Este documento presenta un resumen de los diferentes grupos religiosos y políticos que existían en Palestina durante el tiempo de Jesucristo. Explica que los fariseos constituían una secta religiosa dedicada al estudio de la Ley y las tradiciones orales, y que se oponían a Jesús a pesar de sus diferencias con otros grupos. También discute la situación actual de división entre las iglesias y la visión de Cristo de un solo rebaño, concluyendo que se debe buscar la verdad y la unidad entre hermanos separados.
2. P. Flaviano Amatulli Valente, fmap
Catolicismo
1y Protestantismo1
Apóstoles de la Palabra
http://www.padreamatulli.net
- México 2009 -
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3. CATOUCISMO Y PROTESTANTISMO
P. Flaviano Amatulli Valente, fmap
Imprimatur
+ Guillermo Ranzahuer González
Obispo de San Andrés Tuxtla
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P.D. Jorge Luis Zarazúa Campa, fmap
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Impreso y hecho en México
Printedandmade in Mexico
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4. Presentación J
Existe una grande diferencia entre elprotestantismo
europeo, que tuvo origen en la Reforma y que esmásserio
a nivel ideológico y práctico, y el protestantismo que está
invadiendo América Latina.
Este es esencialmente fundamentalista y superficial,
preocupado en sumo grado de hacerproselitismo a como
de lugar: Además, representa la langa manus (larga mano)
del imperialismo norteamericano.
Porlo tanto, dejarseguiaren esteasunto únicamente
porlosdocumentosconciliaresypontificiospuedeconstituir
ungrave errorpuestoquereflejanporlogeneral/a situación
del protestantismo europeo y no la nuestra que es muy
distinta.
Precisamente por no haber tenido en cuenta esta
enorme diferencia, nos hemos descuidado y así hemos
permitido que tantas comunidades, hasta hacepocosaños
completamente católicas, se derrumbaran bajo la presión
delprotestantismo norteamericano. En esto, tenemos que
reconocerlo, no nos hemos portado a la altura de nuestra
misión a ejemplo del Buen Pastor, que da la vida por las
ovejas (Jn 1O, 11).
Ojalá que este libro sea de utilidad para muchos
hermanos separados, para que abran los ojos y piensen
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5. seriamenteen la voluntadde Cristodehacerun solorebaño
bajo un solopastor(Jn 1O, 16), y almismo tiempo ayude a
los católicos a encontrarlos elementos que necesitan para
un diálogo constructivo con los protestantes, sin ningún
complejo de inferioridad ya la luz de la Palabra de Dios.
Chacaltianguis, Ver.; a 28 de Febrero de 1985.
Pbro. Lic. Flaviano Amatulli Valente,
Director delInstituto de Teología para Seglares
Acayucan, Ver.
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6. Capítulo 1
Iglesias Separadas:
Pro y Contra
¿cómo tenemos que juzgar la actividad de los
hermanos separados? ¿Es posible que Dios esté actuando
también en sus grupos? Hablan de cambio de vida, de
salvación, de curaciones... ¿será cierto lo que dicen o será
mentira? ¿cuál tiene que ser nuestra actitud con relación a
los que afirman contar con el poder de Dios, aunque no
pertenezcan a la única Iglesia que fundó Jesús?
No se lo prohíban
Es el mismo problema que se presentó alos apóstoles,
al tiempo de Cristo. Mientras ellos lo dejaron todo para
seguir a Jesús de Nazaret, escuchar su palabra y actuar
"oficialmente" en su nombre, contando con su plena
autoridad, apoyo y poder, se dieron cuenta de que había
otros que también expulsaban a los demonios en el mismo
nombre de Jesús, sin pertenecer al grupo de los"escogidos'~
¿Qué hacer? De plano se lo prohibieron
terminantemente.
Juan le dijo: Maestro, vimos a uno que no era de los
nuestros y que expulsaba a los espíritus malos en tu
nombre, pero como no anda con nosotros, se lo
prohibimos. Jesús contestó: No se lo prohíban, ya
que no es posible que alguien haga un milagro en mi
nombre y luego hable mal de mí. El que no está contra
nosotros, está con nosotros (Me 9, 38-40).
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7. Así que el mismo Jesús distingue entre la actuación
"oficial" de los apóstoles y la actuación particular de otros
que solamente creen en su nombre. Mientras por un lado
apoya plenamente a sus "enviados especiales", al mismo
tiempo no quiere que éstos piensen acaparar ''totalmente"
su poder, como si fuera de su círculo nadie pudiera contar
con algún poder para actuar en su nombre. En efecto, si El,
el Señor, quiere acompañar y apoyar la actuación de los
que creen en su nombre con alguna manifestación del poder
de Dios, ¿quién se lo puede impedir?
La cosecha es abundante
Es un hecho que la Iglesia Católica, la única fundada
por Cristo y que cuenta con todos los medios de santificación
establecidos por El, no se da abasto frente ala gran cantidad
de cosecha. Le faltan obreros; en muchos casos carece de
testimonio, entusiasmo y espíritu de creatividad; a veces
se parece más bien a un monumento del pasado que a un
cuerpo vivo, destinado a llevar la vida al mundo.
¿por qué extrañarnos, si frente a esta situación,
muchos abandonan la Iglesia de sus padres para dirigirse
hacia grupos más pujantes, que predican a un Cristo vivo,
aunque incompleto, encontrando en él el perdón, la paz y
la salud que tanto anhelan?
Si de veras amamos a Cristo y a los hermanos que se
encuentran alejados del influjo de la Iglesia Católica,
tenemos que alegrarnos al ver como éstos de todos modos
encuentran algo de salvación en grupos eclesiales paralelos
y a veces rivales de la Iglesia que fundó Cristo.
Algo es algo. Más que fijarnos en lo que les falta,
tenemos que fijarnos en lo que tienen de positivo y en el
bien que están haciendo a tantos pobres que así dejan el
vicio y experimentan el amor de Dios en sus vidas,
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8. Un solo rebaño
Pero al mismo tiempo, no podemos olvidarnos del
sueño de Cristo:
Que todos sean uno como tú, Padre, estás en mí, y
yo en ti. Sean también uno en nosotros: así el mundo
creerá que Tú me has enviado (Jn 17, 21).
La unidad es algo grande; es un signo mesiánico. No
podemos cruzarnos de brazos frente a la actitud hostil de
muchos grupos de hermanos separados, que con el tiempo
representan un auténtico antitestimonio y un grave
obstáculo "para que el mundo crea"que Cristo es el enviado
de Dios.
El lobo pastará junto con el cordero; el león comerá
paja como el buey y la culebra se alimentará de tierra.
No harán más daño ni perjuicio en todo mi santo
cerro, dice Yahvéh (ls 65, 25).
Si entre los mismos cristianos hay división, odios y
profunda oposición, ¿cómo podremos soñar con el mundo
de paz y comprensión anunciado por los profetas? Si cada
grupo escoge "sus textos" bíblicos para defender sus
''teorías" y construir su religión aparte, ¿cómo podemos
pensar que de veras están trabajando en favor del Reino
de Dios y no de intereses particulares?
Aspectos negativos
A veces se usan verdaderas trampas para hacer caer
a los débiles e ignorantes, y llevárselos a sus grupos. Se
presiona en forma indiscreta a los enfermos. Se calumnia a
la Iglesia católica, se insiste en el temor a Dios y a sus
castigos, basándose en las páginas más antiguas de la Biblia
para asustar a la gente y atraerla hacia sus Iglesias
separadas. Se habla del próximo fin del mundo, asegurando
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9. la salvación solamente para los que pertenezcan a la propia
secta.
En muchísimos casos se nota en los hermanos
separados una actitud completamente antievangélica, llena
de orgullo, hipocresía y falsa piedad. Encerrados en sus
cultos, lejos de los problemas de la vida real, que ellos
llaman "mundo", pasan las horas, los días y los años
preocupados solamente de conseguir el premio reservado
para ellos, "después de esta vida'~
Búsqueda de la verdad
Es precisamente llevados por un espíritu de profundo
respeto, sinceridad y verdad, que queremos enfrentarnos
al problema de la división, con el deseo de ofrecer una
modesta ayuda a todos los hombres de buena voluntad,
sean católicos o sean protestantes.
Las palabras de Jesús: "La Verdad los hará libres" (Jn
8, 32), nos impulsa a luchar sin miedos injustificados,
seguros de que la búsqueda de la Verdad representa de
por sí algo valioso que merece cualquier sacrificio. Y ojalá
que algún día todo esto sirva para establecer entre los
miembros de las distintas Iglesias, relaciones más cordiales
y evangélicas, que sean como el primer paso hacia la unidad
querida por Cristo.
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10. Capítulo2
Grupos religiosos y políticos
al tiempo de Cristo
En aquel tiempo existían en Palestina distintos grupos
a nivel religioso y político. Cada uno tenía su ideología y
sus intereses particulares. Sin embargo, cuando Jesús
apareció en la escena pública predicando su evangelio, todos
se unieron en su contra, hasta eliminarlo.
Es algo muy interesante que nos puede ayudar a
entender la situación actual de la Iglesia Católica. En la
medida en que trata de seguir las huellas de su fundador,
tiene que enfrentarse a la oposición de los grupos religiosos,
políticos y culturales de cada lugar, aunque entre ellos no
haya afinidad de intereses o ideología.
El mensaje de Cristo es algo tan novedoso, que pone
en guardia a todos despertando suspicacias, celos y
oposición.
Fariseos
Los fariseos constituían una secta religiosa, muy
floreciente al tiempo de Cristo. Se dedicaban al estudio de
la Ley (Torá), que comprendía el Antiguo Testamento en
general, y de las tradiciones de los mayores que habían
sido transmitidas oralmente de generación en generación y
que en el siglo 11 después de Cristo fueron puestas por
escrito.
Cumplían estrictamente la Ley con sus interpretaciones
y exigían lo mismo al pueblo. Insistían de una manera
especial sobre el sábado, la pureza ritual y los diezmos.
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11. La palabra "fariseo" quiere decir "separado" Se les
dio este nombre porque su estricta observancia de la Ley
los llevó a una separación radical del pueblo en general,
considerado "impuro". Es muy interesante notar el grande
parecido con muchas sectas protestantes actuales. Entre
ellos se llamaban "compañeros".
Los fariseos eran laicos y se oponían a la aristocracia
sacerdotal de los saduceos. Su única fuerza estaba en el
conocimiento de la Ley y las tradiciones. Eran considerados
como los líderes del proletariado.
Gozaban de grande autoridad en el pueblo, siendo
sus verdaderos guías espirituales. Sus aspiraciones no eran
políticas, sino puramente religiosas. En campo político,
tenían una posición moderada, a diferencia de los zelotas,
que eran extremistas.
En el plan doctrinal, se oponían a los saduceos, que
negaban la existencia de los ángeles y espíritus, la
resurrección y la inmortalidad del alma.
El celo exagerado por la Ley y la pureza ritual los
llevó a despreciar a las masas y a sentirse superiores a los
demás, considerados como ignorantes e impuros. De esta
manera, la palabra de Dios mal interpretada, en lugar de
unir, favoreciendo una comunión de amor en el pueblo,
sirvió para dividirlo. Yes precisamente lo que está pasando
ahora con muchas sectas protestantes.
Su orgullo los llevó abuscar la salvación en sus méritos
personales, sin necesitar la misericordia y el perdón de Dios.
Por eso, multiplicaban sus obras exteriores, tergiversando
el sentido auténtico de la Palabra de Dios, que mira más al
corazón que a las apariencias.
Jesús les contestó: "¡Qué bien salvan las apariencias!
Con justa razón hablaba de ustedes el profeta lsaías
cuando escribía: Este pueblo me honra con sus
labios, pero su corazón está lejos de mí. Y si alguien
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12. se pone a predicar, no son más que mandatos de
hombres. Su religión, pues, de nada sirve" (Me 7, 6-
7).
Escribas
Desde el regreso de Babilonia, se le llamó escriba al
que era experto en la Palabra de Dios. Se le dio también el
nombre de doctor o maestro de la Ley (Mt 22, 3S; Le S,
17). Su título de honor era rabino.
Una vez que cesaron los profetas, los sabios se
ocuparon de la interpretación de la Sagrada Escritura. De
esta manera se formó la categoría de los doctores de la
Ley, que corresponde a los actuales teólogos, maestros de
religión o catequistas preparados.
Algunos pertenecían al Sanedrín o Gran Consejo del
pueblo judío. Jesús les reprochó su gran superficialidad en
las enseñanzas, al fijarse en los detalles y descuidar lo más
importante. En su mayoría pertenecían a la secta de los
fariseos.
Saduceos
Los saduceos constituían un partido político en el
judaísmo, desde el segundo siglo antes de Cristo hasta la
destrucción del templo de Jerusalén (año 70 d. C.).
Pertenecían sobre todo a la clase sacerdotal. En el Nuevo
Testamento son citados con frecuencia (Mt 3, 7; 16, 1.6.
llss; 22, 23.24; Me 12, 18; Le 20, 27; Hch 4, 1; S, 17; 23,
6s).
