Este documento discute la falta de participación ciudadana en la política y propone varias razones para este desinterés. Argumenta que algunos políticos y pensadores conservadores ven a los ciudadanos como ignorantes e incapaces de participar en asuntos públicos. Sin embargo, el documento sostiene que la falta de participación se debe más a que las instituciones no escuchan las demandas ciudadanas y no dan suficiente importancia a su participación. Concluye que se necesita una mayor educación cívica y ampliar las oportunidades para que los ciudadanos participen en decisiones
El reto de vivir en democracia / cuaderno para educadorescomunica
Este cuaderno podría ayudar a la comprensión de las potencialidades que la ley nos demanda y protege, así como nuestra responsabilidad frente al deber y, sobre todo, a nuestros propios derechos.
En los recientes Cabildos llevados a cabo en las tres ciudades más importantes del país, me sorprendió ver muchachos que eran apenas unos niños cuando este régimen se instaló en el país.
Ideas y paradigmas para una nueva sociedad: La aldea del tercer milenio, Parte V
La presente estructura social, el tejido de base que hoy nos rige, ya no cubre las expectativas de una mayoría de la población, aunque por cierto, es muy difícil cambiar hábitos, reglamentaciones, formas de comportamiento, que por años han gobernado nuestras relaciones sociales, familiares, laborales, y económicas.
Es bastante fácil criticar, pues para ello basta con ser un buen observador, y/o basta con señalar lo que ha perjudicado a gente que conocemos o a nosotros mismos.
Por cierto, es bastante más difícil expresar en detalle de qué forma deberíamos cambiar nuestras instituciones sociales y nuestras normativas, en la seguridad de que ello realmente mejoraría nuestras relaciones de convivencia y de supervivencia.
El “Consenso de Barcelona” pretende ser una respuesta a las inquietudes recién expresadas. Este proyecto se desarrolla con fuerza desde principios del año 2010, y en él participan una serie de redactores y de técnicos, entre los cuales se incluye el autor de estas líneas.
Aprovechando mi especial relación con el citado proyecto, e inspirándome por cierto en recomendaciones formuladas por los organizadores de la anteriormente citada iniciativa, así como por ideas propuestas por otros distinguidos participantes, he ido dando forma y redactando una serie de recomendaciones y de proposiciones, que por el momento no pretende ser un trabajo acabado y coherente de lo que correspondería tener en cuenta y aplicar por parte de Gobiernos y de Organismos Internacionales, para la construcción de un nuevo Orden Económico-social Internacional.
Más bien los textos que hasta el presente he ido acumulando y que aquí enumeraré, son más un insumo para mi propio trabajo que un documento final ya acabado, y como tal es que lo presento a los interesados.
Obviamente, muy bueno sería elaborar un texto final relativamente corto, que fuera un decálogo de recomendaciones o que se acercara a este ideal. Mucho me temo que la actual situación económica y social es demasiado compleja como para que se pueda llegar a tal síntesis, así que el lector sabrá disculpar la extensión que tiene este propio documento, así como otros con similar orientación que le seguirán.
El reto de vivir en democracia / cuaderno para educadorescomunica
Este cuaderno podría ayudar a la comprensión de las potencialidades que la ley nos demanda y protege, así como nuestra responsabilidad frente al deber y, sobre todo, a nuestros propios derechos.
En los recientes Cabildos llevados a cabo en las tres ciudades más importantes del país, me sorprendió ver muchachos que eran apenas unos niños cuando este régimen se instaló en el país.
Ideas y paradigmas para una nueva sociedad: La aldea del tercer milenio, Parte V
La presente estructura social, el tejido de base que hoy nos rige, ya no cubre las expectativas de una mayoría de la población, aunque por cierto, es muy difícil cambiar hábitos, reglamentaciones, formas de comportamiento, que por años han gobernado nuestras relaciones sociales, familiares, laborales, y económicas.
Es bastante fácil criticar, pues para ello basta con ser un buen observador, y/o basta con señalar lo que ha perjudicado a gente que conocemos o a nosotros mismos.
Por cierto, es bastante más difícil expresar en detalle de qué forma deberíamos cambiar nuestras instituciones sociales y nuestras normativas, en la seguridad de que ello realmente mejoraría nuestras relaciones de convivencia y de supervivencia.
El “Consenso de Barcelona” pretende ser una respuesta a las inquietudes recién expresadas. Este proyecto se desarrolla con fuerza desde principios del año 2010, y en él participan una serie de redactores y de técnicos, entre los cuales se incluye el autor de estas líneas.
