mejor, nosotros mismos la
  voltearíamos justicieramente antes de que fuese demasiado
  tarde.
  Irene era una chica nacida para no molestar a nadie. Aparte de su
  actividad matinal se pasaba el resto del día tejiendo en el sofá de
  su dormitorio. No sé porque tejía tanto, yo creo que las mujeres
  tejen cuando han encontrado en esa labor el gran pretexto para
  no hacer nada. Irene no era así, tejía cosas siempre necesarias,
  tricotas para el invierno, medias para mi, mañanitas y chalecos
  para ella. A veces tejía un chaleco y después lo destejía en un
  momento porque algo no le agradaba; era gracioso ver en la
  canastilla el montón de lana encrespada resistiéndose a perder
  su forma de algunas horas. Los sábados iba yo al centro a
  comprarle lana; Irene tenía fe en mi gusto, se complacía con los
  colores y nunca tuve que devolver madejas. Yo aprovechaba
  esas salidas para dar una vuelta por las librerías y preguntar
  vanamente si había novedades en literatura francesa. Desde
  1939 no llegaba nada valioso a la Argentina.
 Pero es de la casa que me interesa hablar, de la casa y de Irene,
  porque yo no tengo importancia. Me pregunto qué hubiera hecho
  Irene sin el tejido. Uno puede releer un libro, pero cuando un
  pullover está terminado no se puede repetirlo sin escándalo. Un
  día encontré el cajón de abajo de la cómoda de alcanfor lleno de
  pañoletas blancas, verdes, lila. Estaban con naftalina, apiladas
  como en una mercería; no tuve valor para preguntarle a Irene qué
  pensaba hacer con ellas. No necesitábamos ganarnos la vida,
  todos los meses llegaba plata de los campos y el dinero
  aumentaba. Pero a Irene solamente la entretenía el tejido,
  mostraba una destreza maravillosa y a mi se me iban las horas
  viéndole las manos como erizos plateados, agujas yendo y
  viniendo y una o dos canastillas en el suelo donde se agitaban
  constantemente los ovillos. Era hermoso.
  Cómo no acordarme de la distribución de la casa. El comedor,
  una sala con gobelinos, la biblioteca y tres dormitorios grandes
  quedaban en la parte mas retirada, la que mira hacia Rodríguez
  Peña. Solamente un pasillo con su maciza puerta de roble aislaba
  esa parte del ala delantera donde había un baño, la cocina,
  nuestros dormitorios y el living central, al cual comunicaban los
  dormitorios y el pasillo.
 Se entraba a la casa por un zaguán con mayólica, y la puerta
  cancel daba al living. De manera que uno entraba por el zaguán,
  abría la cancel y pasaba al living; tenía a los lados las puertas de
  nuestros dormitorios, y al frente el pasillo que conducía a la parte
  mas retirada; avanzando por el pasillo se franqueaba la puerta de
  roble y mas allá empezaba el otro lado de la casa, o bien se podía
  girar a la izquierda justamente antes de la puerta y seguir por un
  pasillo mas estrecho que llevaba a la cocina y el baño. Cuando la
  puerta estaba abierta advertía uno que la casa era muy grande; si
  no, daba la impresión de un departamento de los que se edifican
  ahora, apenas para moverse; Irene y yo vivíamos siempre en esta
  parte de la casa, casi nunca íbamos más allá de la puerta de
  roble, salvo para hacer la limpieza, pues es increíble como se
  junta tierra en los muebles. Buenos Aires será una ciudad limpia,
  pero eso lo debe a sus habitantes y no a otra cosa. Hay
  demasiada tierra en el aire, apenas sopla una ráfaga se palpa el
  polvo en los mármoles de las consolas y entre los rombos de las
  carpetas de macramé; da trabajo sacarlo bien con plumero, vuela
  y se suspende en el aire, un momento después se deposita de
  nuevo en los muebles y los pianos.
 Lo recordaré siempre con claridad porque fue simple y sin
  circunstancias inútiles. Irene estaba tejiendo en su dormitorio,
  eran las ocho de la noche y de repente se me ocurrió poner al
  fuego la pavita del mate. Fui por el pasillo hasta enfrentar la
  entornada puerta de roble, y daba la vuelta al codo que llevaba a
  la cocina cuando escuché algo en el comedor o en la biblioteca.
  El sonido venia impreciso y sordo, como un volcarse de silla
  sobre la alfombra o un ahogado susurro de conversación.
  También lo oí, al mismo tiempo o un segundo después, en el
  fondo del pasillo que traía desde aquellas piezas hasta la puerta.
  Me tire contra la pared antes de que fuera demasiado tarde, la
  cerré de golpe apoyando el cuerpo; felizmente la llave estaba
  puesta de nuestro lado y además corrí el gran cerrojo para más
  seguridad.
 Fui a la cocina, calenté la pavita, y cuando estuve de vuelta con la
  bandeja del mate le dije a Irene:
 -Tuve que cerrar la puerta del pasillo. Han tomado parte del
  fondo.
 Dejó caer el tejido y me miró con sus graves ojos cansados.
 -¿Estás seguro?
 Asentí.
   -Entonces -dijo recogiendo las agujas- tendremos que vivir en
    este lado.
   Yo cebaba el mate con mucho cuidado, pero ella tardó un rato en
    reanudar su labor. Me acuerdo que me tejía un chaleco gris; a mi
    me gustaba ese chaleco.
    Los primeros días nos pareció penoso porque ambos habíamos
    dejado en la parte tomada muchas cosas que queríamos. Mis
    libros de literatura francesa, por ejemplo, estaban todos en la
    biblioteca. Irene pensó en una botella de Hesperidina de muchos
    años. Con frecuencia (pero esto solamente sucedió los primeros
    días) cerrábamos algún cajón de las cómodas y nos mirábamos
    con tristeza.
   -No está aquí.
   Y era una cosa mas de todo lo que habíamos perdido al otro lado
    de la casa.
   Pero también tuvimos ventajas. La limpieza se simplificó tanto
    que aun levantándose tardísimo, a las nueve y media por
    ejemplo, no daban las once y ya estábamos de brazos cruzados.
    Irene se acostumbró a ir conmigo a la cocina y ayudarme a
    preparar el almuerzo. Lo pensamos bien, y se decidió esto:
    mientras yo preparaba el almuerza, Irene cocinaría platos para
    comer fríos de noche.
 Nos alegramos porque siempre resultaba molesto tener que
  abandonar los dormitorios al atardecer y ponerse a cocinar. Ahora
  nos bastaba con la mesa en el dormitorio de Irene y las fuentes
  de comida fiambre.
  Irene estaba contenta porque le quedaba mas tiempo para tejer.
  Yo andaba un poco perdido a causa de los libros, pero por no
  afligir a mi hermana me puse a revisar la colección de estampillas
  de papa, y eso me sirvió para matar el tiempo. Nos divertíamos
  mucho, cada uno en sus cosas, casi siempre reunidos en el
  dormitorio de Irene que era más cómodo. A veces Irene decía:
 -Fijate este punto que se me ha ocurrido. ¿No da un dibujo de
  trébol?
 Un rato después era yo el que le ponía ante los ojos un
  cuadradito de papel para que viese el mérito de algún sello de
  Eupen y Malmédy. Estábamos bien, y poco a poco empezábamos
  a no pensar. Se puede vivir sin pensar.
 (Cuando Irene soñaba en alta voz yo me desvelaba en seguida.
  Nunca pude habituarme a esa voz de estatua o papagayo, voz
  que viene de los sueños y no de la garganta. Irene decía que mis
  sueños consistían en grandes sacudones que a veces hacían
  caer el cobertor. Nuestros dormitorios tenían el living de por
  medio, pero de noche se escuchaba cualquier cosa en la casa.
  Nos oíamos respirar, toser, presentíamos el ademán que conduce
  a la llave del velador, los mutuos y frecuentes insomnios.
  Aparte de eso todo estaba callado en la casa. De día eran los
  rumores domésticos, el roce metálico de las agujas de tejer, un
  crujido al pasar las hojas del álbum filatélico. La puerta de roble,
  creo haberlo dicho, era maciza. En la cocina y el baño, que
  quedaban tocando la parte tomada, nos poníamos a hablar en
  vos mas alta o Irene cantaba canciones de cuna. En una cocina
  hay demasiados ruidos de loza y vidrios para que otros sonidos
  irrumpan en ella. Muy pocas veces permitíamos allí el silencio,
  pero cuando tornábamos a los dormitorios y al living, entonces la
  casa se ponía callada y a media luz, hasta pisábamos despacio
  para no molestarnos. Yo creo que era por eso que de noche,
  cuando Irene empezaba a soñar en alta voz, me desvelaba en
  seguida.)
 Es casi repetir lo mismo salvo las consecuencias. De noche
  siento sed, y antes de acostarnos le dije a Irene que iba hasta la
  cocina a servirme un vaso de agua. Desde la puerta del
  dormitorio (ella tejía) oí ruido en la cocina; tal vez en la cocina o
  tal vez en el baño porque el codo del pasillo apagaba el sonido. A
  Irene le llamo la atención mi brusca manera de detenerme, y vino
  a mi lado sin decir palabra. Nos quedamos escuchando los
  ruidos, notando claramente que eran de este lado de la puerta de
  roble, en la cocina y el baño, o en el pasillo mismo donde
  empezaba el codo casi al lado nuestro.
  No nos miramos siquiera. Apreté el brazo de Irene y la hice correr
  conmigo hasta la puerta cancel, sin volvernos hacia atrás. Los
  ruidos se oían mas fuerte pero siempre sordos, a espaldas
  nuestras. Cerré de un golpe la cancel y nos quedamos en el
  zaguán. Ahora no se oía nada.
 -Han tomado esta parte -dijo Irene. El tejido le colgaba de las
  manos y las hebras iban hasta la cancel y se perdían debajo.
  Cuando vio que los ovillos habían quedado del otro lado, soltó el
  tejido sin mirarlo.
 -¿Tuviste tiempo de traer alguna cosa? -le pregunté inútilmente.
 -No, nada.
 Estábamos con lo puesto. Me acordé de los quince mil pesos en
  el armario de mi dormitorio. Ya era tarde ahora.
  Como me quedaba el reloj pulsera, vi que eran las once de la
  noche. Rodeé con mi brazo la cintura de Irene (yo creo que ella
  estaba llorando) y salimos así a la calle. Antes de alejarnos tuve
  lástima, cerré bien la puerta de entrada y tiré la llave a la
  alcantarilla. No fuese que algún pobre diablo se le ocurriera robar
  y se metiera en la casa, a esa hora y con la casa tomada.