Los saduceos ejercían una grande influencia en los
destinos de la nación judía, porque formaban un poderoso
partido en el Sanedrín. En el pasado los fariseos y los
saduceos se habían alternado en el poder, mientras en
tiempos de Cristo los fariseos eran los que ejercían mayor
influjo sobre el pueblo.
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13. El poder de los saduceos tenía su raíz en el hecho
que la mayoría de los sumos sacerdotes salían de sus filas
y que su partido estaba bien relacionado con el gobierno
romano.
Al principio no tuvieron muchos conflictos con Jesús,
por su escaso contacto con el pueblo. Pero al final se unieron
a los fariseos, que eran sus contrarios, para acabar con Él
(Mt 22, 22s; Le 20, 20-26). Fue precisamente Caifás, sumo
sacerdote saduceo, que pronunció contra Jesús la sentencia
de muerte (Jn 11, 47-53). Su odio contra Cristo siguió contra
sus discípulos (Hech 4, 1-4; S, 17).
En contraste con la estricta obediencia farisaica, los
saduceos llevaban una vida más libre y mundana,
acomodándose en cierta forma a la cultura griega y
sucesivamente al dominio romano.
En el aspecto religioso, juntamente con los fariseos
reconocían la autoridad de la Ley, pero rechazaban las
tradiciones de los mayores. Negaban la resurrección de los
muertos (Me 12, 28; Le 21, 17; Mt 22, 23; Hech 4, 2; 23,
8), la inmortalidad del alma (Mt 22, 29-33) y hasta la
existencia de los espíritus en general (Hech 23, 8).
Existían diferencias de opinión con los fariseos en
muchas cuestiones rituales y jurídicas.
Herodianos
Eran los partidarios de la dinastía de Herodes.
Aparecen dos veces en el Nuevo Testamento (Me 3, 6 y Mt
22, 16), juntamente con los fariseos, como enemigos de
Jesús.
Zelotas
Constituían un partido político que reunía a los judíos
más fanáticos y extremistas, en contra del poder romano.
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14. Este partido actuó principalmente en la rebelión judía del
66-70 d. C., que causó la destrucción de Jerusalén.
Ancianos
Esta palabra expresaba más una dignidad que una
edad de la vida. Los ancianos eran los notables de una
localidad, los más representativos. En la comunidad judía
posterior al regreso de Babilonia, los jefes y los ancianos
formaban el consejo local (Esd 7, 2S; 10, 8. 14), responsable
sobre todo de la buena administración (Esd S, 9s; Jdt 6,
16; 8, 10; 10, 6; 1Mac 12, 6. 3S).
Posteriormente, en el Consejo Supremo o Sanedrín
fueron admitidos los ancianos junto a los príncipes de los
sacerdotes y los escribas (Mt 27,4-11; Me 11, 27; 14, 43.S3;
Le 22, 66). Por eso el Sanedrín se llamó también Consejo
de los Ancianos (Hech S, 21).
Sacerdotes y Levitas
Eran los descendientes de Levíy se dedicaban al culto.
Los Sacerdotes estaban distribuidos en 24 clases o linajes
sacerdotales y su orden y servicio se determinaban por
suertes (Le 1, 8; 1Cor 24). Los Levitas eran ayudantes de
los sacerdotes (Núm 3, S-9). Su función era hereditaria. Al
llegar a la edad prevista por la Ley, al sacerdote "se le
llenaban las manos" con ofrendas, rito que expresaba su
pertenencia al sacerdocio y su derecho sobre los sacrificios.
Misión y tarea del sacerdote era la instrucción en asuntos
religiosos o rituales, la oblación de los sacrificios, la
administración de los bienes del templo y la vigilancia sobre
éste. Notenía función pastoral en el sentido actual. Al ofrecer
los sacrificios tenía que llevar vestiduras especiales y
abstenerse de ciertas "impurezas legales".
Ala cabeza de los sacerdotes y levitas estaba el sumo
sacerdote, que vigilaba sobre el templo, el culto y el personal
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15. del mismo, manteniendo la unidad en campo cultual. Al
mismo tiempo era por derecho el presidente del Gran
Consejo o Sanedrín.
Esenios
Los esenios formaban una secta religiosa muy
apartada del pueblo, una especie de monjes con tendencia
marcadamente ascética. El nombre quiere decir "devotos",
"santos" o "silenciosos'~ Vivían cerca del Mar Muerto.
Practicaban la pobreza personal y el celibato, y
prestaban obediencia a Superiores elegidos por ellos
mismos. Se abstenían del comercio y de la guerra, y se
mantenían de su trabajo manual, sobre todo de la
agricultura.
Sus costumbres religiosas se caracterizaban por las
abluciones rituales, la veneración de Moisés y de los ángeles,
la oración matinal con motivo de la salida del sol y la estricta
observancia del sábado. No tomaban parte en el culto del
templo y no sacrificaban animales. Un largo tiempo de
prueba precedía al ingreso, que se realizaba mediante un
juramento solemne.
En campo doctrinal, por lo general los esenios tenían
las mismas ideas de los fariseos. Aestas se añadían doctrinas
secretas para los iniciados y doctrinas extrañas al judaísmo,
por lo cual nunca fueron adoptadas oficialmente.
Este grupo religioso, encerrado en sí mismo, vivió
completamente al margen del grande acontecimiento
representado por Cristo y los Apóstoles.
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16. Capítulo]
Contra Cristo;
contra su Iglesia
-"¿Nada contestas a las declaraciones de los testigos
en tu contra?".- Pero Jesús quedó callado.
Entonces, el jefe de los sacerdotes le dijo: "Yo te
ordeno de parte del verdadero Dios que nos digas si
tú eres el Cristo, el Hijo de Dios. Jesús le respondió:
"Así es, tal como acabas de decir; yo les anuncio
además que a partir de hoy ustedes verán al Hijo del
Hombre sentado a la derecha del Dios Poderoso y
viniendo sobre las nubes.
Entonces, el jefe de los sacerdotes rasgó sus ropas,
diciendo: "Ha blasfemado; ¿para qué necesitamos
más testigos? Ustedes mismos acaban de oír el
insulto contra Dios. ¿Qué les parece? Ellos
contestaron: "Merece la muerte. Luego comenzaron
a escupirle la cara y a darle bofetadas, diciéndole:
"Cristo, adivina quién te pegó (Mt 26, 63b-68).
Por no conocer a Jesús en su verdadera identidad,
los miembros del sanedrín levantaron sus gritos hasta el
cielo, al escuchar su declaración. Lo mismo hacen hoy en
día muchos expertos de la Biblia, cuando se dan cuenta de
la convicción de la Iglesia Católica de ser aquella única
Iglesia que fundó Jesús, destinada a continuar su obra en
el mundo "hasta que vuelva" (1Cor 11, 26).
"Blasfemia "gritan todos"; merece la muerte'~ Ni modo.
Así es cuando uno se fija demasiado en el lado humano de
la Iglesia, olvidándose de su origen divino, de las enormes
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17. riquezas espirituales que posee y de la excelente santidad
de los mejores entre sus miembros. Fue el error en que
cayeron los miembros del sanedrín al no tomar en cuenta
el origen divino de Jesús. Además, por motivos distintos,
todos los grupos religiosos y políticos de aquel tiempo se
unieron para luchar en contra de Jesús hasta darle muerte.
Lo mismo han hecho, y siguen haciendo, a lo largo de la
historia todas las fuerzas del mal para acabar con la Iglesia
que fundó Jesús. Pero no lo lograron ni lo lograrán nunca,
como aseguró el mismo Jesús:
Las puertas del infierno
no prevalecerán contra ella (Mt 16, 18).
En este capítulo vamos aexaminar el enorme parecido
que existe entre las acusaciones que en aquel tiempo los
distintos grupos dirigieron contra Jesús y sus discípulos y
las acusaciones que ahora las distintas organizaciones
religiosas, culturales y políticas dirigen contra la Iglesia
Católica. Es algo realmente sorprendente que, en lugar de
desanimar a los católicos practicantes, les da un motivo
más que les garantiza de encontrarse en el camino
verdadero.
¿por qué tus discípulos no ayunan?
En ese momento se le acercaron algunos discípulos
de Juan y le preguntaron: "¿Por qué nosotros y los
fariseos ayunamos a menudo y tus discípulos no
ayunan?".
Jesús les contestó: "¿Es bueno acaso que los
compañeros del novio anden tristes cuando el novio
está con ellos? Vendrán días en que el novio les será
quitado; entonces ayunarán (Mt 9, 14-15).
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18. Hay tiempo para todo: para reír, gozar y llorar. ¿por
qué, entonces, hay que ponerse celosos de la alegría del
hermano? ¿por qué hay que pensar mal? Déjalo gozar.
Mañana llegará la prueba y será diferente.
Además, ¿cómo saben ustedes que los católicos de
ahora como los discípulos de Jesús de aquel tiempo, no
ayunan? ¿Acaso, cuando se ayuna hay que proclamarlo a
los cuatro vientos?
Cuando ayunen, no pongan cara triste, como hacen
los hipócritas, que se desfiguran la cara para mostrar
a todos que ayunan. Les aseguro que ya recibieron
su recompensa. Tú, cuando ayunes, perfúmate el
cabello y no dejes de lavarte la cara, porque no son
los hombres quienes deben darse cuenta de que tú
ayunas, sino tu Padre que está en el secreto, y tu
Padre que ve en lo secreto te premiará (Mt 6, 16-18).
Nosotros ayudamos al prójimo,
mientras los católicos no ayudan
¿De qué ayuda se trata? De una cuantas láminas,
una medicina, un viaje en avioneta. ¿A cambio de qué? De
la propia fe. iQué buen negocio!
Además, ¿qué saben ellos, si ayudamos o no al
próximo?
Tengan cuidado de no hacer el bien delante de la
gente para que los vean; de lo contrario, el Padre
que está en los cielos no les dará ningún premio.
Por eso, cuando des limosna, no lo publiques al son
de trompetas, como hacen los hipócritas en las
sinagogas y en las calles, para que los hombres los
alaben. Yo les digo que ya recibieron su premio.
Tú, en cambio, cuando das limosna, no debe saber
tu mano izquierda lo que hace tu derecha; cuida que
tu limosna quede en secreto, y el Padre, que ve los
secretos, te premiará (Mt 6, 1-4).
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19. De todos modos, sepan los hermanos separados que
la verdadera ayuda no consiste en regalar un pescado, sino
en poner al necesitado en condiciones para pescar. Y ésta
es precisamente la lucha que está haciendo la Iglesia católica
en favor de todos los pobres del mundo, para que se eleve
su nivel cultural y económico, ytengan verdaderos derechos
políticos. Claro que todo esto no les gusta mucho a ciertos
tipos muy expertos en "fabricar pobres'~
No juzguen y no serán juzgados; porque de la manera
que juzguen serán juzgados y con la medida con que
midan los medirán a ustedes. ¿Por qué ves la pelusa
en el ojo de tu hermano y no ves la viga en el tuyo?
¿Cómo te atreves a decir a tu hermano: Déjame
sacarte esa pelusa del ojo, teniendo tú una viga en el
tuyo? Hipócrita, sácate primero la viga que tienes en
el ojo y así verás mejor para sacar la pelusa del ojo
de tu hermano (Mt 7, 1 -5).
Nosotros oramos mucho,
mientras los católicos no oran
Es la mentalidad clásica del fariseo. Todo lo que hace
quiere que sea visto y apreciado por la gente. Por eso
muchos grupos de protestantes hacen sus cultos de noche,
gritando con bocinas como locos. Para que los oiga la gente
y digan: "iCómo rezan los protestantes!".
Cuando recen, no hagan como los hipócritas, que
gustan de orar de pie en las sinagogas y en las
esquinas de las plazas, para que los hombres los
vean. Ellos ya recibieron su premio.
Tú, cuando reces, entra en tu pieza, cierra la puerta y
reza atu Padre que comparte tus secretos, y tu Padre,
que ve los secretos, te premiará. Al orar no
multipliquen las palabras, como hacen los paganos
que piensan que por mucho hablar serán atendidos.
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20. Ustedes no recen de ese modo, porque antes que
pidan, el Padre sabe lo que necesitan (Mt 6, 5-8).
La viga y la pelusa
En cualquier conversación, los protestantes se salen
siempre con lo mismo: "Los católicos se emborrachan; los
católicos no cumplen; los católicos son malos ¿Quiénes son
ellos para juzgar? Además, les pregunto: "¿Cuál pecado es
más grave: emborracharse o ser orgullosos como los
fariseos?'~ Acuérdense de las palabras de Jesús:
"No juzguen, para que no sean juzgados. Porque con
el juicio con que juzguen serán juzgados, y con la
medida con que midan serán mediros.
¿Cómo es que miras la pelusa que hay en el ojo de
tu hermano, y no reparas en la viga que hay en tu
ojo?
¿O cómo vas a decir a tu hermano: "Deja que te saque
la pelusa del ojo", teniendo la viga en el tuyo?
Hipócrita, saca primero la viga de tu ojo, y entonces
podrás ver para sacar la pelusa del ojo de tu hermano
(Mt 7, 1-5).
