2. Llamada hernia discal es una enfermedad en la que parte del disco
intervertebral (núcleo pulposo) se desplaza hacia la raíz
nerviosa, la presiona y produce lesiones neurológicas derivadas
de esta lesión. Pueden ser contenidas (solo deformación, también
llamada protrusión discal) o con rotura.
Las hernias corresponden a la mayor incapacidad en personas
menores de 45 años. Alrededor del 1% de la población posee
discapacidad crónica por este motivo. Son frecuentes en personas
con enfermedades genéticas que afectan al tejido conectivo como
el Síndrome de Ehlers-Danlos y el Síndrome de Hiperlaxitud
articular.
La hernia provoca dolor en la zona lumbar. Duele por inflamación
el periostio de las vértebras, las articulaciones, la duramadre, el
anillo fibroso, el ligamento vertebral longitudinal posterior y los
músculos lumbares de la columna. Una hernia discal puede
producir una serie de manifestaciones clínicas, entre las más
frecuentes están el lumbago y la ciática.
3.
4. consiste en la deformación del anillo fibroso por el
impacto del núcleo pulposo contra este; se produce
hacia la parte más debilitada del anillo
fibroso, generalmente en dirección posterior o
posterolateral.
5.
6. es la ruptura del núcleo pulposo a través del anillo
fibroso, pero sin atravesar el ligamento
longitudinal anterior o posterior.
7.
8. el núcleo pulposo atraviesa el anillo fibroso y el
ligamento longitudinal, generalmente el posterior.
9.
10. es la ruptura del segmento extruido,
ocasionalmente con desplazamiento del fragmento
libre al canal espinal. Para que se produzca una
hernia del tejido nuclear debe existir una brecha en
las fibras colágenas del anillo fibroso, bien parcial
(protrusión) o total (prolapso). Estas brechas
suelen asociarse con lesiones compresivas o por
torsión producidas con la aplicación repentina de
una fuerza.
11.
12. Lumbalgia: La lumbalgia es el
mayor motivo de consulta. La
lumbalgia se produce cuando se
distienden los músculos
lumbares produciendo un dolor
que impide el libre movimiento
de esa zona de la cintura. Las
causas de la lumbalgia son
múltiples. Puede deberse a
malas posturas, factores
relacionados con la actividad
física del individuo o factores
psicológicos. Lumbalgia que se
acompaña de dolor, sensación
de hormigueo o dificultad para
el movimiento de la pierna del
mismo lado. Se debe a la
compresión (pinzamiento) del
nervio ciático o a una hernia de
disco.
Ciática : Se manifiesta de
manera unilateral. Afecta al
nervio lumbar (L5) o ciático (S1).
La ciática produce dolor y
debilidad sólo en el nervio
afectado, provocando parestesia
local. Si está afectado S1 se ven
comprometidos los músculos
sóleo, gastrocnemios y glúteo
mayor. Si está afectado L5 se
ven comprometidos los
músculos extensor propio del
dedo mayor, peroneo y glúteo
medio. Estos músculos son
indispensables para poder
caminar, afectando la
extremidad inferior
13. La hernia discal aparece sintomáticamente después de hacer o
someterse a movimientos o gestos bruscos, hacer fuerzas
excesivas sin tener en cuenta la posición correcta al agacharse o
ponerse en pie y la aparición del dolor en general es inmediata a
estos excesos. Las hernias discales más frecuentes son las
lumbares (aparece entre los discos lumbares -denominados L-),
así como también las cervicales (aparecidas entre los discos de la
cervical -denominados C-). También es frecuente la aparición de
hernia discal entre la quinta vértebra lumbar y la primera
vértebra sacra (denominadas L5-S1), causante de una molestia
persistente acompañada de trastornos sensitivos tales como
hormigueo o pérdida de la sensibilidad e irritabilidad motora,
así como disminución del reflejo predominantemente Aquiliano
del lado afectado. Estas dolencias aparecen de forma inmediata,
tal y como se explicó anteriormente, pero su tratamiento es
prolongado y el alivio del paciente es muy lento, debido a la
compresión de los nervios interdiscales.
14. Existe un tratamiento ambulatorio ortopédico por medio de
tracción. Consiste en traccionar la zona lumbar por medio de un
equipo o correa portátil que al utilizarlo por 3 meses
consecutivos, hace que las vértebras puedan separarse lo
suficiente para no ejercer presión sobre los discos. De esta
manera los discos pueden repararse de manera natural por
medio de la irrigación sanguínea y las vértebras no vuelven a
ejercer presión debido a que se han adaptado al nuevo
espaciado. Actualmente no existe tratamiento efectivo a largo
plazo a excepción de la cirugía. En algunos casos, hay que
recurrir a la cirugía, extraer el disco dañado (disquectomía) y
soldar las vértebras para que no se muevan. Aunque la
fisioterapia puede ayudar bastante a mejorar los síntomas y
dolores derivados de la ciática, así como una serie de ejercicios
específicamente recomendados, realizados con disciplina y
continuidad
15.