Más contenido relacionado

La actualidad más candente

La Increíble y triste historia de la cándida de eréndira y su abuela desalmada
La Increíble y triste historia de la cándida de eréndira y su abuela desalmada  La Increíble y triste historia de la cándida de eréndira y su abuela desalmada
La Increíble y triste historia de la cándida de eréndira y su abuela desalmada
GabrielPrezCrespo
 
Efrain en-la-vega
Efrain en-la-vegaEfrain en-la-vega
Efrain en-la-vega
Carolaine Galaz
 
Efrain en la_vega
Efrain en la_vegaEfrain en la_vega
Efrain en la_vega
Maria Meza Moreno
 
Cuento 6º (2013) Agus, Gaby, Flor, Celeste, Flavia y Rosario (Compilado de c...
Cuento  6º (2013) Agus, Gaby, Flor, Celeste, Flavia y Rosario (Compilado de c...Cuento  6º (2013) Agus, Gaby, Flor, Celeste, Flavia y Rosario (Compilado de c...
Cuento 6º (2013) Agus, Gaby, Flor, Celeste, Flavia y Rosario (Compilado de c...
DGE
 
07 sangre de monstruo 01 - r. l. stine
07   sangre de monstruo 01 - r. l. stine07   sangre de monstruo 01 - r. l. stine
07 sangre de monstruo 01 - r. l. stine
mzambrano3
 
Capi. 2 los cinco y el tesoro de la isla blyton
Capi. 2 los cinco y el tesoro de la isla blytonCapi. 2 los cinco y el tesoro de la isla blyton
Capi. 2 los cinco y el tesoro de la isla blyton
Favy Hdez Cornejo
 
El misterio está en el sótano
El misterio está en el sótanoEl misterio está en el sótano
El misterio está en el sótano
Fernando Jiménez
 
cuento infantil "El ratoncito dormilon"
cuento infantil "El ratoncito dormilon"cuento infantil "El ratoncito dormilon"
cuento infantil "El ratoncito dormilon"
melixa1406
 
Cuentos infantiles
Cuentos infantilesCuentos infantiles
Cuentos infantiles
Tolo de Lluc
 
Fría, sucia y pálida - Carlos Guardiola
Fría, sucia y pálida - Carlos GuardiolaFría, sucia y pálida - Carlos Guardiola
Fría, sucia y pálida - Carlos Guardiola
Carlos Guardiola
 
El jardín de mi abuelo fin
El jardín de mi abuelo   finEl jardín de mi abuelo   fin
El jardín de mi abuelo fin
i.c.o.p.s
 