Los católicos son demonios
Según los protestantes, el Papa es la bestia del
Apocalipsis, la Iglesia Católica es la ramera, todos los
católicos son unos demonios. iQué bueno! Lo mismo le
dijeron a Jesús. Así que estamos en buena compañía.
El discípulo no es más que su maestro, ni el sirviente
es más que su patrón. Es ya bastante que el discípulo
sea como su maestro y el sirviente como su patrón.
Si al dueño de la casa lo han llamado demonio, ¡qué
no dirán de su familia! (Mt 1O, 24-25).
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21. Pecado contra el Espíritu Santo
Es el pecado del que cierra los ojos para no reconocer
la verdad. El que se encuentra en esta situación ya tomó su
decisión y no hay razones que valgan. Ni los más grandes
milagros logran hacerlo cambiar de opinión.
Para justificar su posición, está dispuesto a inventar
cualquier excusa.
Le trajeron en ese momento un endemoniado ciego
y mudo. Jesús lo sanó, de modo que pudo ver y
hablar. Con esto, todo el pueblo quedó asombrado y
preguntaban: "¿No será éste el Hijo de David?" A lo
que respondían los fariseos: "Este echa los
demonios por obra de Belcebú, rey de los demonios".
Jesús sabía lo que estaban pensando, y les dijo:
"Todo reino dividido en dos bandos está perdido, y
toda ciudad o familia dividida se viene abajo. Si fuera
Satanás el que echa a Satanás, se haría la guerra a sí
mismo; por lo tanto, ¿cómo podría durar su poder?
Y si yo echo los demonios con el poder de Belcebú,
los amigos de ustedes, ¿con que poder los echan?
Por lo tanto, ellos mismos juzgarán lo que ustedes
están diciendo.
Pero si yo echo los demonios con el soplo del Espíritu
de Dios, comprendan que el Reino de Dios ha llegado
a ustedes.
¿Cómo podrá alguien entrar en la casa de un hombre
valiente y robarle sus cosas, si primero no lo amarra?
Sólo entonces le podrán saquear la casa.
El que no está conmigo, está contra mí, y el que no
recoge conmigo, desparrama.
Por eso yo les digo: Se perdonará todo pecado y toda
palabra que ofenda a Dios; pero la palabra que ofende
al Espíritu Santo no se perdonará.
El que insulte al Hijo del Hombre podrá ser
perdonado; en cambio, el que insulte al Espíritu Santo
no será perdonado, ni en esta vida, ni en la otra (Mt
12, 22-32).
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22. El pecado contra el Espíritu Santo es algo realmente
serio. Y fue el pecado que cometieron los fariseos,
conocedores y cumplidores de la Ley. Así que... con cuidado,
mis queridos Testigos de Jehová, mormones, sabatistas,
etc. etc. Puede tratarse de su pecado. La Iglesia Católica
tiene demasiadas pruebas para demostrar que es la única
Iglesia que fundó Jesús. Si ustedes no la reconocen como
tal, pueden encontrarse en la misma situación en la que se
encontraban los fariseos de aquel tiempo con relación a
Jesús. No obstante que fueran "expertos" de la Biblia y
fieles cumplidores de la Ley, no lograron reconocer al Mesías.
Lo mismo puede pasar con ustedes. ¿para qué les sirve
tanto estudio de la Biblia, si no llegan a darse cuenta de
que sus distintos grupos notienen fundamento y no regresan
a la Iglesia católica, la única que fundó Jesús y que llegará
hasta el fin del mundo?
Comilones y bebedores.
El que busca la verdad, la encuentra. Si los hermanos
separados tienen verdadero interés en conocer la Iglesia
Católica en toda su verdad, no tienen que hacer otra cosa
que investigar seriamente. Se darán cuenta de que en ella
se han formado verdaderos gigantes de santidad: San
Agustín, Santo Tomás de Aquino, San Francisco de Asís,
Santa Teresa de Avila, San Francisco Javier, etc. etc. Entre
ellos, algunos han dado ejemplo de extrema austeridad de
vida, como San Juan de la Cruz.
Pero ¿qué pasa? Que de todos modos, no recapacitan.
Para ellos, todos los católicos son una bola de comelones y
bebedores. Ni modo. Lo mismo le dijeron a Jesús.
¿Con quién compararé a la gente de ahora? Son
como niños sentados en la plaza que se gritan unos
a otros: les tocamos la flauta y no bailaron, les
cantamos canciones tristes y no trataron de llorar.
21
1
23. Y digo esto porque vino Juan que no comía, ni bebía,
y dijeron: Está endemoniado. Luego viene el Hijo del
Hombre, que come y bebe, y le dicen: es un comilón
y un borracho, amigo de la gentuza y de los
pecadores. Sin embargo, al disponer esto, Dios ha
actuado con sabiduría (Mt 11, 16-19).
Estoy convencido de que, si el mismo Jesús en persona
regresara a este mundo, la mayoría de los protestantes no
lo reconocerían, tan distinto sería de aquel Cristo que ellos
imaginan.
Fíjense bien. Por lo general, los protestantes dicen
que no hay que tomar ni una gota de vino. No sé si lo
hacen para distinguirse de los católicos o porque están
convencidos de que ésta sea de veras la enseñanza bíblica.
Y sin embargo, Jesús cambió el agua en vino (Jn 2, 1-11).
Según ellos, Jesús tendría que haber cambiado el vino en
agua.
Los protestantes rechazan la compañía de los
paganos, es decir, de los que no pertenecen a sus grupos,
considerados todos como pecadores. Y Jesús comía con
los publicanos y pecadores (Mt 9, 11), no obstante todas
las críticas de los fariseos.
Estoy seguro de que, si Cristo volviera, los protestantes
lo rechazarían en masa, acusándolo de ser un católico
disfrazado, borracho, comilón y endemoniado.
Propaganda:
inosotros curamos!
iCuán distinto es el estilo de Jesús y el estilo de los
hermanos separados con relación a las curaciones! Jesús
ordenaba que no se hablara, mientras los protestantes lo
gritan a los cuatro vientos, se trate de verdaderas curaciones
o supuestas.
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24. Muchos lo siguieron, y él los sanó a todos. Pero él
les mandaba que no dijeran quién era.
Así debía cumplirse lo que dice el profeta lsaías:
"Viene mi siervo, mi elegido; a él le quiero y en él me
complazco. Pondré mi Espíritu sobre él, para que
anuncie la verdad a las naciones.
No peleará con nadie ni gritará, ni llenará las plazas
del ruido de sus discursos.
No quebrará la caña hecha trizas, ni apagará la mecha
que todavía humea, hasta que finalmente haga
triunfar la verdad.
De él las naciones esperan su salvación" (Mt 12,17-
21).
El siervo de Yavé es todo servicio y humildad. Nada
de gritos, altercados y presunción. Lo que le importa es
hacer el bien y ya.
En esto la Iglesia católica trata de imitar en todo el
ejemplo de Cristo. Conoce muy bien la debilidad humana y
por lo tanto, quiere que no se haga propaganda, si alguien
tiene algún don extraordinario de curación o milagro. Que
todo se haga en silencio y en la más grande humildad.
Nada de hablar por radio, invitando a campañas o sesiones
en que "habrá milagros'~ La Iglesia Católica prefiere seguir
"el estilo de Jesús'~
Tradiciones de los antiguos
Los protestantes se ufanan de estar completamente
apegados a la Biblia y rechazar cualquier tradición humana.
Pero de hecho, ¿qué pasa? Que en la realidad, aparte de la
Biblia, cuentan con una serie de ataques contra la Iglesia
Católica, que se remontan al mismo Martín Lutero y a los
fundadores de las distintas sectas. Ponen a un lado la Ley
de Dios que habla de amor (Mt S, 38-48) y búsqueda de la
unidad (Jn 17, 21), para seguir la tradición de los antiguos,
que proclama el odio y la división.
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25. Además, insisten en ciertas prohibiciones propias del
Antiguo Testamento, que no tienen nada que ver con la
enseñanza de Cristo.
¡Hipócritas! lsaías profetizó exactamente de ustedes,
cuando dijo: "Este pueblo me honra con la boca, pero
su corazón está lejos de mí. El culto que me rinden
no sirve de nada, y sus enseñanzas no son más que
mandatos de hombres".
Después, Jesús hizo acercarse a la gente y les dijo:
"Escuchen y entiendan: lo que entra por la boca no
hace impuro al hombre, pero lo que sale de su boca,
eso mancha al hombre".
Entonces los discípulos se acercaron y le dijeron:
"¿Sabes que los fariseos se escandalizan al oírte
hablar así?" Jesús respondió: "Toda planta que no
haya plantado mi Padre celestial será arrancada de
raíz. ¡Déjenlos! Son ciegos que guían a otros ciegos.
Y si un ciego guía a otro ciego, los dos caen en un
hoyo".
Pedro, tomando la palabra, le dijo: "Explícanos esta
comparación". Jesús le respondió: "¿Ni siquiera
ustedes son capaces todavía de entender esto? ¿No
comprenden que todo lo que entra por la boca va a
parar al vientre y después sale del cuerpo, mientras
que lo que sale de la boca viene del corazón, y eso
es lo que hace impuro al hombre?
En efecto, del corazón proceden los malos deseos,
asesinatos, adulterios, inmoralidad sexual, robos,
mentiras, chismes. Esas son las cosas que hacen
impuro al hombre; pero comer sin lavarse las manos,
eso no hace impuro al hombre" (Mt 15, 7-20).
Claro que también en la Iglesia Católica existen
tradiciones o costumbres, especialmente a nivel popular,
que necesitan una purificación. Estamos muy conscientes
de ello, y estamos luchando para salir de esta situación de
subdesarrollo religioso en que viven millones de católicos
bautizados pero no debidamente instruidos por falta de
24
1
26. agentes de pastoral. Sin embargo, no existe ninguna
comparación entre nuestra situación que fundamentalmente
depende de la carencia de medios y personal adecuado,
que ha engendrado toda una serie de tradiciones populares,
muchas veces al margen del cristianismo, y la situación de
los protestantes que actúan de esta manera, convencidos
de que para salvarse se necesita abstenerse de ciertos
alimentos y lanzar ataques contra la Iglesia Católica,
considerada como "la prostituta" del Apocalipsis, evocando
así toda una problemática propia de otros tiempos y
atribuyéndole un valor perpetuo.
Cuidado con la levadura
Jesús les dijo: "Tengan cuidado y desconfíen de la
levadura de los fariseos y de los saduceos". Y los
discípulos se pusieron a comentar entre ellos: "Nos
dice eso porque no trajimos pan". Jesús, al darse
cuenta, les dijo: "Hombres de poca fe, ¿por qué se
preocupan de no tener pan? ¿No han comprendido
todavía? ¿No recuerdan los cinco panes para los
cinco mil hombres, y cuántos canastos llenaron con
las sobras? ¿Ni los siete panes para los cuatro mil
hombres, y cuántas canastadas recogieron?
¿Cómo no entienden que no hablo de panes cuando
les digo: "Cuidado con la levadura de los fariseos y
de los saduceos?". En esos momentos
comprendieron que no les hablaba de la levadura
para el pan, sino de las enseñanzas de los fariseos y
saduceos (Mt 16, 6-12).
iCuántos problemas se hubieran evitado si se hubiera
hecho caso a esta advertencia de Jesús! Muchos Católicos
impreparados e ingenuos, deseosos de "conocer la Palabra
de Dios", escucharon programas de radio y cassettes
protestantes, leyeron sus libros y conversaron con ellos. Al
final cayeron en sus redes. Si desde un principio hubieran
evitado esta "levadura'~ no se hubieran hecho protestantes.
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1
27. "Tengan cuidado y desconñen de la levadura de los
fariseos y de los saduceos", dijo Jesús.
Hermano católico, si quieres ser fiel a tu Iglesia, no
escuches cassettes ni programas de radio protestantes, no
leas sus libros y revistas, no converses con ellos sobre temas
religiosos sin antes estar debidamente preparado, ni
frecuentes sus templos. Cuidado con su levadura, es decir
con su enseñanza, que te puede confundir y alejar de la
verdadera Iglesia. Primero conoce tu religión y después
compárala con las distintas sectas protestantes.
La enseñanza protestante es como un microbio que
puede penetrar en el cuerpo y hacer daño sin que uno se
dé cuenta. Cuando uno se da cuenta y quiere poner remedio,
ya es demasiado tarde, puesto que la enfermedad ya avanzó
demasiado.
Fíjate bien. Si los protestantes buscaran la verdad,
dialogarían con los católicos preparados. Pues no. Buscan
siempre a los católicos que no saben, para enredarlos con
un sin fin de citas bíblicas desconectadas e interpretadas a
su modo, y después llevárselos a sus grupos.
Lo mejor que puedes hacer, es acercarte a la parroquia
e informarte de algún curso de formación cristiana. Un buen
curso será para ti como una vacuna contra la "levadura" de
los protestantes. Y si ya algún microbio entró en tu cuerpo
y te está molestando, entonces trata de matarlo, mediante
el diálogo con algún sacerdote o catequista preparado y la
lectura de un buen libro que trate del problema protestante.
