Procedimientos para la planificación en los Centros Educativos tipo V ( multi...
Ciclo cocacola
1. Introducción: Creada en 1885, fue comercializada como remedio que ayudaba a calmar el
dolor de cabeza y disimulaba las náuseas, tuvo poca acogida y reclamo en sus orígenes, es
decir, la demanda no deseaba tener el producto. Sin embargo, en 1886, al ser distribuida por
todo Estados Unidos y el resto del mundo, llegó a todo tipo de consumidores y clientes con
una visión innovadora, posicionándose en el mercado en un lugar destacado hasta hoy en día.
Esto se consiguió lograr, entre otras estrategias, por la introducción del modelo AIDA
(atención, interés, deseo y acción) aplicado en la sociedad para hacer así que el consumidor o
cliente conociera mejor el producto, suscitara mayor interés y se comprara al poco de saber de
su existencia.
Además, se llevó a cabo una estrategia de penetración masiva que permitiera el consumo total
y absoluto, elevándolo a una situación pionera y de liderazgo que lo convertía en líder
indiscutible del mercado actual.
Crecimiento: En esta etapa, el producto empieza
a ser conocido y las ventas suben. A finales del
siglo XIX, empieza para el refresco de cola, una
brillante e innovadora carrera comercial por todos
los estados unidos. Setenta y cinco años más tarde
conseguía lo que solo los buenos productos
americanos consiguen extenderse por el resto del
mundo y a países tan diferentes de los
occidentales: Camboia, Turquía, Paraguay, y países
orientales como China o Japón.
2. Madurez: Es en la que las ventas comienzan a estabilizarse. A partir de los ochenta se podría
decir que la Coca-Cola estaba extendida y obteniendo beneficios ya en todo el mundo. En la
actualidad sigue estando en esta etapa.
Declinación: En esta compañía, no se podría hablar de esta etapa, al contrario, en países
como Corea donde los refrescos carbonatados no se venden, Coca-cola embotella y
comercializa agua consiguiendo resultados. Ni siquiera grandes crisis sanitarias como la
ocurrida en Bélgica recientemente consiguen menguar la fama de la empresa.