Cuento
CuentoCuento
Cuento
ChuyP
 
Pregón de anzo 2012
Pregón de anzo 2012Pregón de anzo 2012
Pregón de anzo 2012
Nuestras Islas Canarias
 
la buena tierra
la buena tierrala buena tierra
la buena tierra
Fabiola Ramos
 
Los huespedes
Los huespedesLos huespedes
Rilke, rainer maria el rey bohusch y otros cuentos
Rilke, rainer maria   el rey bohusch y otros cuentosRilke, rainer maria   el rey bohusch y otros cuentos
Rilke, rainer maria el rey bohusch y otros cuentos
Fingerstyle.mx, ConArte A.C., Fábrica de creación e innovación La Nana
 

La actualidad más candente (16)

La Increíble y triste historia de la cándida de eréndira y su abuela desalmada
La Increíble y triste historia de la cándida de eréndira y su abuela desalmada  La Increíble y triste historia de la cándida de eréndira y su abuela desalmada
La Increíble y triste historia de la cándida de eréndira y su abuela desalmada
 
Efrain en-la-vega
Efrain en-la-vegaEfrain en-la-vega
Efrain en-la-vega
 
Efrain en la_vega
Efrain en la_vegaEfrain en la_vega
Efrain en la_vega
 
Cuento 6º (2013) Agus, Gaby, Flor, Celeste, Flavia y Rosario (Compilado de c...
Cuento  6º (2013) Agus, Gaby, Flor, Celeste, Flavia y Rosario (Compilado de c...Cuento  6º (2013) Agus, Gaby, Flor, Celeste, Flavia y Rosario (Compilado de c...
Cuento 6º (2013) Agus, Gaby, Flor, Celeste, Flavia y Rosario (Compilado de c...
 
07 sangre de monstruo 01 - r. l. stine
07   sangre de monstruo 01 - r. l. stine07   sangre de monstruo 01 - r. l. stine
07 sangre de monstruo 01 - r. l. stine
 
Capi. 2 los cinco y el tesoro de la isla blyton
Capi. 2 los cinco y el tesoro de la isla blytonCapi. 2 los cinco y el tesoro de la isla blyton
Capi. 2 los cinco y el tesoro de la isla blyton
 
El misterio está en el sótano
El misterio está en el sótanoEl misterio está en el sótano
El misterio está en el sótano
 
cuento infantil "El ratoncito dormilon"
cuento infantil "El ratoncito dormilon"cuento infantil "El ratoncito dormilon"
cuento infantil "El ratoncito dormilon"
 
Cuentos infantiles
Cuentos infantilesCuentos infantiles
Cuentos infantiles
 
Fría, sucia y pálida - Carlos Guardiola
Fría, sucia y pálida - Carlos GuardiolaFría, sucia y pálida - Carlos Guardiola
Fría, sucia y pálida - Carlos Guardiola
 
El jardín de mi abuelo fin
El jardín de mi abuelo   finEl jardín de mi abuelo   fin
El jardín de mi abuelo fin
 
Cuento
CuentoCuento
Cuento
 
Pregón de anzo 2012
Pregón de anzo 2012Pregón de anzo 2012
Pregón de anzo 2012
 
la buena tierra
la buena tierrala buena tierra
la buena tierra
 
Los huespedes
Los huespedesLos huespedes
Los huespedes
 
Rilke, rainer maria el rey bohusch y otros cuentos
Rilke, rainer maria   el rey bohusch y otros cuentosRilke, rainer maria   el rey bohusch y otros cuentos
Rilke, rainer maria el rey bohusch y otros cuentos
 

Destacado

Casa tomada, de Julio Cortázar
Casa tomada, de Julio CortázarCasa tomada, de Julio Cortázar
Casa tomada, de Julio Cortázar
Vanessa Rios Pérez
 
Trabajo Practico " Proyecto Personal de Lectura"
Trabajo Practico " Proyecto Personal de Lectura"Trabajo Practico " Proyecto Personal de Lectura"
Trabajo Practico " Proyecto Personal de Lectura"
Lucia Pellegrino
 
El peronismo, aspectos sociales
El peronismo, aspectos socialesEl peronismo, aspectos sociales
El peronismo, aspectos sociales
profemariaeugeniaolmos
 
Análise (1)
Análise (1)Análise (1)
Análise (1)
Francieli Corbellini
 
La Casa Tomada(1)
La Casa Tomada(1)La Casa Tomada(1)
La Casa Tomada(1)
guest7007d0
 
Peronismo, apsectos políticos
Peronismo, apsectos políticosPeronismo, apsectos políticos
Peronismo, apsectos políticos
profemariaeugeniaolmos
 
El Peronismo
El PeronismoEl Peronismo
El Peronismo
guest988793
 
Peronismo 1943 1955
Peronismo 1943 1955Peronismo 1943 1955
Peronismo 1943 1955
María del Lujan Citta
 

Destacado (8)

Casa tomada, de Julio Cortázar
Casa tomada, de Julio CortázarCasa tomada, de Julio Cortázar
Casa tomada, de Julio Cortázar
 
Trabajo Practico " Proyecto Personal de Lectura"
Trabajo Practico " Proyecto Personal de Lectura"Trabajo Practico " Proyecto Personal de Lectura"
Trabajo Practico " Proyecto Personal de Lectura"
 
El peronismo, aspectos sociales
El peronismo, aspectos socialesEl peronismo, aspectos sociales
El peronismo, aspectos sociales
 
Análise (1)
Análise (1)Análise (1)
Análise (1)
 
La Casa Tomada(1)
La Casa Tomada(1)La Casa Tomada(1)
La Casa Tomada(1)
 
Peronismo, apsectos políticos
Peronismo, apsectos políticosPeronismo, apsectos políticos
Peronismo, apsectos políticos
 
El Peronismo
El PeronismoEl Peronismo
El Peronismo
 
Peronismo 1943 1955
Peronismo 1943 1955Peronismo 1943 1955
Peronismo 1943 1955
 

Similar a Casa tomada

Julio Cortázar - Casa Tomada
Julio Cortázar  - Casa TomadaJulio Cortázar  - Casa Tomada
Julio Cortázar - Casa Tomada
Max Pinedo Paredes
 
III-MEDIO-10-15.pdf
III-MEDIO-10-15.pdfIII-MEDIO-10-15.pdf
III-MEDIO-10-15.pdf
LucasIvnTrigoOlgun
 
Casa tomada
Casa tomadaCasa tomada
Casa tomada
Moisés Carrera
 
Casa tomada
Casa tomadaCasa tomada
Casa tomada
Moisés Carrera
 
EL ANTIPERONISMO.pptx
EL ANTIPERONISMO.pptxEL ANTIPERONISMO.pptx
EL ANTIPERONISMO.pptx
VaneBrito2
 