Solamente haciendo esto, podrás decir que eres un
verdadero católico, plenamente consciente de la importancia
de la fe auténtica, vivida y predicada por los apóstoles, y
transmitida por la Iglesia Católica.
26
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28. Poder de perdonar los pecados
Jesús subió a la barca y se fue por mar a su ciudad.
Allí le llevaron a un paralítico, tendido en una camilla.
Al ver Jesús la fe de ellos, dijo al paralítico: "Hijo ten
confianza. Tus pecados te quedan perdonados".
Entonces algunos de los maestros de la Ley
pensaron: "Al hablar así ofende a Dios". Jesús, que
veía sus pensamientos, dijo: "¿Por qué piensan mal?
¿Qué es más fácil decir: Te perdono tus pecados, o
levántate y anda? Sepan entonces que el Hijo del
Hombre tiene poder sobre la tierra para perdonar los
pecados a los hombres". Y dijo al paralítico:
"Levántate, toma tu camilla y vete a tu casa".
Y el paralítico se levantó y se fue a su casa. La gente,
asustada al ver esto, bendijo a Dios por haber dado
tanto poder a los hombres (Mt 9, 1-8).
iQué enorme diferencia notamos ante la actitud de la
gente sencilla y la de los fariseos! La gente sencilla bendijo
a Dios por haber dado tanto poder a los hombres (Mt 9, 8),
mientras los fariseos vieron en la actuación de Jesús una
ofensa para Dios.
Es lo que sigue pasando ahora. Nosotros católicos
bendecimos a Dios por concedernos su perdón mediante el
bautismo y la confesión, sirviéndose de la colaboración de
ciertos hombres escogidos, mientras los protestantes gritan
al escándalo. "¿Cómo un hombre puede perdonar los
pecados?", siguen repitiendo.
Respuesta: "Para Dios nada es imposible. Si Dios
quiere conceder su poder a ciertos hombres escogidos,
¿quién se lo puede impedir?'~
Dicho esto, sopló sobre ellos: "Reciban el Espíritu
Santo, a quienes ustedes perdonan, queden
perdonados, y a quienes no libren de sus pecados,
queden atados" (Jn 20, 22-23).
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1
29. Comer el Cuerpo de Cristo
y beber su sangre
"Yo soy el pan de vida. Vuestros antepasados, que
comieron el maná en el desierto, murieron. Aquí
tienen el pan que bajó del cielo para que lo coman y
ya no mueran.
Yo soy el pan vivo bajado del cielo, el que come de
este pan vivirá para siempre. El pan que yo daré es
mi carne, y la daré para la vida del mundo.
Los judíos discutían entre ellos. Unos decían:
"¿Cómo este hombre va a darnos a comer su carne?"
Jesús les contestó: "En verdad les digo: si no comen
la carne del Hijo del Hombre, y no beben su sangre,
no viven de verdad. El que come mi carne y bebe mi
sangre, vive de vida eterna, y yo lo resucitaré en el
último día.
Mi carne es comida verdadera y mi sangre es bebida
verdadera. El que come mi carne y bebe mi sangre
vive en mí y yo en él. Como el Padre que vive me
envió, y yo vivo por él, así, quien me come a mítendrá
de mí la vida" (Jn 6, 48-57).
Es el problema de siempre. Los protestantes, como
los judíos del tiempo de Cristo, se preguntan: "¿Cómo es
posible comer su cuerpo?" Para nosotros la cosa es más
sencilla. Confiando en Cristo, como San Pedro, repetimos:
"Señor, ¿a quién iremos? Tú tienes palabras de vida
eterna" (Jn 6, 68).
En la Última Cena Jesús por primera vez dio a comer
su cuerpo y a beber su sangre, confiriendo a los apóstoles
y a sus sucesores el poder de hacer lo mismo.
Después, tomó el pan y, dando gracias, lo partió y se
lo dio, diciendo: "Esto es mi cuerpo, el que es
entregado por ustedes. Hagan esto en memoria mía".
Después de la Cena, hizo lo mismo con la copa. Dijo:
28
1
30. "Esta copa es laAlianza Nueva sellada con mi sangre,
que va a ser derramada por ustedes" (Le 22, 19.20).
Ypor si las dudas, San Pablo en la Primera carta a los
Corintios nos recalca, que se trata del verdadero Cuerpo de
Cristo y no de un mero recordatorio (1 Cor 11, 29).
Yo recibí esta tradición del Señor que, a mi vez, les
he transmitido:
Que el Señor Jesús, la noche en que fue entregado,
tomó el pan, y después de dar gracias, lo partió
diciendo: "Esto es mi cuerpo que es entregado por
ustedes: hagan esto en memoria mía". De la misma
manera, tomando la copa después de haber cenado,
dijo: "Esta copa es la Nueva Alianza en mi sangre.
Siempre que beban de ella háganlo en memoria mía".
Así, pues, cada vez que comen de este pan y beben
de la copa, están anunciando la muerte del Señor
hasta que venga. Por lo tanto, si alguien come el pan
y bebe la copa del Señor Indignamente, peca contra
el cuerpo y la sangre del Señor.
Por esto, que cada uno examine su conciencia antes
de comer del pan y beber de la copa. De otra manera,
come y bebe su propia condenación al no reconocer
el Cuerpo (1 Cor 11, 23-29).
Más claro, no se puede. Así que, mis estimados
hermanos protestantes, si de veras respetan tanto la Biblia,
¿por qué no aceptan lo referente a comer el Cuerpo de
Cristo y a beber su Sangre? Yo les diré la razón. Jesús dio el
poder solamente a los Apóstoles y éstos lo transmitieron a
sus sucesores. Así que ustedes, al separarse de la Iglesia
que fundó Jesús, ya se desconectaron de los Apóstoles y
por lo tanto sus grupos no cuentan con personas que tengan
este poder. Por eso, prefieren negar la presencia real de
Cristo en el pan y en el vino consagrados en la misa, que es
la repetición de la Ultima Cena de Jesús, que afirmarla y a
29
1
31. la mera hora no tener la posibilidad de comer el cuerpo de
Cristo y beber su Sangre.
Pasión, muerte y resurrección
A partir de ese día, Jesucristo comenzó a explicar a
sus discípulos que debía ir a Jerusalén y que las
autoridades judías, los sumos sacerdotes y los
maestros de la Ley lo iban a hacer sufrir mucho. Les
dijo también que iba a ser condenado a muerte y que
resucitaría al tercer día.
Pedro, tomándolo aparte, se puso a reprenderlo,
diciéndole: "¡Dios te libre, Señor! No, no pueden
sucederte esas cosas". Pero Jesús se volvió y le dijo:
"¡Detrás de mí, Satanás! Tú me harías tropezar. No
piensas como Dios, sino como los hombres" (Mt 16,
21-23).
iCómo nos gustaría vivir en una Iglesia respetada y
en paz con todos! Es la manera de pensar de los hombres.
Mientras la manera de pensar de Dios es muy distinta. La
verdadera Iglesia, a imitación de Jesús, tendrá que ser
despreciada, perseguida y muerta en muchos de sus
miembros... Pero, "al tercer día resucitará". Es decir: habrá
sufrimiento, luchas, Muerte... pero nunca se acabará. "Los
poderes del infierno no prevalecerán contra ella" (Mt 16,
18).
Agitador político
Los judíos comenzaron a gritar: "Si lo dejas libre, no
eres amigo del César; porque todo el que se proclama
rey va contra el César" (Jn 19, 12).
Es la misma acusación que los politiquillos, los
intelectualoides y los pseudo-santos de los cultos
protestantes siguen dirigiendo contra la Iglesia católica.
30
1
32. Según ellos, cualquier enseñanza o aclaración de la Iglesia
que afecte los intereses de los poderosos, es una intromisión
indebida en la política. La Iglesia tendría que estar encerrada
en los templos y en las sacristías. Los católicos tendrían
que preocuparse exclusivamente por la salvación del alma.
iQué bueno que también a Jesús lo acusaron de
meterse en la política! Y mira nomás: iLos protestantes
están de acuerdo con esta acusación! ¿El Papa Juan Pablo
11 interviene para buscar la paz entre Argentina eInglaterra?
Se está metiendo en la política. ¿El Papa interviene para
buscar un arreglo en Centroamérica? Se está metiendo en
la política. "¿Por qué tiene que intervenir el Papa?" -piensan
ellos-. Que se sigan matando. La religión es solamente para
orar, ayunar, estudiar la Biblia... y salvar la propia alma.
Todo lo demás es mundo'~
iQué bonita manera de pensar! Si Jesús hubiera
pensado así, seguramente en lugar de matarlo le hubieran
hecho un monumento. Así que, si lo mataron, por algo fue.
Yseguramente no fue por problemas de ayunos, oraciones,
comida o cosa por el estilo. Si lo mataron, "fue porque su
actuación representaba un estorbo para muchos". Lo mismo
que está pasando ahora con la Iglesia católica, cuando
interviene en los problemas del subdesarrollo, de la
explotación, del control de la natalidad, del aborto, etc.
"La Iglesia católica se mete en la política". Faltaría
más. Tratándose de una actividad humana, también la
política quedó afectada por la acción de la Iglesia, que mira
a formar al hombre integral, hecho de alma y cuerpo, con
un destino temporal y eterno. No por nada los emperadores
romanos persiguieron a la Iglesia durante sus primeros tres
siglos. Trataron de apagar aquella llama, que poco a poco
iba adar una nueva luz atodo el mundo. Pero no lo lograron
y tuvieron que ceder.
Lo mismo pasará ahora y siempre. Nada ni nadie podrá
hacer callar a la Iglesia. Su palabra será una luz que llegará
31
1
33. a iluminar todas las realidades humanas, sin excluir la
política.
Unidos contra Cristo y su Iglesia
Es lo más sorprendente de todo. El odio contra Cristo
logra unir tendencias y grupos distintos.
Los fariseos se retiraron e hicieron consejo para
hacerle decir algo de que pudieran acusarlo. Por eso
le enviaron discípulos suyos y algunos partidarios
de Herodes (Mt 22, 15-16).
Ese mismo día vinieron a él algunos de los saduceos.
Estos no creen en la resurrección de los muertos, y
por eso le propusieron este caso (Mt 22, 23).
Los fariseos vieron cómo Jesús había dejado
callados a los saduceos y se pusieron de acuerdo
para juntarse con él. Uno de ellos, un maestro de la
Ley, trató de averiguar su parecer con esta pregunta:
"¿Maestro, cuál es el mandamiento más importante
de la Ley?" (Mt 22, 34-36).
Por entonces, los jefes de los sacerdotes y las
autoridades judías se reunieron en el palacio del jefe
de los sacerdotes que se llamaba Caifás, y se
pusieron de acuerdo, para detener con astucia a
Jesús y darle muerte (Mt 26, 3-4).
Los que tomaron preso a Jesús lo llevaron a la casa
de Caifás, jefe de los sacerdotes. Ahí se hallaban
reunidos los maestros de la Ley y las autoridades
Judías (Mt 26, 57).
Los jefes de los sacerdotes, los jefes de los judíos y
los maestros de la Ley lo insultaban, diciéndole: "Ha
salvado a otros y no puede salvarse a sí mismo: Si
es el rey de Israel, que baje ahora de la cruz y
32
1
34. creeremos en él. Ha puesto su confianza en Dios; si
Dios lo ama, que lo libere, puesto que él mismo decía:
Soy el Hijo de Dios". Hasta los ladrones que estaban
crucificados a su lado lo insultaban (Mt 27, 41-44).
Al día siguiente (era el día después de la preparación
a la Pascua) los jefes de los sacerdotes y los fariseos
se presentaron juntos ante Pilato para decirle: "Señor,
nos hemos acordado que ese mentiroso dijo cuando
todavía vivía: después de tres días resucitaré. Por
eso, manda que sea asegurado el sepulcro hasta el
tercer día: no sea que vayan sus discípulos, roben el
cuerpo y digan al pueblo: Resucitó de entre los
muertos. Este sería un engaño más perjudicial que
el primero".
Pilato les respondió: "Ahítienen los soldados, vayan
y tomen todas las precauciones que crean
convenientes". Ellos pues, fueron al sepulcro y lo
aseguraron, sellando la piedra y poniendo centinelas
(Mt 27, 62-66).
Algunos de los guardias fueron a la ciudad a contar
a los jefes de los sacerdotes todo lo que había
pasado. Ellos se reunieron con las autoridades judías
y acordaron dar a los soldados una buena cantidad
de dinero, junto con esta orden: "Digan que mientras
dormían vinieron de noche los discípulos y se
robaron el cuerpo de Jesús. Si esto llega a oídos de
Pilato, nosotros lo calmaremos y les evitaremos
molestias a ustedes". Los soldados recibieron el
dinero y siguieron las instrucciones. Esta mentira
corrió entre los judíos y dura hasta hoy (Mt 28, 11-
15).
En el odio todo se vale: la pregunta hipócrita que
encierra una trampa, el soborno, la mentira... el asesinato.
Pero Jesús resucitó de veras, para vergüenza de los
enemigos y alegría de los discípulos.