16. Objetivo : Corregir las anomalías estructurales
de la columna vertebral.
La corrección de la anomalía estructural que
origina el dolor de espalda, cuando esa es la
causa. Por ejemplo, cuando una hernia discal
comprime una raíz nerviosa, y todos los
tratamientos no quirúrgicos han
fracasado, extraer el material discal herniado
permite eliminar la compresión.
17. Algunas de las recomendaciones basadas en la evidencia
científica disponible establecen que el riesgo de infección o
hemorragia durante una primera operación del disco
intervertebral es menor del 1%, aunque ese riesgo aumenta mucho
con pacientes de más edad o cuando no es la primera operación
discal.
El verdadero riesgo es que la operación no tenga resultados
satisfactorios. Algunas de las recomendaciones basadas en la
evidencia científica disponible establecen que, entre los pacientes
con hernia discal pero sin signos evidentes de compresión del
nervio por exploración física o electromiograma menos del 40%
de los que se operan obtienen resultados satisfactorios. Los
estudios científicos realizados demuestran que la principal causa
de fracaso quirúrgico es operar a pacientes que no deberían serlo y
que cuanto más estricta es la selección de los pacientes que se
remite a cirugía, mejores son los resultados de ésta.
18. Otro riesgo de la cirugía es la fibrosis post-
quirúrgica. Se acepta que cuanto menos
agresiva sea la cirugía y menor el sangrado
durante la operación, menor es el riesgo de que
aparezca.
Por otra parte, la cirugía requiere un estado
mínimo de salud general. Algunas
enfermedades generales, como cardíacas,
pulmonares o metabólicas, pueden impedirla.
19.
20.
21. La tiroidectomía es la remoción parcial o total de
la glándula tiroides indicada en pacientes con
desordenes tanto funcionales como en el
hipertiroidismo, neoplásicos e inflamatorios
nombrando entre ellos tiroiditis de Hashimoto.
Existen enfermedades carenciales como bocio
endémico, que pueden llegar a afectar el proceso
de deglución y respiración normal, aparte de la
apariencia física, debido al aumento exagerado de
tamaño de la glándula, lo que obliga a realizar
este procedimiento.
22.
23. Total: es la completa extirpación de la glándula,
indicada principalmente en neoplasias malignas de
la tiroides, además de ciertos tumores de laringe y
cuello que pueden llegar a hacer metástasis en ella.
Subtotal o parcial: Intervención en la cual se retira
parte de la tiroides pero no toda con el fin de no
provocar cuadros futuros de hipotiroidismo,
comúnmente se puede llegar a extraer del 90 al
95% de la glándula, esta poco después de la cirugía
comienza de nuevo a proliferar y poco a poco ir
recuperando su función normal.
24. También se pueden encontrar otro tipo de
clasificación que están englobadas dentro de la
subtotal: la hemitiroidectomía, siendo esta la
remoción de uno de los lóbulos y la
istmectomía tiroidea que hace referencia a la
sustracción del istmo glandular.
25. Enfermedad de Graves Basedow
Hipertiroidismo
Tumor maligno de tiroides
Tumor maligno de laringe o de cualquiera de la
estructuras del cuello que la rodean
Tiroiditis de Hashimoto
Bocio
Razones cosméticas
26. Como en todo proceso quirúrgico siempre
existe la posibilidad que después de realizar la
intervención se desencadenen otro tipo de
enfermedades, la más frecuente en este caso es
el hipotiroidismo. Paradójicamente también se
puede producir un estado de hipertiroidismo
conocido como tormenta tiroidea, pudiendo
aparecer de manera espontánea o precipitarse
por infección, estrés o la realización de la
tiroidectomía en un paciente preparado
incorrectamente con fármacos anti tiroideos.
27. Además de la nombradas anteriormente
existen complicaciones que se pueden
producir durante la cirugía citando entre
ellas, el hipoparatiroidismo producido por
la extirpación accidental o intencional de la
glándula paratiroides, la lesión de los
nervios laríngeos recurrentes capaz de
producir la pérdida del habla.
28. Dentro del proceso de curación normal pueden
aparecer otro número más de obstáculos para
el buen fin de este procedimiento médico como
lo son la infección, las hemorragias y / o
hematomas y los queloides.
29.
30. La parotidectomía es una cirugía destinada a
extraer toda o una parte de la glándula parótida.
Estas glándulas son
las que secretan la saliva. Están ubicadas en su
mandíbula, frente y debajo de cada oído
31.
32.