Cabezabajo1.doc
Cabezabajo1.docCabezabajo1.doc
Cabezabajo1.doc
YanetFernndez
 
La casa que se dejo ser tomada
La casa que se dejo ser tomadaLa casa que se dejo ser tomada
La casa que se dejo ser tomada
Arturo Jara Ureta
 
El hijo de la justicia capitulo 3 la mecedora embrujada
El hijo de la justicia capitulo 3 la mecedora embrujadaEl hijo de la justicia capitulo 3 la mecedora embrujada
El hijo de la justicia capitulo 3 la mecedora embrujada
correo correo
 
LOS GUERREROS DE CÓMIT. Aventura en Lutecia
LOS GUERREROS DE CÓMIT. Aventura en LuteciaLOS GUERREROS DE CÓMIT. Aventura en Lutecia
LOS GUERREROS DE CÓMIT. Aventura en Lutecia
RaquelGonzalezAlonso
 
Boletin 76
Boletin 76Boletin 76
126188669-Efrain-en-La-Vega.pdf
126188669-Efrain-en-La-Vega.pdf126188669-Efrain-en-La-Vega.pdf
126188669-Efrain-en-La-Vega.pdf
bullasat
 
efrain en la vega
efrain en la vega efrain en la vega
efrain en la vega
Sandra Toledo Mendoza
 
Efrain en-la-vega
Efrain en-la-vegaEfrain en-la-vega
Efrain en-la-vega
Carolaine Galaz
 
85780097 el-lugar-mas-bonito-del-mundo
85780097 el-lugar-mas-bonito-del-mundo85780097 el-lugar-mas-bonito-del-mundo
85780097 el-lugar-mas-bonito-del-mundo
Alejandra Molina Molina
 
RELATOS DE TERROR
RELATOS DE TERRORRELATOS DE TERROR
RELATOS DE TERROR
Begoruano
 
Con otra identidad historia de vida de Ariel Varela
Con otra identidad   historia de vida de Ariel VarelaCon otra identidad   historia de vida de Ariel Varela
Con otra identidad historia de vida de Ariel Varela
AVART Ariel Varela Arte y Teatro
 
La larga huida del infierno marilyn manson
La larga huida del infierno marilyn mansonLa larga huida del infierno marilyn manson
La larga huida del infierno marilyn manson
nuurahk87
 
Vbv
VbvVbv
La larga huida del infierno marilyn manson
La larga huida del infierno marilyn mansonLa larga huida del infierno marilyn manson
La larga huida del infierno marilyn manson
Jazmin Sanabria
 
La larga huida del infierno marilyn manson
La larga huida del infierno marilyn mansonLa larga huida del infierno marilyn manson
La larga huida del infierno marilyn manson
bomba1125
 

Similar a Casa tomada (20)

Julio Cortázar - Casa Tomada
Julio Cortázar  - Casa TomadaJulio Cortázar  - Casa Tomada
Julio Cortázar - Casa Tomada
 
III-MEDIO-10-15.pdf
III-MEDIO-10-15.pdfIII-MEDIO-10-15.pdf
III-MEDIO-10-15.pdf
 
Casa tomada
Casa tomadaCasa tomada
Casa tomada
 
Casa tomada
Casa tomadaCasa tomada
Casa tomada
 
EL ANTIPERONISMO.pptx
EL ANTIPERONISMO.pptxEL ANTIPERONISMO.pptx
EL ANTIPERONISMO.pptx
 
Cabezabajo1.doc
Cabezabajo1.docCabezabajo1.doc
Cabezabajo1.doc
 
La casa que se dejo ser tomada
La casa que se dejo ser tomadaLa casa que se dejo ser tomada
La casa que se dejo ser tomada
 
El hijo de la justicia capitulo 3 la mecedora embrujada
El hijo de la justicia capitulo 3 la mecedora embrujadaEl hijo de la justicia capitulo 3 la mecedora embrujada
El hijo de la justicia capitulo 3 la mecedora embrujada
 
LOS GUERREROS DE CÓMIT. Aventura en Lutecia
LOS GUERREROS DE CÓMIT. Aventura en LuteciaLOS GUERREROS DE CÓMIT. Aventura en Lutecia
LOS GUERREROS DE CÓMIT. Aventura en Lutecia
 
Boletin 76
Boletin 76Boletin 76
Boletin 76
 
126188669-Efrain-en-La-Vega.pdf
126188669-Efrain-en-La-Vega.pdf126188669-Efrain-en-La-Vega.pdf
126188669-Efrain-en-La-Vega.pdf
 
efrain en la vega
efrain en la vega efrain en la vega
efrain en la vega
 
Efrain en-la-vega
Efrain en-la-vegaEfrain en-la-vega
Efrain en-la-vega
 
85780097 el-lugar-mas-bonito-del-mundo
85780097 el-lugar-mas-bonito-del-mundo85780097 el-lugar-mas-bonito-del-mundo
85780097 el-lugar-mas-bonito-del-mundo
 
RELATOS DE TERROR
RELATOS DE TERRORRELATOS DE TERROR
RELATOS DE TERROR
 
Con otra identidad historia de vida de Ariel Varela
Con otra identidad   historia de vida de Ariel VarelaCon otra identidad   historia de vida de Ariel Varela
Con otra identidad historia de vida de Ariel Varela
 
La larga huida del infierno marilyn manson
La larga huida del infierno marilyn mansonLa larga huida del infierno marilyn manson
La larga huida del infierno marilyn manson
 
Vbv
VbvVbv
Vbv
 
La larga huida del infierno marilyn manson
La larga huida del infierno marilyn mansonLa larga huida del infierno marilyn manson
La larga huida del infierno marilyn manson
 
La larga huida del infierno marilyn manson
La larga huida del infierno marilyn mansonLa larga huida del infierno marilyn manson
La larga huida del infierno marilyn manson
 

Más de biblioteca3

Libro 5
Libro 5Libro 5
Libro 5
biblioteca3
 
Libro copia
Libro   copiaLibro   copia
Libro copia
biblioteca3
 
Fotos 5º
Fotos 5ºFotos 5º
Fotos 5º
biblioteca3
 
Aborígenes
AborígenesAborígenes
Aborígenes
biblioteca3
 
Aborígenes
AborígenesAborígenes
Aborígenes
biblioteca3
 
El club de los imperfectos
El club de los imperfectosEl club de los imperfectos
El club de los imperfectos
biblioteca3
 
Sus hijos
Sus hijosSus hijos
Sus hijos
biblioteca3
 
Semana de la lectura fotos
Semana de la lectura fotosSemana de la lectura fotos
Semana de la lectura fotosbiblioteca3
 