33
1
35. Es lo que está pasando con la Iglesia. iCuántos han
luchado y siguen luchando, en contra de ella para acabarla
de una vez! Gobiernos dictatoriales, sociedades secretas,
corrientes filosóficas ateas, religiones no cristianas..., sectas
protestantes. Parece imposible como el odio contra la Iglesia
Católica logra amalgamar fuerzas tan distintas. ¿y qué han
logrado? Nada.
iA cuántos les hubiera gustado ver la Iglesia Católica
muerta y enterrada para siempre! Napoleón Bonaparte, la
masonería, los testigos de Jehová... tantas sectas
protestantes.
Napoleón Bonaparte aseguró que con la muerte del
Papa Pío VI que tenía preso en la cárcel, enterraría a la
Iglesia Católica. ¿y qué pasó? Que a la muerte del Papa Pío
VI los cardenales se reunieron y eligieron a otro Papa, Pío
VII. Y la Iglesia de Cristo siguió adelante.
También fracasaron todas las profecías de las
sociedades secretas y de muchos fundadores de sectas
protestantes. Por ejemplo, Charles Táze Russell, fundador
de los Testigos de Jehová, aseguró que para el año 1914 se
habría acabado la Iglesia Católica. Ya pasaron más de
setenta años de aquella fecha y la Iglesia católica sigue
adelante más viva y pujante que nunca.
En una circular de Le Grand Orient del 2 de abril de
1884, se invitaba a los hermanos masones a proseguir la
obra de la Revolución Francesa de 1789, "hasta la
destrucción de toda religión sobrenaturai"(Iglesia católica).
"El papado -escribía el masón A. Pike en una carta
del 28 de diciembre de 1886 al masón Timoteo Riboli- ha
sido durante más de milaños el verdugo de la humanidad;
contra este formidable poder, pues, se impone la unión de
todas las fuerzas de la masonería italianá' (Boletín oficial
de septiembre de 1887, p. 173).
A principio de siglo, el diputado francés Macé, así se
expresaba: ''Hemos de estar alerta y prestarnos mutua
34
1
36. confianza si queremos terminar nuestra obra, que no es
otra cosa, como saben, que la victoria sobre elclericalismo.
La República ha de barrer de su seno las congregaciones
religiosas; elsistema delospaliativosñ.Jesiemprepeligroso;
hemos de matar al enemigo de un solo go/pe"(Compte-
rendu du Grand Orient, 1903).
Ramón Martínez Zaldúa, en su libro "¿Qué es la
masonería?", p. 121, así expresa la posición de la masonería
frente a la Iglesia católica: ''La Masonería latina repudia la
revelación y el dogma en cualquier forma. Esta diferencia
sustantiva se opone fundamentalmente a la postura de la
Iglesia'~
Así que ''todos unidos" contra el enemigo común: LA
IGLESIA CATÓLICA.
35
1
37. Capítulo 4
Prefirieron
las tinieblas a la luz
San Juan, el evangelista teólogo, así resume la actitud
de los judíos frente a Cristo:
Vino a su propia casa
y los suyos no lo recibieron (Jn 1, 11).
Es algo realmente escalofriante, una verdadera
tragedia. El pueblo de Israel, heredero de las promesas, no
recibió al Mesías esperado, que representaba la razón más
profunda de su existencia como nación, su orgullo como
pueblo escogido y el motivo más íntimo de su esperanza.
¿por qué?
Sus obras eran malas
La luz vino al mundo, y los hombres prefirieron las
tinieblas a la luz, porque sus obras eran malas: ahí
está la condenación. "El que obra mal, odia la luz y
no viene a la luz, no sea que su maldad sea
descubierta y condenada. Pero el que camina en la
verdad busca la luz para que se vea claramente que
sus obras son hechas según Dios" (Jn 3, 19-21).
Los que más directamente intervinieron en la lucha
contra Jesús, no eran unos borrachos empedernidos o unos
políticos corruptos y sin conciencia. Fueron los fariseos, los
más expertos conocedores y fieles cumplidores de la Ley.
Ellos movieron todos los hilos para que las organizaciones
judías y todo el pueblo en general rechazaran aJesús. ¿por
36
1
38. qué? "Sus obras eran malas", dice San Juan. ¿oe cuáles
obras se trata, entonces?
Es el problema de siempre. Estamos acostumbrados
a juzgar las cosas por las apariencias. Pensamos: "Fulano
estudia la Biblia, conoce muchas citas, ora, ayuna, predica...
es un santo". Pues bien, ¿basta esto para ser santos? ¿Acaso
no hacían eso mismo los fariseos? Y sin embargo, "sus
obras eran malas".
Es algo realmente preocupante, porque lo mismo
puede suceder ahora con nosotros, si no nos ponemos alerta
y no dejamos a un lado ciertos slogans que sirven solamente
de propaganda: "Creo en Cristo; soy salvo, aleluya"; "Soy
católico: comulgo, rezo, predico, conozco la Biblia... soy
salvo". Tenemos que entender que no basta esto para
salvarse. Se necesita algo más para que "nuestras obras no
sean malas".
Falta de apertura
Presentando la actitud de los discípulos de Juan el
Bautista hacia Jesús, el apóstol San Juan empieza a darnos
una idea acerca de la causa que llevó a los responsables
del pueblo judío a rechazar a Jesús.
Fueron donde Juan y le dijeron: "Maestro, ése que
estaba contigo al otro lado del Jordán, y en cuyo favor
hablaste, se ha puesto también a bautizar, y todo el
mundo va donde él".
Lo que impresionaba a muchos discípulos de Juan el
Bautista, era el grande ejemplo de extrema austeridad de
su maestro, muy sacrificado en la comida y la bebida. Llega
Jesús y lo ven tan distinto de su maestro. En lugar de
examinar "fríamente" la situación y hacer un reajuste de
sus ideas frente a los hechos concretos, se encierran en sí
mismos y buscan pretextos para justificar su falta de
aceptación.
37
1
39. Me pregunto: "¿No será igual la posición de los
protestantes frente a la Iglesia católica? Los protestantes
¿no tendrán ideas preconcebidas con relación a la verdadera
Iglesia de Cristo, pretendiendo una grande austeridad de
costumbres en todos sus miembros?'~
En lugar de examinar objetivamente la verdad, se
forjan ideas propias sobre la verdadera Iglesia de Cristo y
concluyen: "La Iglesia Católica no puede ser la verdadera
Iglesia de Cristo, porque le falta esto, y esto... Puesto que
nosotros cumplimos con el sábado, no tomamos ni una
gota de licor, no comemos carne de animales impuros,
ayunamos... entonces nosotros somos la verdadera Iglesia
de Cristo'~
Pues bien, ¿cómo saben ustedes que estas son las
características de la verdadera Iglesia deCristo? Esta manera
de proceder es muy peligrosa y puede llevar al fracaso,
como llevó al fracaso a muchos discípulos de Juan el
Bautista, que no reconocieron a Jesús no obstante las
recomendaciones de su maestro.
Juan respondió: "Nadie puede atribuirse nada, sino
lo que le haya sido dado por Dios. Ustedes mismos
saben muy bien que yo dije: Yo no soy el Cristo, sino
el enviado que lo va anunciando.
Alguien tiene la novia y es el novio, pero el padrino
del novio está a su lado y se alegra con solo oír la
voz del novio. Por eso mi alegría es perfecta: es
necesario que él crezca y que yo disminuya.
El que viene de lo alto es superior a todos. Si alguien
viene de la tierra no es más que hombre terrenal y
sus palabras también vienen de la tierra, Más el que
viene del Cielo es más grande que cualquiera, y
puede hablar de lo que allá ha visto y oído. Sin
embargo, nadie hace caso de lo que dice. Pero quien
recibe su mensaje hace suya la verdad misma de
Dios.
Este fue enviado por Dios y hace suyas las palabras
de Dios que le comunica su Espíritu sin medida" (Jn
3, 27-34).
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40. Falta de amor de Dios
El mismo Padre, que me envió, ha dado su testimonio
referente a mí. Ustedes nunca han oído su voz ni han
visto nunca su rostro. Y tampoco su palabra se
encuentra entre ustedes que creen tenerla, pues Él
les envía a alguien y ustedes no lo reciben.
Ustedes escudriñan las Escrituras porque piensan
encontrar en ellas la vida eterna. Pero esas mismas
Escrituras hablan en mi favor; y, sin embargo,
ustedes no quieren venir a mí, con lo cual tendrían la
vida.
Yo no hago caso del favor de los hombres. Ya los
conozco: el amor de Dios no está en ustedes. Yo
vengo de parte de mi Padre, y ustedes no me hacen
caso (Jn 5, 37-43).
iQué palabras tan tremendas! Hay gente que piensa
poseer el mensaje de la salvación y sin embargo no lo posee.
En realidad no entiende nada de su contenido profundo.
Todo se queda en pura palabrería, sin llegar al meollo del
asunto.
En nuestro caso concreto, ¿es posible que un testigo
de Jehová, un sabatista o un pentecostal, no se dé cuenta,
mediante un atento estudio bíblico e histórico, de que la
Iglesia Católica es la única fundada por Cristo y que por lo
tanto es necesario pertenecer a ella para cumplir con la
voluntad de Jesús? ¿oe dónde sacan el principio según el
cual cada quien puede "inventar" su religión?
Ustedes escudriñan las Escrituras porque piensan
encontrar en ellas la vida eterna. Pero esas mismas
Escrituras hablan en mi favor; y, sin embargo,
ustedes no quieren venir a mí, con lo cual tendrían la
vida (Jn 5, 39-40).
¿A qué se debe este fracaso de interpretación? ¿por
qué no se acercan a la Iglesia católica, con lo cual ''tendrían
la vida?". "El amor de Dios no está en ustedes'~ dice Jesús.
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1
41. Alguien podría preguntarse: "¿Es posible que haya
gente que estudie tanto la Biblia y se encuentre en una
situación tan deplorable?" Respuesta: "Claro que sí, puesto
que ya sucedió con los judíos del tiempo de Jesús".
Además, ahora el problema se hace siempre más
complicado a causa de la distancia que nos separa de Cristo
y de la gran cantidad de defectos que tienen los miembros
de la Iglesia Católica. En esta situación, si falta verdadero
amor de Dios y sinceridad de corazón, es muy fácil buscar
pretextos y quedarse cada uno en sus ideas y en su Iglesia.
Falta de conocimiento de Dios
Por eso Jesús dijo en voz muy alta en el Templo estas
advertencias: "Ustedes dicen que me conocen y que
saben de dónde vengo. Sepan que no he venido en
nombre propio: quien me envía es el Verdadero.
Ustedes no lo conocen, pero yo lo conozco porque
soy de Él, y Él me ha enviado" (Jn 7, 28-29).
Los judíos estaban convencidos de conocer a Dios y
sus planes. En la realidad, lo entendían todo a su modo; se
oponían a la verdad.
¿No pasará lo mismo con los hermanos separados en
lo que se refiere a Cristo y a su Iglesia? Piensan saberlo
todo y tal vez no saben nada. ¿por qué, en lugar de hablar
mal de la Iglesia Católica, no se dedican a profundizar el
problema?
Pero nadie le puso la mano encima; porque aún no
había llegado su hora (Jn 7, 30).
Mis queridos hermanos en Cristo, acuérdense: "Nunca
van a lograr destruir la Iglesia católica. Todas sus calumnias
algún día van a representar una carga para ustedes mismos,
que sentirán vergüenza por todas las mentiras que habrán
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1
42. dicho. El estilo de los judíos de querer matar, destruir...
nunca Podrá tener éxito en la Iglesia católica. La promesa
de Cristo nunca podrá fallar:
Las puertas del infierno
no prevalecerán contra ella (Mt 16, 18).
Así que no sigan perdiendo su tiempo inútilmente. Al
contrario, estudien atentamente el fundamento de sus
grupos y el fundamento de la Iglesia Católica, y tomen una
decisión con toda valentía, sin miedo al que dirá la gente.
En realidad, se trata de un asunto muy serio, que no admite
demora.
Orgullo
Los policías del templo volvieron donde los
sacerdotes y los fariseos. Estos les preguntaron:
"¿Por qué no lo han traído?" Los policías
contestaron: "Nunca un hombre ha hablado como
este hombre". Los fariseos les dijeron: "También
ustedes se han dejado engañar. ¿Acaso algún jefe o
algún fariseo ha creído en él? Pero esos que no
conocen la Ley, ¡son unos malditos!" (Jn 7, 45-48).
La gente sencilla por lo menos se queda asombrada
y perpleja frente a la actuación de Cristo, mientras los
"sabios" tienen ya su respuesta preparada: "Jesús es un
engañador. No se dejen despistar".
Parece oír las acusaciones de los hermanos separados
"bien instruidos", en contra de la Iglesia Católica. Son las
mismas que lanzó Lutero hace más de 450 años. Y las
repiten de memoria sin reflexionar: "Nosotros conocemos
la verdad: El Papa es la bestia del Apocalipsis; los católicos
son demonios y se van a condenar; para salvarse, hay que
salirse de la Iglesia católica'~
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1
43. Si alguien reconoce que existen también buenos
católicos y que en toda la historia de la Iglesia hay algo que
manifiesta una especial asistencia del Espíritu Santo (por
ejemplo, extrema coherencia en la enseñanza del magisterio
a lo largo de tantos siglos), los expulsan acusándolos como
"malditos ignorantes".