33. La cirugía se realiza para:
Extraer un tumor de la glándula
Extraer nódulos linfáticos que pueden ser
cancerígenos
Tratar infecciones recurrentes en la glándula
34. Si está planificando someterse a una parotidectomía, el
médico revisará una lista de posibles
complicaciones, que
pueden incluir:
Adormecimiento de la cara y el oído
Daño en el nervio que controla el movimiento de los
músculos en su cara
Secreción de saliva: la saliva se puede acumular en la
parte superior del cuello después de la cirugía.
También se puede drenar a través de la incisión una
vez que se ha cerrado. Esto es temporal.
Síndrome de Frey: esto sucede cuando las fibras del
nervio salival crecen hacia las glándulas sudoríparas.
35.
36. es un quiste fibroso que se forma de manera
persistente en el conducto
tirogloso, usualmente el medio del
cuello, doloroso a la palpación, en especial si
llega a infectarse, Puede causar dificultades
para respirar, para tragar y/o malestar
abdominal, especialmente si la masa se torna
grande.
37. El quiste tirogloso es un trastorno congénito, por lo
que se diagnostica con más frecuencia en niños en
edad preescolar o a mediados, usualmente seguido
de una infección de las vías respiratorias
superiores. Los quistes del conducto tirogloso son
considerados la tumefacción congénita del cuello
más frecuente y constituye la segunda causa de
tumor cervical desupés de las linfadenopatías
benignas. En menos del 1% de los quistes se puede
ver una transformación maligna, generalmente de
origen tiroideo.Ocasionalmente el quiste tirogloso
puede ser confundido con una fisura media cervical
o viceversa.
38. Las ubicaciones más frecuentes del quiste
tirogloso es la línea media o levemente a un
lado de la línea media, entre el istmo de la
glándula tiroides y el hueso hioides o justo por
encima del hioides. Un quiste tirogloso puede
desarrollarse en cualquier punto a lo largo del
conducto tirogloso, aunque los quistes en la
lengua o el piso de la boca son poco frecuentes.
Un quiste en el conducto tirogloso puede
moverse hacia arriba al protruir la lengua.
39. Los quistes tiroglosos
están asociados a un
aumentado riesgo de
tejido tiroideo ectópico.
Ocasionalmente un tiroide
lingual puede verse en la
lengua como una masa
aplanada de forma de
fresa en la base de la
lengua.
Raramente, la persistencia
del conducto tirogloso
puede volverse maligno,
recibiendo el nombre de
carcinoma del conducto
tirogloso. En estos casos las
células cancerosas son
principalmente de tejido
tiroideo ectópico que se
han depositado a lo largo
del conducto tirogloso,
usualmente por razón de
una exposición a
radiación, aunque es
posible el desarrollo de
carcinomas de origen no
tiroideo.
40. Las características clínicas pueden ser halladas en
la porción subhioidea de la laringe y un 75% de los
casos se presentan como tumefacciones en la línea
media. El resto se localiza a los lados laterales a la
altura de la prominencia laringea del cuello.
El quiste del ducto tirogloso se presenta
mayormente como una masa asintomática y
palpable en la porción central del cuello que por lo
general se mueve al tragar. Es probable encontrar
dolor de garganta, del cuello o disfagia.
41. La persistencia del ducto o sus sinosidades
pueden promover secreciones orales, que
pueden causar la infección del quiste. Hasta un
50% de los quistes tiroglosos no son
diagnosticados sino en la vida adulta. El tracto
puede permanecer latente por varios años o
incluso décadas hasta que algún estímulo
conlleve a su detección. La infección puede
causar la aparición transitoria de la masa o su
agrandamiento con ocasionales recurrencias.
También ocurren drenajes espontáneos del
quiste.
42. El tratamiento de un quiste tirogloso consiste en la
resección quirúrgica, a menudo requiriéndose la
remoción de la sección media del hueso hioides.
Aunque son quistes por lo general benignos, el
quiste tiende a ser removido si el paciente exhibe
dificultades para respirar o tragar, o si el quiste
llega a infectarse. Aún si estos síntomas no están
presentes, puede decidirse el tratamiento
quirúrgico del quiste con el fin de evitar el riesgo
de su infección o la posible aparición de un
carcinoma, o bien por razones estéticas, si la
protrusión es notable en el cuello.
43. El manejo quirúrgico requiere la excisión del
quiste, así como sus conductos y
ramificaciones, de existir. El remover la porción
central del hueso hioides se indica para
asegurar que todos los conductos sean
removidos de su paso. No es probable ver
recurrencias después de tal operación. Con
frecuencia se indican antibióticos, en especial si
hay signos de una infección.
44. Después de la operación se recomienda evaluar
la función tiroidea, así como imágenes de la
tiroides para demostrar la apropiada función
de los tejidos tiroideos