La plapla
La plaplaLa plapla
La plapla
biblioteca3
 
Celeste herrero
Celeste herreroCeleste herrero
Celeste herrero
biblioteca3
 
Solana
SolanaSolana
Solana
biblioteca3
 
Cuento flori, ataúlfo y el dragón
Cuento flori, ataúlfo y el dragónCuento flori, ataúlfo y el dragón
Cuento flori, ataúlfo y el dragónbiblioteca3
 
Pregoneros
PregonerosPregoneros
Pregoneros
biblioteca3
 
Flori, ataúlfo y el dragón2
Flori, ataúlfo y el dragón2Flori, ataúlfo y el dragón2
Flori, ataúlfo y el dragón2biblioteca3
 
7º taller cuento fantástico
7º taller cuento fantástico7º taller cuento fantástico
7º taller cuento fantástico
biblioteca3
 
1º escuelas
1º escuelas1º escuelas
1º escuelas
biblioteca3
 
Superman
SupermanSuperman
Superman
biblioteca3
 
Batman
BatmanBatman
Batman
biblioteca3
 
El hombre araña
El hombre arañaEl hombre araña
El hombre araña
biblioteca3
 
Molino del diablo
Molino del diabloMolino del diablo
Molino del diablo
biblioteca3
 

Más de biblioteca3 (20)

Libro 5
Libro 5Libro 5
Libro 5
 
Libro copia
Libro   copiaLibro   copia
Libro copia
 
Fotos 5º
Fotos 5ºFotos 5º
Fotos 5º
 
Aborígenes
AborígenesAborígenes
Aborígenes
 
Aborígenes
AborígenesAborígenes
Aborígenes
 
El club de los imperfectos
El club de los imperfectosEl club de los imperfectos
El club de los imperfectos
 
Sus hijos
Sus hijosSus hijos
Sus hijos
 
Semana de la lectura fotos
Semana de la lectura fotosSemana de la lectura fotos
Semana de la lectura fotos
 
La plapla
La plaplaLa plapla
La plapla
 
Celeste herrero
Celeste herreroCeleste herrero
Celeste herrero
 
Solana
SolanaSolana
Solana
 
Cuento flori, ataúlfo y el dragón
Cuento flori, ataúlfo y el dragónCuento flori, ataúlfo y el dragón
Cuento flori, ataúlfo y el dragón
 
Pregoneros
PregonerosPregoneros
Pregoneros
 
Flori, ataúlfo y el dragón2
Flori, ataúlfo y el dragón2Flori, ataúlfo y el dragón2
Flori, ataúlfo y el dragón2
 
7º taller cuento fantástico
7º taller cuento fantástico7º taller cuento fantástico
7º taller cuento fantástico
 
1º escuelas
1º escuelas1º escuelas
1º escuelas
 
Superman
SupermanSuperman
Superman
 
Batman
BatmanBatman
Batman
 
El hombre araña
El hombre arañaEl hombre araña
El hombre araña
 
Molino del diablo
Molino del diabloMolino del diablo
Molino del diablo
 

Último

creditohipotecario del bcrp linnk app02.pptx
creditohipotecario del bcrp linnk app02.pptxcreditohipotecario del bcrp linnk app02.pptx
creditohipotecario del bcrp linnk app02.pptx
ssuser6a2c71
 
FERIAS INTERNACIONALES DEL ESTADO PLURINACIONAL BOLIVIA
FERIAS INTERNACIONALES DEL ESTADO PLURINACIONAL BOLIVIAFERIAS INTERNACIONALES DEL ESTADO PLURINACIONAL BOLIVIA
FERIAS INTERNACIONALES DEL ESTADO PLURINACIONAL BOLIVIA
LauraSalcedo51
 
INVERSIONES BOLSA BONOS DEUDA UADES .PPT
INVERSIONES BOLSA BONOS DEUDA UADES .PPTINVERSIONES BOLSA BONOS DEUDA UADES .PPT
INVERSIONES BOLSA BONOS DEUDA UADES .PPT
AlvaroMoreno21985
 
Importancia-Seguridad-Social-en-Salud-y-Pensiones.pdf
Importancia-Seguridad-Social-en-Salud-y-Pensiones.pdfImportancia-Seguridad-Social-en-Salud-y-Pensiones.pdf
Importancia-Seguridad-Social-en-Salud-y-Pensiones.pdf
emerson vargas panduro
 
exportacion e importacion de bolivia de productos tradicionales y no tradicic...
exportacion e importacion de bolivia de productos tradicionales y no tradicic...exportacion e importacion de bolivia de productos tradicionales y no tradicic...
exportacion e importacion de bolivia de productos tradicionales y no tradicic...
elvamarzamamani
 
PROCEDIMIENTOS CONCURSALES Y DISOLUCIONES. MAYO 2024
PROCEDIMIENTOS CONCURSALES Y DISOLUCIONES. MAYO 2024PROCEDIMIENTOS CONCURSALES Y DISOLUCIONES. MAYO 2024
PROCEDIMIENTOS CONCURSALES Y DISOLUCIONES. MAYO 2024
Jaime Cubillo Fleming
 
finanzas-en-mi-colegio-cuarto-de-secundaria.pdf
finanzas-en-mi-colegio-cuarto-de-secundaria.pdffinanzas-en-mi-colegio-cuarto-de-secundaria.pdf
finanzas-en-mi-colegio-cuarto-de-secundaria.pdf
dongimontjoy
 
Fidias G. Arias, El Proyecto de Investigación, 5ta. Edición.pdf
Fidias G. Arias, El Proyecto de Investigación, 5ta. Edición.pdfFidias G. Arias, El Proyecto de Investigación, 5ta. Edición.pdf
Fidias G. Arias, El Proyecto de Investigación, 5ta. Edición.pdf
AlfredoFreitez
 
Los 6 Pasos hacia una Financiación Exitosa
Los 6 Pasos hacia una Financiación ExitosaLos 6 Pasos hacia una Financiación Exitosa
Los 6 Pasos hacia una Financiación Exitosa
Richard208605
 
SERVICIOS DIGITALES EN EL PERÚ - LO QUE DEBES SABER-1.pdf
SERVICIOS DIGITALES EN EL PERÚ  - LO QUE DEBES SABER-1.pdfSERVICIOS DIGITALES EN EL PERÚ  - LO QUE DEBES SABER-1.pdf
SERVICIOS DIGITALES EN EL PERÚ - LO QUE DEBES SABER-1.pdf
RAFAELJUSTOMANTILLAP1
 
semana 2.1. Contratos-Sujeto-a-Modalidad.pdf
semana 2.1. Contratos-Sujeto-a-Modalidad.pdfsemana 2.1. Contratos-Sujeto-a-Modalidad.pdf
semana 2.1. Contratos-Sujeto-a-Modalidad.pdf
emerson vargas panduro
 