Hijos del diablo
Ustedes tienen por padre al Diablo, y quieren realizar
los malos deseos del Diablo: él, desde el comienzo,
es asesino de hombres. No ha permanecido en la
verdad porque en él no hay verdad. Cuando habla,
de él brota la mentira, porque es mentiroso y padre
de toda mentira (Jn 8, 44).
Una cosa es cometer pecados por debilidad y luego
arrepentirse, y otra cosa es ''vivir en el pecado". ¿Qué quiere
decir ''vivir en el pecado'? Quiere decir vivir en la falsedad,
apegados a (a propia manera de pensar y cerrado a los
planes de Dios.
Según los judíos, el mundo se dividía en dos grupos:
los hijos de "Abraham"y los "paganos". Ellos pertenecían al
primer grupo y por lo tanto eran los"privilegiados", seguros
de su salvación, mientras los demás no valían nada y estaban
todos destinados a condenarse.
Llega Jesús y pide un reajuste general de las propias
convicciones. Pues bien, losjudíos, en lugar de abrirse frente
a la luz, se cierran en sí mismos y buscan la forma de
apagar la luz. Así se vuelven en hijos del diablo, mentiroso
y asesino desde el principio.
Actualmente hay muchos grupos de hermanos
separados que se consideran como los únicos discípulos de
Cristo, "ya salvos", mientras todos los demás son unos
"demonios'~ Cuán distinta sería la situación, si todos nos
pusiéramos en actitud de sinceridad frente a Cristo,
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1
44. profundizando su voluntad acerca de la Iglesia, que Él fundó,
estudiando las causas de la división y examinando el
fundamento de cada grupo. Si hiciéramos esto, estoy
convencido de que pronto el grande sueño de Jesús podría
volverse realidad:
Que todos sean uno como tú, Padre, estás en mí, y
yo en ti. Sean también uno en nosotros: así el mundo
creerá que tú me has enviado (Jn 17, 21).
Ciegos
Dijo Jesús:
Mientras yo esté en el mundo, Yo soy la luz del mundo
(Jn 9, 5).
Y para dar una señal de su poder, dio la vista al ciego.
Con esto Jesús quería invitara los fariseos a
reflexionar... Pero no. Su posición está bien definida:
Nosotros sabemos que ese hombre que te sanó es
un pecador (Jn 9, 24).
Nosotros somos discípulos de Moisés. Sabemos que
Dios habló a Moisés. Pero de éste no sabemos ni
siquiera de dónde viene (Jn 9, 28-29).
Es la palabra de los "sabios'~ los maestros. ¿Y qué
pasa? Que el ciego de nacimiento, ya sanado, les da una
lección de teología:
El hombre contestó: "Esto es lo maravilloso, que
ustedes no entiendan de dónde viene un hombre que
me abrió los ojos.
Todo mundo sabe que Dios no escucha a los
pecadores, sino a los hombres buenos, que hacen
lo que Dios quiere. Nunca se ha oído decir que un
hombre haya abierto los ojos a un ciego de
nacimiento. Si este no viniera de parte de Dios, no
podría hacer nada de eso" (Jn 9, 30-33).
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45. Perfecto. Por otro lado no se necesita mucha
preparación para llegar a esta conclusión. Sin embargo, no
se hace esperar la reacción de los "sabios" enfurecidos.
Le contestaron ellos: "Desde tu nacimiento estás en
pecado ¿y vienes a darnos lecciones a nosotros?" Y
lo expulsaron (Jn 9, 34).
Es el estilo de los fariseos. En lugar de reflexionar
frente a los hechos, se ponen furiosos. Me parece ver a
ciertos Testigos de Jehová, lívidos de furor frente a una
muchacha que tranquilamente, con la Biblia en la mano,
refuta las acusaciones en contra de la Iglesia católica. Es
que no buscan la verdad. Por eso, cuando alguien se les
presenta con toda sencillez, se ponen histéricos.
Jesús dijo: "He venido a este mundo para iniciar una
crisis: los que no ven, verán, y los que ven, van a
quedar ciegos" (Jn 9, 39).
Es algo triste pero real. Muchos de los que piensan
ver, se van a quedar ciegos con su Biblia, su revista y su
grupo. Antes tenían algún motivo para sentirse orgullosos,
porque los católicos no nos enfrentamos aellos por cobardía,
flojera o caridad. Pero, ahora que ya empezamos adialogar
con ellos, se dan cuenta de su escasa preparación bíblica y
el casi completo desconocimiento del origen e historia de
su grupo y, en lugar de seguir buscando la verdad, se
encierran en sí mismos, diciendo: "Yo no sé; hablen con el
ministro, cuando llegue".
Jesús les contestó: "Si fueran ciegos, no tendrían
pecado. Pero ahora dicen que ven, con eso el pecado
está comprobado" (Jn 9, 41).
Lo que queremos hacer, es precisamente esto:
dialogar con los hermanos separados para que conozcan la
verdad y tomen una decisión. Si se encierran frente a los
hechos, entonces "el pecado está comprobado".
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46. No pertenecen al rebaño de Cristo
Jesús se paseaba en el Templo por el pórtico de
Salomón cuando los judíos lo rodearon y le dijeron:
"¿Hasta cuándo nos tendrás en suspenso? Si eres
el Cristo, dilo claramente".
Jesús les respondió: "Ya se los he dicho, pero
ustedes no quieren creer. Las obras que yo hago en
nombre de mi Padre declaran quien soy yo. Pero
ustedes no creen porque no son de mis ovejas.
Mis ovejas conocen mi voz y yo las conozco a ellas.
Ellas me siguen y yo les doy vida eterna: nunca
morirán. Nadie me las puede quitar, porque mi Padre
que me las ha dado es mayor que todos, y nadie se
las puede quitar a Él" (Jn 1O, 23-29).
No es difícil darse cuenta de la excelencia del
catolicismo: sus admirables santos, sus grandes luchas en
favor del hombre y la civilización, su doctrina tan noble y
coherente a través de los siglos, la total entrega de sus
misioneros hacia la causa de los más pobres y necesitados,
la profunda austeridad de los monjes... Son hechos
concretos que dejan asombrado a cualquier conocedor de
la historia y amante de la verdad. Y sin embargo, los
protestantes "no creen". Parece que tengan una verdadera
fobia hacia todo lo que es católico. Para ellos, todo lo que
es católico es malo. ¿por qué?
Ustedes no creen porque no son de mis ovejas (Jn
10, 26).
No pertenecer al rebaño de Cristo, es algo realmente
triste. Todo lo ven con lentes colorados ¿son católicos?
Pues bien, nos sienten ninguna atracción hacia la Iglesia;
no tienen tiempo para acercarse a su enseñanza. ¿se
vuelven protestantes? Ya empiezan con sus babosadas de
siempre: "Cuando yo era católico, no sabía nada porque en
la Iglesia católica no se enseña la Biblia'~ Me pregunto:
"¿Qué saben ellos si en la Iglesia Católica se enseña o no la
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1
47. Biblia, si nunca se acercaron a ella?" Ni modo. Nacieron
para ser enemigos de la Iglesia Católica y no hay razones
que valgan.
Hijitos míos, es la última hora, y se les dijo que tendría
que llegar el Anticristo; en realidad, ya han venido
varios anticristos, por donde comprobamos que ésta
es la última hora.
Ellos salieron de entre nosotros mismos, aunque
realmente no eran de los nuestros. Si hubieran sido
de los nuestros se habrían quedado con nosotros.
Al salir ellos vimos claramente que entre nosotros
no todos eran de los nuestros (1 Jn 2, 18-19).
Ojos cerrados y corazones endurecidos
Después de tantas señales milagrosas que Jesús
había hecho delante de ellos, los judíos no creyeron
en él. Tenía que cumplirse lo escrito por lsaías: Señor,
¿quién, ha dado crédito a nuestras palabras? ¿A
quién has revelado lo que harás para nuestra
salvación?
Así es que no se pudieron convencer; lsaías lo dice
en otro lugar:
"Se cegaron sus ojos y se endureció su corazón, para
no ver ni comprender; no quieren convertirse a mí,
ni que yo los sane"
Esto dijo lsaías porque vio la gloria de Dios y de El
habló (Jn 12, 37-41).
Es el misterio del pecado. Losjudíos afirmaban aceptar
a Dios pero no a Jesús, su enviado. Los protestantes dicen
aceptar aCristo pero no asu Iglesia, encargada de continuar
su obra en el mundo. Me pregunto: "¿Es posible esto? ¿Es
correcto?" No; en absoluto. El que acepta a Dios, tiene que
aceptar a su enviado; y el que acepta a Cristo, tiene que
aceptar a su Iglesia,
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1
48. Al que escucha mi palabra pero no la obedece, no
seré yo quien lo condene, porque yo no he venido a
condenar al mundo sino a salvarlo.
El que me desprecia y no hace caso de mi palabra,
tiene quien lo juzgue y condene: será mi propia
palabra; ella lo juzgará el último día (Jn 12, 47-48).
Hermano protestante, ¿cómo puedes decir que crees
en Cristo, si no le obedeces? Si él fundó la Iglesia, con el fin
de continuar su obra hasta el fin del mundo, tú estás
obligado a pertenecer a ella. Al separarte de ella, estás
desobedeciendo. Así que... ponte listo y no te dejes engañar
por razonamientos huecos. Tu posición se parece mucho a
la de los judíos, que decían creer en Dios y no creían en su
enviado, Jesús. ¿Acaso ya se cegaron tus ojos y se endureció
tu corazón?
Intenta enfrentarte al problema con extrema seriedad,
puesto que se trata de algo muy delicado, que se refiere a
la salvación o a la condenación eterna. Tal vez todavía estás
a tiempo.
Por lo tanto, deja tu fanatismo inútil y ponte a
reflexionar seriamente:
1. Cristo lfundó o no una sola Iglesia?
2. A esta Iglesia lle aseguró o no que duraría hasta el
fin del mundo?
3. Entre los grupos cristianos actuales ¿cuál es la
verdadera Iglesia que fundó Jesús?
Investiga, pregunta, lee algún libro de historia... Una
cosa te voy a decir con toda claridad: Tu Iglesia no tiene a
Cristo como fundador sino a otra persona. Y esto es algo
grave.
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1
49. Así que no te queda otra solución que "volver" a la
Iglesia católica que es la que fundó Jesús, y encontrarás la
paz que buscas.
Acuérdate: La expresión "cree en Cristo y te salvarás"
es un cuento de hadas, una trampa que te puede llevar a la
perdición. Para poderte salvar, necesitas"creer"y"obedecer"
a Cristo. Y un aspecto importante de la obediencia a Cristo
consiste en pertenecer a "su" Iglesia y no dejarte arrastrar
por cualquier viento de novedad.
Así que... ya sabes.
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1
50. CapítuloS
iAy de ustedes! J
Nunca Jesús habló con tanta dureza en contra de los
borrachos o adúlteros. ¿por qué? Por la sencilla razón que
generalmente los que se emborrachan o cometen adulterio,
con facilidad se dan cuenta de que se están portando mal y
por lo tanto tienen más posibilidad de arrepentirse.
Mientras los fariseos, por ser los defensores oficiales
de la fe, se sienten con derechos frente a Dios. Y por eso,
aunque cometan cualquier tipo de atropello en contra de
los más débiles, nunca piensan que se están portando mal
y necesitan arrepentirse. Por lo tanto su pecado se arraiga
más en la conciencia, hasta hacerse costumbre y ley.
Frente a esta situación tan difícil, Jesús siente la
necesidad de apretar duro, para ver si acaso abren los ojos
y cambian de actitud. Es una prueba más de su amor hacia
el pecador obstinado.
Además Jesús, al señalar los defectos de los fariseos
y maestros de la Ley, quiere poner en guardia a todos los
futuros responsables de su Iglesia, para que no caigan en
ellos. Es un examen de conciencia para las autoridades
religiosas de todos los tiempos y de todos los credos, para
que no se aprovechen del cargo para fines egoístas. Así
que, "al que le venga el saco, que se lo ponga".
Cumplan, pero no imiten
Los maestros de la Ley y los fariseos ocupan el
puesto de Moisés. Hagan y cumplan todo lo que
dicen, pero no los imiten, ya que ellos enseñan y no
cumplen. Preparan pesadas cargas, muy difíciles de
llevar, y las echan sobre las espaldas de la gente,
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51. pero ellos ni siquiera levantan un dedo para moverlas
(Mt 23, 2-4).
Es el pecado en el que han caído muchos guías
religiosos muy estrictos en señalar las obligaciones a los
demás, pero al mismo tiempo muy descuidados en su
esfuerzo personal por cumplirlas. Predican el amor y sienten
envidia los unos para con los otros; hablan de la gloria de
Dios y buscan sus intereses personales; exigen cooperación
económica para las obras de la Iglesia, mientras ellos mismos
no aportan ni un centavo para realizarlas. Dice Jesús:
"Cumplan todo lo que dicen, pero no los imiten'~
Orgullosos
y amantes del dinero
No imiten a los maestros de la Ley, que gustan de
pasearse con largas vestiduras y ser saludados en
las plazas, ocupar los primeros puestos en las
sinagogas y los primeros lugares en los banquetes.