CAPITULO I - GENERALIDADES DE LA ESTADISTICA.pptx
CAPITULO I - GENERALIDADES DE LA ESTADISTICA.pptxCAPITULO I - GENERALIDADES DE LA ESTADISTICA.pptx
CAPITULO I - GENERALIDADES DE LA ESTADISTICA.pptx
DylanKev
 
S-07 Costos ABC Parte (2) (1).pptxPracti
S-07 Costos ABC Parte (2) (1).pptxPractiS-07 Costos ABC Parte (2) (1).pptxPracti
S-07 Costos ABC Parte (2) (1).pptxPracti
EmersonUnzuetaFiguer
 
Mapa mental sistema financiero y los bancos
Mapa mental  sistema financiero y los bancosMapa mental  sistema financiero y los bancos
Mapa mental sistema financiero y los bancos
AlecRodriguez8
 
Presentación de Análisis Indicadores.pptx
Presentación de Análisis Indicadores.pptxPresentación de Análisis Indicadores.pptx
Presentación de Análisis Indicadores.pptx
erangel1
 
El crédito y los seguros como parte de la educación financiera
El crédito y los seguros como parte de la educación financieraEl crédito y los seguros como parte de la educación financiera
El crédito y los seguros como parte de la educación financiera
MarcoMolina87
 
DERECHO BANCARIO DIAPOSITIVA DE CARATER ESTUDIANTE
DERECHO BANCARIO DIAPOSITIVA DE CARATER ESTUDIANTEDERECHO BANCARIO DIAPOSITIVA DE CARATER ESTUDIANTE
DERECHO BANCARIO DIAPOSITIVA DE CARATER ESTUDIANTE
lazartejose60
 
SEMINARIO PRACTICO DE AJUSTE POR INFLACION CONTABLE.pdf
SEMINARIO PRACTICO DE   AJUSTE POR INFLACION CONTABLE.pdfSEMINARIO PRACTICO DE   AJUSTE POR INFLACION CONTABLE.pdf
SEMINARIO PRACTICO DE AJUSTE POR INFLACION CONTABLE.pdf
joserondon67
 
Introducción al Derecho tributario.pptx
Introducción al Derecho  tributario.pptxIntroducción al Derecho  tributario.pptx
Introducción al Derecho tributario.pptx
ssuser8249001
 
SEGUROS Y FIANZAS EN EL COMERCIO INTERNACIONAL
SEGUROS Y FIANZAS EN EL COMERCIO INTERNACIONALSEGUROS Y FIANZAS EN EL COMERCIO INTERNACIONAL
SEGUROS Y FIANZAS EN EL COMERCIO INTERNACIONAL
NahomyAlemn1
 

Último (20)

creditohipotecario del bcrp linnk app02.pptx
creditohipotecario del bcrp linnk app02.pptxcreditohipotecario del bcrp linnk app02.pptx
creditohipotecario del bcrp linnk app02.pptx
 
FERIAS INTERNACIONALES DEL ESTADO PLURINACIONAL BOLIVIA
FERIAS INTERNACIONALES DEL ESTADO PLURINACIONAL BOLIVIAFERIAS INTERNACIONALES DEL ESTADO PLURINACIONAL BOLIVIA
FERIAS INTERNACIONALES DEL ESTADO PLURINACIONAL BOLIVIA
 
INVERSIONES BOLSA BONOS DEUDA UADES .PPT
INVERSIONES BOLSA BONOS DEUDA UADES .PPTINVERSIONES BOLSA BONOS DEUDA UADES .PPT
INVERSIONES BOLSA BONOS DEUDA UADES .PPT
 
Importancia-Seguridad-Social-en-Salud-y-Pensiones.pdf
Importancia-Seguridad-Social-en-Salud-y-Pensiones.pdfImportancia-Seguridad-Social-en-Salud-y-Pensiones.pdf
Importancia-Seguridad-Social-en-Salud-y-Pensiones.pdf
 
exportacion e importacion de bolivia de productos tradicionales y no tradicic...
exportacion e importacion de bolivia de productos tradicionales y no tradicic...exportacion e importacion de bolivia de productos tradicionales y no tradicic...
exportacion e importacion de bolivia de productos tradicionales y no tradicic...
 
PROCEDIMIENTOS CONCURSALES Y DISOLUCIONES. MAYO 2024
PROCEDIMIENTOS CONCURSALES Y DISOLUCIONES. MAYO 2024PROCEDIMIENTOS CONCURSALES Y DISOLUCIONES. MAYO 2024
PROCEDIMIENTOS CONCURSALES Y DISOLUCIONES. MAYO 2024
 
finanzas-en-mi-colegio-cuarto-de-secundaria.pdf
finanzas-en-mi-colegio-cuarto-de-secundaria.pdffinanzas-en-mi-colegio-cuarto-de-secundaria.pdf
finanzas-en-mi-colegio-cuarto-de-secundaria.pdf
 
Fidias G. Arias, El Proyecto de Investigación, 5ta. Edición.pdf
Fidias G. Arias, El Proyecto de Investigación, 5ta. Edición.pdfFidias G. Arias, El Proyecto de Investigación, 5ta. Edición.pdf
Fidias G. Arias, El Proyecto de Investigación, 5ta. Edición.pdf
 
Los 6 Pasos hacia una Financiación Exitosa
Los 6 Pasos hacia una Financiación ExitosaLos 6 Pasos hacia una Financiación Exitosa
Los 6 Pasos hacia una Financiación Exitosa
 
SERVICIOS DIGITALES EN EL PERÚ - LO QUE DEBES SABER-1.pdf
SERVICIOS DIGITALES EN EL PERÚ  - LO QUE DEBES SABER-1.pdfSERVICIOS DIGITALES EN EL PERÚ  - LO QUE DEBES SABER-1.pdf
SERVICIOS DIGITALES EN EL PERÚ - LO QUE DEBES SABER-1.pdf
 
semana 2.1. Contratos-Sujeto-a-Modalidad.pdf
semana 2.1. Contratos-Sujeto-a-Modalidad.pdfsemana 2.1. Contratos-Sujeto-a-Modalidad.pdf
semana 2.1. Contratos-Sujeto-a-Modalidad.pdf
 
CAPITULO I - GENERALIDADES DE LA ESTADISTICA.pptx
CAPITULO I - GENERALIDADES DE LA ESTADISTICA.pptxCAPITULO I - GENERALIDADES DE LA ESTADISTICA.pptx
CAPITULO I - GENERALIDADES DE LA ESTADISTICA.pptx
 
S-07 Costos ABC Parte (2) (1).pptxPracti
S-07 Costos ABC Parte (2) (1).pptxPractiS-07 Costos ABC Parte (2) (1).pptxPracti
S-07 Costos ABC Parte (2) (1).pptxPracti
 
Mapa mental sistema financiero y los bancos
Mapa mental  sistema financiero y los bancosMapa mental  sistema financiero y los bancos
Mapa mental sistema financiero y los bancos
 
Presentación de Análisis Indicadores.pptx
Presentación de Análisis Indicadores.pptxPresentación de Análisis Indicadores.pptx
Presentación de Análisis Indicadores.pptx
 
El crédito y los seguros como parte de la educación financiera
El crédito y los seguros como parte de la educación financieraEl crédito y los seguros como parte de la educación financiera
El crédito y los seguros como parte de la educación financiera
 
DERECHO BANCARIO DIAPOSITIVA DE CARATER ESTUDIANTE
DERECHO BANCARIO DIAPOSITIVA DE CARATER ESTUDIANTEDERECHO BANCARIO DIAPOSITIVA DE CARATER ESTUDIANTE
DERECHO BANCARIO DIAPOSITIVA DE CARATER ESTUDIANTE
 
SEMINARIO PRACTICO DE AJUSTE POR INFLACION CONTABLE.pdf
SEMINARIO PRACTICO DE   AJUSTE POR INFLACION CONTABLE.pdfSEMINARIO PRACTICO DE   AJUSTE POR INFLACION CONTABLE.pdf
SEMINARIO PRACTICO DE AJUSTE POR INFLACION CONTABLE.pdf
 
Introducción al Derecho tributario.pptx
Introducción al Derecho  tributario.pptxIntroducción al Derecho  tributario.pptx
Introducción al Derecho tributario.pptx
 
SEGUROS Y FIANZAS EN EL COMERCIO INTERNACIONAL
SEGUROS Y FIANZAS EN EL COMERCIO INTERNACIONALSEGUROS Y FIANZAS EN EL COMERCIO INTERNACIONAL
SEGUROS Y FIANZAS EN EL COMERCIO INTERNACIONAL
 