Son gente que devoran los bienes de las viudas,
mientras se amparan tras largas oraciones. Habrá
para ellos un juicio sin compasión (Le 20, 46-47).
Parece una fotografía de la realidad en que viven
tantos ministros del culto: honores, primeros lugares...
dinero. iCuánta diferencia hay entre su vida y la de Cristo,
pobre, humilde y sufriente (Is 53)!
Reflexionemos un poco: ¿por qué entre los
protestantes se insiste tanto en el diezmo, la primicia, la
limosna y la ofrenda? ¿Acaso no se dan cuenta de que esto
no responde a la enseñanza que Jesús dejó a los apóstoles?
(Mt 10, 9-10; Le 10, 7).
Yen campo católico, ¿por qué muchos curas, mientras
no tienen tiempo para la evangelización, sí lo tienen para
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1
52. las misas de difuntos, los responsos y los bautismos?
Evidentemente lo que más se busca no es la fidelidad a
Cristo, sino el propio interés personal.
¿por qué algunos, de un momento a otro, pasan de
borrachos empedernidos a protestantes tercos y fanáticos,
visitando las familias de casa en casa, escupiendo un montón
de citas bíblicas e invitando a cambiar de religión? ¿será
por una verdadera entrega hacia Cristo o más bien por el
deseo de formar su propio grupo, para después trasquilarlo
debidamente?
Es un hecho que para un pobre campesino o
desempleado, el cargo de pastor puede representar un
fuerte aliciente. A un fulano se le presenta un "ministro"
que viene desde lejos, y le hace la siguiente proposición:
"Si cambias de religión y pasas con nosotros, te vamos a
dar una ayudadita. cada mes te mandaremos un chequecito
de tanto. Tú, dedícate avisitar las familias del barrio. Cuando
hayas formado tu grupo, podrás vivir cómodamente con el
diezmo, las primicias, la limosna y la ofrenda'~
Si este humilde campesino o desempleado no tiene
una fe a prueba de bomba, claro que sucumbe frente a la
tentación tan grande. En el fondo, al cambiar de religión, lo
que busca no es la verdad, sino una oportunidad para ser
alguien, subir un poco en el escalafón social, tener algún
primer lugar. Puesto que no pudo lograr esto en el comercio,
el campo o la política, por falta de capacidad u
oportunidades, se avienta al campo religioso. Y como en
cualquier actividad lucrativa, lo que busca es el éxito,
dejando a un lado los principios morales del respeto que se
debe a la verdad y a la dignidad de la persona humana.
Para ellos la religión es puro negocio (1Tim 6, 5).
Y siguen las divisiones, los odios y las calumnias.
En cambio, los que quieren ser ricos caen en
tentaciones y trampas; una multitud de ambiciones
51
1
53. locas y dañinas los hunden en la ruina hasta
perderlos. En realidad, la raíz de todos los males es
el amor al dinero. Por entregarse a él, algunos se
han extraviado lejos de la fe y se han torturado a sí
mismos con un sinnúmero de tormentos (1Tim 6, 9-
10).
Frente a esta situación, alguien puede preguntarse:
"¿Es posible que suceda esto con gente que anda siempre
con la Biblia en la mano y el nombre de Cristo en los labios?"
Claro que sí. Jesús nos pone en guardia al condenar la
mala actuación de los fariseos, orgullosos conocedores de
la ley de Dios y crueles explotadores de los pobres,
Los de arriba y los de abajo
No se deben llamar Maestro, porque un solo Maestro
tienen ustedes, y todos ustedes son hermanos.
Tampoco deben decirle Padre a nadie en la tierra,
porque un solo Padre tienen: el que está en el cielo.
Ni deben hacerse llamar jefe, porque para ustedes
Cristo es el jefe único. Que el más grande de ustedes
se haga servidor de los demás. Porque el que se hace
grande será rebajado, y el que se humilla será
engrandecido (Mt 23, 8-12).
Aquí la enseñanza no es que no se puedan usar las
palabras maestro, padre y jefe o que está prohibido ejercer
las funciones correspondientes. En efecto, la misma Biblia
usa esas palabras y reconoce sus funciones (Maestro: Mt
23, 34; 1Cor 12, 28. Padre. Lc16, 24; Lc18, 20; 2Re 2, 12;
2Re S, 13; Hech 7, 2. Je'e. 1Sam 8, 20; Jn 21-17; Hech
20, 28).
Aquí no es cuestión de palabra o de función, sino de
actitud. ¿De qué sirve que uno se llame hermano, si exige
la obediencia total que se debe solamente a Dios? En
realidad, esta es la actitud de muchos protestantes. Afirman
52
1
54. con los labios que todos son iguales y que no existe ninguna
jerarquía pero de hecho los "hermanos de arriba" humillan,
pisotean y explotan a los "hermanos de abajo", como si
fueran burros para la carga. Les prohíben saludar a los que
no pertenecen a su grupo, les ordenan apartarse de sus
mismos familiares si estos no deciden cambiar de religión,
les evitan cualquier programa de radio o literatura que no
sea de la propia organización y los expulsan si no entregan
puntualmente el diezmo o se atreven a expresar opiniones
personales diferentes de la enseñanza oficial.
A este respecto, existe una situación muy extraña:
en lugar de haber más exigencias en la Iglesia Católica, por
ser jerárquica, y libertad en los grupos protestantes, pasa
todo lo contrario. De hecho en la Iglesia Católica hay más
libertad y respeto por la dignidad de la persona humana,
que entre los protestantes. En la Iglesia católica, aparte de
exigir la aceptación de ciertas verdades reveladas, se deja
a cada uno en plena libertad en todo lo demás. Mientras en
los grupos protestantes se exige una obediencia estricta en
todo lo que se refiere a interpretación bíblica, cooperación
económica, manera de vestir, amistades, etc. Es que el
espíritu farisaico se apoderó de la mente de sus guías, que
tienen oprimida a su gente con amenazas de tremendos
castigos en caso de desobediencia, precisamente al estilo
de los antiguos líderes espirituales del pueblo judío, tan
reprendidos por Jesús.
Es evidente que también en el clero católico todavía
queda mucho por corregir en cuanto a pompa exterior en
el culto y actitud de superioridad frente a los feligreses. No
por nada Jesús insiste tanto en la necesidad de tener un
espíritu de servicio y humildad para ser sus discípulos.
Cierran la puerta del Reino de los Cielos
Por eso, ¡ay de ustedes, maestros de la Ley y fariseos
hipócritas! Ustedes cierran a los hombres el Reino
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55. de los Cielos. No entran ustedes ni dejan entrar a los
que quieren entrar (Mt 23, 13).
Si ustedes proclaman tanto el principio de la libre
interpretación de la Biblia, ¿por qué quieren obligar a su
gente a rechazar la comunión, la confesión, el papel de la
Virgen María como intercesora, la jerarquía, y tantas otras
cosas?
No entran ustedes ni dejan entrar a los que quieren
(Mt 23, 13).
Hacen hijos del demonio
¡Ay de ustedes maestros de la Ley y fariseos
hipócritas! ustedes recorren mar y tierra para lograr
la conversión de un pagano, y cuando se ha
convertido lo hacen hijo del demonio, mucho peor
que ustedes (Mt 23, 14-15).
¿oe qué sirve hacer tanto esfuerzo por conquistar
nuevos adeptos, si a la mera hora llenan sus corazones de
odios y calumnias contra la Iglesia católica y cualquier otro
grupo distinto al suyo? ¿Acaso no saben que odiar representa
siempre un pecado? ¿No saben que la mentira viene del
demonio, "padre de la mentira'? (Jn 8, 44).
Tergiversan la Palabra de Dios
¡Ay de ustedes, guías ciegos! Ustedes dicen: Jurar
por el Templo no obliga, pero jurar por el tesoro del
Templo, sí. ¡Torpes y ciegos! ¿Qué vale más? ¿El oro
que está en el Templo o el Templo que hace santo al
oro que fue dedicado? Ustedes dicen que si alguno
jura por el altar no queda obligado, pero que el que
jura por las ofrendas puestas sobre el altar queda
obligado. ¡Ciegos! ¿Qué vale más? ¿Lo que se ofrece,
o el altar que hace santa la ofrenda? Yel que jura por
54
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56. el altar, jura por el altar y por lo que se pone sobre él.
Y el que jura por el Templo, jura por él y por Dios que
habita en el Templo. Y el que jura por el cielo, jura
por el trono de Dios y por el que está sentado en él
(Mt 23, 16-22).
Y Jesús hizo este comentario: "Ustedes dejan
tranquilamente a un lado el mandato de Dios para
imponer su propia tradición. Así, por ejemplo, Moisés
dijo: Atiende a tu padre y a tu madre, y también: El
que maldiga a su padre o a su madre, morirá. Ustedes,
al contrario, afirman que un hombre puede decirle a
su padre o a su madre: "No puedo ayudarte porque
todo lo que tengo lo consagré a Dios". En este caso
ustedes dicen que ya no tienen que ayudarlos. Así,
pues, ustedes anulan la Palabra de Dios en beneficio
de la tradición que se ha ido transmitiendo; y hacen
muchas otras cosas parecidas a éstas" (Me 7, 9-13).
Cualquiera entiende que el templo vale más que el
oro del templo y que la obligación de atender a los papás
viene de Dios y por lo tanto no puede ser suprimida por la
autoridad humana. Ysin embargo, los líderes protestantes,
a imitación de los antiguos fariseos, ordenan a su gente a
separarse de sus mismos hermanos y acorrer a los mismos
papás, ya ancianos y enfermos, si no aceptan cambiar de
religión. ¿por qué? Por el amor al dinero. Para ellos, más
gente en el culto quiere decir más dinero que entra por
concepto de diezmo, primicia, limosna y ofrenda. Así que
para sacar más dinero, tergiversan la Biblia y dejan a un
lado los mandatos de Dios.
Olvidan lo más importante
¡Ay de ustedes, maestros de la Ley y fariseos
hipócritas! Ustedes pagan el diezmo de todo, sin
olvidar la menta, el anís, y el comino, y, en cambio,
no cumplen lo más importante de la Ley: la justicia,
55
1
57. la misericordia y la fe. Estas son las cosas que
deberían observar, sin descuidar las otras. ¡Guías
ciegos! Cuelan un mosquito, pero se tragan un
camello (Mt 23, 23-24).
¿Qué vale más la atalaya, el diezmo y el ayuno o el
celibato (Mt 19, 12; 1Cor 7, 32-33), las bienaventuranzas
(Mt S, 3-12) y el mandamiento del amor hacia todos? (Mt
S, 38-48).
Entonces, ¿por qué en sus cultos no hablan de esto?
iGuías ciegos! Se fijan más en los detalles que en el meollo
del mensaje cristiano. Cumplen con el ayuno, guardan los
días festivos escrupulosamente y nunca faltan al culto; pero
dejan a un lado la celebración de la Cena del Señor, la
obediencia a los sucesores de los apóstoles y la obligación
de pertenecer a la única Iglesia de Cristo. "Cuelan un
mosquito, pero se tragan un camello".
Notamos que cuando Jesús afirma: "Estas cosas
deberán observar'~ está hablando a los fariseos que estaban
obligados a la Ley del Antiguo Testamento. No está
presentando "su" Ley.
Pura exterioridad
¡Ay de ustedes maestros de la Ley y fariseos
hipócritas! Ustedes limpian por fuera copas y platos,
y por dentro están llenos de envidia y avaricia.
Fariseo ciego, limpia primero el interior del vaso y
después se limpiará también el exterior.
¡Ay de ustedes, maestros de la Ley y fariseos
hipócritas! Pues ustedes son semejantes a sepulcros
bien pintados que tienen buena apariencia, pero por
dentro están llenos de huesos y de toda clase de
podredumbre. Ustedes también aparecen
exteriormente como hombres religiosos, pero en su
interior están llenos de hipocresía y de maldad (Mt
23, 25-28).
56
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58. Ayunos, oraciones con aparatos de sonido, gritos,
campañas con conjunto, abstinencia de ciertos alimentos...
Aparentan grande religiosidad. Pero, en el fondo, ¿hay
verdadero deseo de seguir a Cristo? ¿por qué, entonces,
hay tantas divisiones? Es evidente que, si entre los
protestantes hubiera sinceridad, habría paz, comprensión,
amor y unión entre todos. Al haber tantas divisiones en las
organizaciones y diferencias en las enseñanzas, se ve
claramente que en sus corazones se anidan muchos
intereses que son contrarios a los ideales cristianos.
En efecto, si estuvieran llenos del Espíritu Santo se
amarían entre todos y estarían unidos.
Matan a los enviados de Dios
¡Ay de ustedes, maestros de la Ley y fariseos
hipócritas! Ustedes construyen sepulcros para los
profetas y adornan los monumentos de los hombres
santos. Ustedes dicen: si nosotros hubiéramos
vivido en tiempos de nuestros antepasados no
habríamos consentido que mataran a los profetas.
Fíjense en esas mismas palabras: ustedes son hijos
de los que mataron a los profetas. ¡Terminen, pues,
de hacer lo que sus padres comenzaron!
¡Serpientes, raza de víboras! ¿Cómo lograrán escapar
de la condenación del infierno? Desde ahora les voy
a enviar profetas, sabios y maestros, pero ustedes
los degollarán y crucificarán, y a otros los azotarán
en las sinagogas o los perseguirán de una ciudad a
otra.
Pues tiene que recaer sobre ustedes toda la sangre
inocente que ha sido derramada en la tierra, desde
la sangre del santo Abel hasta la sangre de Zacarías,
hijo de Barequías, al que mataron en el altar dentro
del Templo. En verdad les digo que todo esto recaerá
sobre la actual generación (Mt 23, 29-36).
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59. El Papa, los obispos y los sacerdotes son aquellos
profetas, sabios y maestros que Jesús prometió enviar a su
pueblo para guiarlo oficialmente. Y sin embargo, ustedes
los rechazan, los odian y los calumnian. ¿No se están
portando como los antiguos judíos que mataron a los
profetas, enviados por Dios? Acuérdense de lo que dice
San Juan: "El que odia a su hermano, es un asesino" (1Jn
3, 15).
¿Qué piensan ustedes: mediante su actitud están
favoreciendo o perjudicando la causa del Reino de Dios?
Mediante sus revistas, sus libros y folletos, tan llenos de
ataques y mentiras, ¿están sembrando el amor o el odio?
Fíjense bien: no basta conocer de memoria muchas
citas bíblicas y repetirlas a cada rato, para ser verdaderos
discípulos de Cristo. Hay que vivir su mensaje. Y ustedes,
en muchas cosas, dan la impresión de preferir las apariencias
a la realidad, precisamente como hacían los antiguos
fariseos, acusados de ser hipócritas.
Se dan el paquete de conocedores y cumplidores de
la palabra de Dios, mientras buscan honores, prestigio y
comodidades. Olvidan la Ley de Dios, por la tradición de
sus mayores, que les enseñaron a luchar contra la Iglesia
Católica.
Tengan mucho cuidado, hermanos protestantes. Las
maldiciones que Jesús lanzó contra los fariseos, los pueden
alcanzar también a ustedes, si no dejan esa actitud hipócrita
de sentirse santos y despreciar a los demás (Le 18, 9).
Es evidente que en la Iglesia Católica hay muchos
que no cumplen y se portan mal. Sin embargo, ¿por qué le
echan la culpa de todo esto al Papa, a los obispos y a los
sacerdotes? ¿No se dan cuenta de la lucha que están
haciendo para ayudar al pueblo a salir de esta situación?
Además, ¿por qué le echan a la Iglesia católica actual la
culpa de todos los pecados que cometieron los eclesiásticos
hace tres, cuatro, cinco... diez siglos? Y con relación al
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60. pasado, ¿había solamente defectos en la Iglesia Católica?
¿Es posible que en ella no encontraran nada bueno?
Hermanos en Cristo, sean más honestos y sinceros.
En lugar de estar siempre criticando a los católicos,
reconozcan que también entre ustedes hay muchos defectos
y pecados, que necesitan del perdón de Dios. Solamente
haciendo esto, estarán apresurando la llegada del Reino de
Dios a este mundo y dando su aporte positivo a la causa de
la unidad entre todos los discípulos de Cristo.
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61. Capítulo 6
La libertad cristiana
(Carta a los Gálatas)
La libertad representa un gran ideal para todos. Pero,
¿en qué consiste ser libre? Para un cristiano, ser libre
consiste en dejarse guiar por el Espíritu Santo, que lo
transforma interiormente y lo invita continuamente a seguir
a Cristo, el único Señor, cumpliendo su voluntad.
Los gálatas no habían entendido esto. Así qué, al
momento de la prueba, se dejaron engañar con facilidad.
Ellos eran paganos convertidos a Cristo por Pablo. A un
cierto momento, se le acercaron algunos judíos convertidos
y le dijeron: "Para salvarse, no basta seguir a Cristo; se
necesita conocer y cumplir con la Ley de Moisés'~ Ycayeron
en la trampa.
Lo mismo pasa ahora. Hay católicos de buena
voluntad, pero con poca preparación. Se les acercan los
protestantes y les dicen: "Hermanos, para salvarse, no basta
seguir la Ley de Cristo, es necesario seguir también la Ley
de Moisés. Hay que cumplir con el Antiguo y el Nuevo
Testamento. Por lo tanto, hay que respetar el sábado; no
hay que comer carne de cochino ni de armadillo; no pueden
hacer transfusión de sangre, etc.-. Y muchos caen.
No hay otro evangelio
Me extraña que tan pronto hayan abandonado a Dios,
que según la gracia de Cristo los llamó, para seguir
otro Evangelio. No es que haya otro, sino que ciertas
personas han sembrado la confusión entre ustedes
y quieren cambiar radicalmente el Evangelio de
Cristo.
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62. Pero, aunque viniéramos nosotros o viniera del cielo
algún ángel para anunciarles el Evangelio de otra
manera que lo hemos anunciado, ¡sea maldito! Ya se
lo dijimos antes pero ahora lo repito: si alguien viene
con un evangelio que no es lo que ustedes han redo,
¡sea maldito! Comprueben ahora si es que trato de
conciliarme con los hombres o si más bien obedezco
a Dios. ¿Creen que busco agradar a los hombres? Si
todavía buscara yo agradar a los hombres, ya no sería
siervo de Cristo (Gál 1, 6-1 O).
Si desde un principio los discípulos de Cristo respetaron
siempre el domingo, ¿cómo algunos protestantes se salen
ahora con el cuento de que hay que respetar el sábado? Si
nunca entre los discípulos de Cristo hubo la prohibición de
comer ciertos alimentos, ¿por qué ahora quieren prohibir
comer carne de cochino, comer sangre ytantas otras cosas?
De plano, están cambiando el Evangelio.
Hay más aún. Estos perturbadores andan diciendo
que no sirve repetir la Cena del Señor para alimentarse con
su Cuerpo y su Sangre, sabiendo claramente que se trata
de una orden de Jesús (Jn 6, 54; Le 22, 19-20; 1Cor 11,
23-29). Fomentan la división en sectas, cuando sabemos
claramente que Cristo quiso que "su" Iglesia estuviera
siempre unida (Jn 17, 21), hasta el fin del mundo (Mt 28,
20).
¿Qué paso, entonces? Es que estos hermanos andan
mal, como aquellos judíos que querían "cambiar el
Evangelio". No hay que hacerles caso y si alguien ya se
dejó extraviar como los gálatas, que regrese a la fe
verdadera predicada por la Iglesia católica, la única fundada
por Cristo y que por lo tanto goza de toda la garantía divina.
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63. Prohibiciones inútiles
Lo que hacen los protestantes es inflarse de orgullo,
aparentando una profunda religiosidad. En fin de cuentas
no se trata nada más que de "mandatos y enseñanzas de
horribles".
Por eso, que nadie los venga a criticar por lo que
comen y beben, o por no respetar fiestas, lunas
nuevas o el día sábado. Todas esas cosas no eran
sino sombras de lo que había de venir, pero la
realidad es la persona de Cristo. No dejen que se lo
quiten aquellos que proponen una religión muy
temerosa y que sirven a los ángeles. En realidad no
hacen caso sino de sus propias visiones y se inflan
de orgullo con sus propios pensamientos, en vez de
mantenerse en contacto estrecho con la cabeza,
Cristo. Él proporciona al cuerpo entero alimento y
unidad por un conjunto de nervios y ligamentos,
haciéndolo crecer conforme al plan de Dios.
Si realmente ustedes han muerto con Cristo,
liberándose de los elementos del mundo, ¿por qué
ahora se dejan adoctrinar como si todavía fueran del
mundo? "No tomes esto, no gustes esto, no toques
aquello". Esos no son más que mandatos y
enseñanzas de hombres referentes a cosas que se
usan, se desgastan y desaparecen. Estas doctrinas
parecen profundas por su religiosidad y humildad, y
porque se trata duramente el cuerpo; pero no hacen
más que favorecer al orgullo propio (Col 2, 16-23).
Esta actitud fue propia de los fariseos y les impidió
reconocer y aceptar a Jesús. El orgullo nunca fue buen
consejero.
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64. Doctrina revelada
Lo que enseña la Iglesia Católica como doctrina, es
lo mismo que enseñaron Jesús y los apóstoles. Por lo tanto,
no se trata de una doctrina humana.
Pero, sepan, hermanos, que el Evangelio que les
prediqué no es doctrina de hombres, y tampoco lo
recibí o lo aprendí de un hombre, sino por una
revelación de Cristo Jesús (Gál 1, 11 -12).
Claro que es necesario distinguir entre esta "doctrina
revelada", que forma la base de la enseñanza de la Iglesia
católica, y lo que se llama "piedad popular", que es un
conjunto de creencias, actitudes y expresiones religiosas
propias del pueblo sencillo, con grandes deficiencias y mucha
urgencia de purificación.
Garantía:
Pedro y los dirigentes
¿cuál garantía tenemos de que no estamos
equivocados? La misma que tenía San Pablo, es decir el
contacto con las personas a las cuales Cristo confió el
cuidado de su Iglesia.
Después, pasados tres años, subí a Jerusalén para
entrevistarme con Pedro, y con él permanecí quince
días (Gál 1, 18).
Yo fui, siguiendo una revelación, para exponerles el
Evangelio que anuncio a los paganos; también lo
conversé con los dirigentes en una reunión privada
no sea que trabajara o hubiera trabajado inútilmente
(Gál2, 2).
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65. Ahora el sucesor de San Pedro es el Papa, Obispo de
Roma, y los sucesores de los "dirigentes" de aquel tiempo
son los obispos, en comunión y bajo la autoridad del Papa.
Los protestantes, una vez separados de la Iglesia
Católica, quedaron automáticamente desconectados de los
apóstoles. ¿Qué garantía les queda, entonces, para decir
que andan bien? ¿Acaso la Biblia? Pero, cada uno la
interpreta a su modo, en forma muy distinta y a veces
contradictoria. ¿Los sueños de los fundadores de las distintas
sectas? Cristo nunca estableció los sueños como medio para
garantizar la autenticidad de una doctrina.
Los que se encuentran separados de los guías que
Cristo estableció para "su" Iglesia, corren el riesgo de
trabajar inútilmente.
Libres de la Ley de Moisés
Pero no impusieron la circuncisión, ni siquiera aTito,
que es griego, y que estaba conmigo. Yesto, a pesar
de los falsos hermanos intrusos, que se habían
introducido para espiarnos y ver cómo vivimos la
libertad que Cristo nos ha dado. Ellos querían
someternos a la esclavitud de, la Ley, pero nos
negamos a ceder, aunque fuera por un momento,
porque, de otra manera, ustedes habrían perdido la
verdad del Evangelio (Gál 2, 3-5).
La circuncisión era el rito, mediante el cual uno entraba
aformar parte del Antiguo Pueblo de Dios y se comprometía
a cumplir la Ley de Moisés. Corresponde a lo que es el
bautismo para el Nuevo Pueblo de Dios.
Según San Pablo, aceptar la circuncisión significa
renunciar a la libertad que nos trajo Cristo y volver a la
esclavitud de la antigua Ley (Hech 15, 10; Gál S, 1-4).
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66. Por eso la Iglesia Católica, desde un principio, ha
rechazado siempre la Ley de Moisés como obligatoria para
nosotros. Si somos cristianos, estamos obligados solamente
a la Ley de Cristo y nada más. Para nosotros, el Antiguo
Testamento ya murió (Ef 2, 15; Rom 7, 4; Heb 10, 9), con
todas sus normas.
¿y las conclusiones del Concilio de Jerusalén (Hech
15, 28-29)? Eran solamente una disposición disciplinaria
para los cristianos de Antioquía, Siria y Cilicia, donde había
surgido el peligro de la división entre los bautizados de
origen judío y los bautizados de origen pagano. Por lo que
se refería a las demás comunidades, lo que importaba era
creer que la gracia del Señor Jesús es la que salva" (Hech
15, 11) y no la Ley de Moisés.
Así que... de una vez olvídense del sábado, los
animales impuros, el diezmo ytodo lo que significa el Antiguo
Testamento.
Conflicto con Pedro
La libertad de la Ley de Moisés es algo serio. No se
puede al mismo tiempo confiar en Cristo y confiar en las
obras de la Ley. No se puede tener un pie en dos estribos.
Hay que escoger.
Tratándose de algo serio, no hay quejugar. No importa
lo que diga la gente. Hay que saber tomar una decisión.
Máxime si se trata de una persona como Pedro, que ejerce
un grande influjo sobre toda la comunidad cristiana, siendo
el jefe visible de la Iglesia. Por eso Pablo se le enfrenta con
toda energía. ¿cuál era el problema?
Teniendo en cuenta la Ley de Moisés, los judíos no
comían con los no-judíos paganos, porque esto hubiera
representado para ellos una "impureza", es decir una
mancha. Pues bien, cuando un pagano se convertía al
cristianismo, ¿cómo habría que portarse con él?
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