Casa tomada

  • 2.  Nos gustaba la casa porque aparte de espaciosa y antigua (hoy que las casas antiguas sucumben a la mas ventajosa liquidación de sus materiales) guardaba los recuerdos de nuestros bisabuelos, el abuelo paterno, nuestros padres y toda la infancia. Nos habituamos Irene y yo a persistir solos en ella, lo que era una locura pues en esa casa podían vivir ocho personas sin estorbarse. Hacíamos la limpieza por la mañana, levantándonos a las siete, y a eso de las once yo le dejaba a Irene las ultimas habitaciones por repasar y me iba a la cocina. Almorzábamos al mediodía, siempre puntuales; ya no quedaba nada por hacer fuera de unos platos sucios. Nos resultaba grato almorzar pensando en la casa profunda y silenciosa y como nos bastábamos para mantenerla limpia. A veces llegábamos a creer que era ella la que no nos dejo casarnos. Irene rechazó dos pretendientes sin mayor motivo, a mí se me murió María Esther antes que llegáramos a comprometernos. Entramos en los cuarenta años con la inexpresada idea de que el nuestro, simple y silencioso matrimonio de hermanos, era necesaria clausura de la genealogía asentada por nuestros bisabuelos en nuestra casa.
  • 3.  Nos moriríamos allí algún día, vagos y esquivos primos se quedarían con la casa y la echarían al suelo para enriquecerse con el terreno y los ladrillos; o mejor, nosotros mismos la voltearíamos justicieramente antes de que fuese demasiado tarde. Irene era una chica nacida para no molestar a nadie. Aparte de su actividad matinal se pasaba el resto del día tejiendo en el sofá de su dormitorio. No sé porque tejía tanto, yo creo que las mujeres tejen cuando han encontrado en esa labor el gran pretexto para no hacer nada. Irene no era así, tejía cosas siempre necesarias, tricotas para el invierno, medias para mi, mañanitas y chalecos para ella. A veces tejía un chaleco y después lo destejía en un momento porque algo no le agradaba; era gracioso ver en la canastilla el montón de lana encrespada resistiéndose a perder su forma de algunas horas. Los sábados iba yo al centro a comprarle lana; Irene tenía fe en mi gusto, se complacía con los colores y nunca tuve que devolver madejas. Yo aprovechaba esas salidas para dar una vuelta por las librerías y preguntar vanamente si había novedades en literatura francesa. Desde 1939 no llegaba nada valioso a la Argentina.
  • 4.  Pero es de la casa que me interesa hablar, de la casa y de Irene, porque yo no tengo importancia. Me pregunto qué hubiera hecho Irene sin el tejido. Uno puede releer un libro, pero cuando un pullover está terminado no se puede repetirlo sin escándalo. Un día encontré el cajón de abajo de la cómoda de alcanfor lleno de pañoletas blancas, verdes, lila. Estaban con naftalina, apiladas como en una mercería; no tuve valor para preguntarle a Irene qué pensaba hacer con ellas. No necesitábamos ganarnos la vida, todos los meses llegaba plata de los campos y el dinero aumentaba. Pero a Irene solamente la entretenía el tejido, mostraba una destreza maravillosa y a mi se me iban las horas viéndole las manos como erizos plateados, agujas yendo y viniendo y una o dos canastillas en el suelo donde se agitaban constantemente los ovillos. Era hermoso. Cómo no acordarme de la distribución de la casa. El comedor, una sala con gobelinos, la biblioteca y tres dormitorios grandes quedaban en la parte mas retirada, la que mira hacia Rodríguez Peña. Solamente un pasillo con su maciza puerta de roble aislaba esa parte del ala delantera donde había un baño, la cocina, nuestros dormitorios y el living central, al cual comunicaban los dormitorios y el pasillo.
  • 5.  Se entraba a la casa por un zaguán con mayólica, y la puerta cancel daba al living. De manera que uno entraba por el zaguán, abría la cancel y pasaba al living; tenía a los lados las puertas de nuestros dormitorios, y al frente el pasillo que conducía a la parte mas retirada; avanzando por el pasillo se franqueaba la puerta de roble y mas allá empezaba el otro lado de la casa, o bien se podía girar a la izquierda justamente antes de la puerta y seguir por un pasillo mas estrecho que llevaba a la cocina y el baño. Cuando la puerta estaba abierta advertía uno que la casa era muy grande; si no, daba la impresión de un departamento de los que se edifican ahora, apenas para moverse; Irene y yo vivíamos siempre en esta parte de la casa, casi nunca íbamos más allá de la puerta de roble, salvo para hacer la limpieza, pues es increíble como se junta tierra en los muebles. Buenos Aires será una ciudad limpia, pero eso lo debe a sus habitantes y no a otra cosa. Hay demasiada tierra en el aire, apenas sopla una ráfaga se palpa el polvo en los mármoles de las consolas y entre los rombos de las carpetas de macramé; da trabajo sacarlo bien con plumero, vuela y se suspende en el aire, un momento después se deposita de nuevo en los muebles y los pianos.
  • 6.  Lo recordaré siempre con claridad porque fue simple y sin circunstancias inútiles. Irene estaba tejiendo en su dormitorio, eran las ocho de la noche y de repente se me ocurrió poner al fuego la pavita del mate. Fui por el pasillo hasta enfrentar la entornada puerta de roble, y daba la vuelta al codo que llevaba a la cocina cuando escuché algo en el comedor o en la biblioteca. El sonido venia impreciso y sordo, como un volcarse de silla sobre la alfombra o un ahogado susurro de conversación. También lo oí, al mismo tiempo o un segundo después, en el fondo del pasillo que traía desde aquellas piezas hasta la puerta. Me tire contra la pared antes de que fuera demasiado tarde, la cerré de golpe apoyando el cuerpo; felizmente la llave estaba puesta de nuestro lado y además corrí el gran cerrojo para más seguridad.  Fui a la cocina, calenté la pavita, y cuando estuve de vuelta con la bandeja del mate le dije a Irene:  -Tuve que cerrar la puerta del pasillo. Han tomado parte del fondo.  Dejó caer el tejido y me miró con sus graves ojos cansados.  -¿Estás seguro?  Asentí.
  • 7. -Entonces -dijo recogiendo las agujas- tendremos que vivir en este lado.  Yo cebaba el mate con mucho cuidado, pero ella tardó un rato en reanudar su labor. Me acuerdo que me tejía un chaleco gris; a mi me gustaba ese chaleco. Los primeros días nos pareció penoso porque ambos habíamos dejado en la parte tomada muchas cosas que queríamos. Mis libros de literatura francesa, por ejemplo, estaban todos en la biblioteca. Irene pensó en una botella de Hesperidina de muchos años. Con frecuencia (pero esto solamente sucedió los primeros días) cerrábamos algún cajón de las cómodas y nos mirábamos con tristeza.  -No está aquí.  Y era una cosa mas de todo lo que habíamos perdido al otro lado de la casa.  Pero también tuvimos ventajas. La limpieza se simplificó tanto que aun levantándose tardísimo, a las nueve y media por ejemplo, no daban las once y ya estábamos de brazos cruzados. Irene se acostumbró a ir conmigo a la cocina y ayudarme a preparar el almuerzo. Lo pensamos bien, y se decidió esto: mientras yo preparaba el almuerza, Irene cocinaría platos para comer fríos de noche.
  • 8.  Nos alegramos porque siempre resultaba molesto tener que abandonar los dormitorios al atardecer y ponerse a cocinar. Ahora nos bastaba con la mesa en el dormitorio de Irene y las fuentes de comida fiambre. Irene estaba contenta porque le quedaba mas tiempo para tejer. Yo andaba un poco perdido a causa de los libros, pero por no afligir a mi hermana me puse a revisar la colección de estampillas de papa, y eso me sirvió para matar el tiempo. Nos divertíamos mucho, cada uno en sus cosas, casi siempre reunidos en el dormitorio de Irene que era más cómodo. A veces Irene decía:  -Fijate este punto que se me ha ocurrido. ¿No da un dibujo de trébol?  Un rato después era yo el que le ponía ante los ojos un cuadradito de papel para que viese el mérito de algún sello de Eupen y Malmédy. Estábamos bien, y poco a poco empezábamos a no pensar. Se puede vivir sin pensar.
  • 9.  (Cuando Irene soñaba en alta voz yo me desvelaba en seguida. Nunca pude habituarme a esa voz de estatua o papagayo, voz que viene de los sueños y no de la garganta. Irene decía que mis sueños consistían en grandes sacudones que a veces hacían caer el cobertor. Nuestros dormitorios tenían el living de por medio, pero de noche se escuchaba cualquier cosa en la casa. Nos oíamos respirar, toser, presentíamos el ademán que conduce a la llave del velador, los mutuos y frecuentes insomnios. Aparte de eso todo estaba callado en la casa. De día eran los rumores domésticos, el roce metálico de las agujas de tejer, un crujido al pasar las hojas del álbum filatélico. La puerta de roble, creo haberlo dicho, era maciza. En la cocina y el baño, que quedaban tocando la parte tomada, nos poníamos a hablar en vos mas alta o Irene cantaba canciones de cuna. En una cocina hay demasiados ruidos de loza y vidrios para que otros sonidos irrumpan en ella. Muy pocas veces permitíamos allí el silencio, pero cuando tornábamos a los dormitorios y al living, entonces la casa se ponía callada y a media luz, hasta pisábamos despacio para no molestarnos. Yo creo que era por eso que de noche, cuando Irene empezaba a soñar en alta voz, me desvelaba en seguida.)
  • 10.  Es casi repetir lo mismo salvo las consecuencias. De noche siento sed, y antes de acostarnos le dije a Irene que iba hasta la cocina a servirme un vaso de agua. Desde la puerta del dormitorio (ella tejía) oí ruido en la cocina; tal vez en la cocina o tal vez en el baño porque el codo del pasillo apagaba el sonido. A Irene le llamo la atención mi brusca manera de detenerme, y vino a mi lado sin decir palabra. Nos quedamos escuchando los ruidos, notando claramente que eran de este lado de la puerta de roble, en la cocina y el baño, o en el pasillo mismo donde empezaba el codo casi al lado nuestro. No nos miramos siquiera. Apreté el brazo de Irene y la hice correr conmigo hasta la puerta cancel, sin volvernos hacia atrás. Los ruidos se oían mas fuerte pero siempre sordos, a espaldas nuestras. Cerré de un golpe la cancel y nos quedamos en el zaguán. Ahora no se oía nada.
  • 11.  -Han tomado esta parte -dijo Irene. El tejido le colgaba de las manos y las hebras iban hasta la cancel y se perdían debajo. Cuando vio que los ovillos habían quedado del otro lado, soltó el tejido sin mirarlo.  -¿Tuviste tiempo de traer alguna cosa? -le pregunté inútilmente.  -No, nada.  Estábamos con lo puesto. Me acordé de los quince mil pesos en el armario de mi dormitorio. Ya era tarde ahora. Como me quedaba el reloj pulsera, vi que eran las once de la noche. Rodeé con mi brazo la cintura de Irene (yo creo que ella estaba llorando) y salimos así a la calle. Antes de alejarnos tuve lástima, cerré bien la puerta de entrada y tiré la llave a la alcantarilla. No fuese que algún pobre diablo se le ocurriera robar y se metiera en la casa, a esa hora y con la casa tomada.