Aprovechando mi especial relación con el citado proyecto, e inspirándome por cierto en recomendaciones formuladas por los organizadores de la anteriormente citada iniciativa, así como por ideas propuestas por otros distinguidos participantes, he ido dando forma y redactando una serie de recomendaciones y de proposiciones, que por el momento no pretende ser un trabajo acabado y coherente de lo que correspondería tener en cuenta y aplicar por parte de Gobiernos y de Organismos Internacionales, para la construcción de un nuevo Orden Económico-social Internacional.
Más bien los textos que hasta el presente he ido acumulando y que aquí enumeraré, son más un insumo para mi propio trabajo que un documento final ya acabado, y como tal es que lo presento a los interesados.
Obviamente, muy bueno sería elaborar un texto final relativamente corto, que fuera un decálogo de recomendaciones o que se acercara a este ideal. Mucho me temo que la actual situación económica y social es demasiado compleja como para que se pueda llegar a tal síntesis, así que el lector sabrá disculpar la extensión que tiene este propio documento, así como otros con similar orientación que le seguirán.
Reflexión académica en el marco del IV nivel de la Formación Avanzada, convenio interinstitucional entre la Universidad del Tolima y la Alcaldía Municipal de Ibagué. Maestría en Ciencias de la Educación año 2021.
Mucho de los conflictos son consecuencias de la necesidad de reconocimiento de las minorías o acciones reivindicativas que tienen carácter dinámico y explosivo el cual demanda disponer en agenda pública, para ello es necesario identificar estos grupos minoritarios y las necesidad que demanda estas.
El libro empieza con una historia de la evolución de la democracia, empezando en la Grecia antigua y pasando por la Inglaterra de Cromwell y las revoluciones de Francia y los Estados Unidos. Después hay una sección que presenta un análisis estructural de la democracia actual, hablando de derechos, leyes electorales y civismo. Nombran qué políticos controlan qué empresas y qué grupos de inversores son propietarios de medios de comunicación. Para acabar, hablan de reivindicaciones para democracias alternativas y alternativas horizontales y descentralizadas a la democracia.
Editado y firmado en 2013 por los «Grupos Anarquistas Coordinados », una organización pública que posteriormente el Estado decidió que era un grupo terrorista. Detenidos durante la Operación Pandora. Desde aquí un apoyo y un saludo.
¿Esta el señor Maroto incitando al odio?. GaraKrakenbergerORG
Apelamos a la responsabilidad de nuestros políticos para no utilizar un tema como el de la inmigración y la exclusión social como arma arrojadiza, ante las graves consecuencias
que ello puede tener en la cohesión social y la convivencia pacífica entre la ciudadanía. 19 Noviembre 2014 Gara
Uno de los puntos más importantes de la Agenda acordada entre el Gobierno y las FARC para sus
diálogos sobre la Paz en La Habana, es el problema de la PARTICIPACIÓN. Se está entendiendo como la
apertura de posibilidades para que algunos ex combatientes se inserten en la manera tradicional de hacer
política en Colombia. Sin embargo, los mismos sub temas de la Agenda dan pie para entender el tema de
manera mucho más amplia y analizar los verdaderos obstáculos del pueblo raso de Colombia para
participar libre y conscientemente en decisiones que le conciernen. Aquí se analizan CUATRO
MURALLAS que cierran las posibilidades de participación y se sugiere a los dialogantes buscar la manera
de derribarlas.
Reflexión académica en el marco del IV nivel de la Formación Avanzada, convenio interinstitucional entre la Universidad del Tolima y la Alcaldía Municipal de Ibagué. Maestría en Ciencias de la Educación año 2021.
Mucho de los conflictos son consecuencias de la necesidad de reconocimiento de las minorías o acciones reivindicativas que tienen carácter dinámico y explosivo el cual demanda disponer en agenda pública, para ello es necesario identificar estos grupos minoritarios y las necesidad que demanda estas.
El libro empieza con una historia de la evolución de la democracia, empezando en la Grecia antigua y pasando por la Inglaterra de Cromwell y las revoluciones de Francia y los Estados Unidos. Después hay una sección que presenta un análisis estructural de la democracia actual, hablando de derechos, leyes electorales y civismo. Nombran qué políticos controlan qué empresas y qué grupos de inversores son propietarios de medios de comunicación. Para acabar, hablan de reivindicaciones para democracias alternativas y alternativas horizontales y descentralizadas a la democracia.
Editado y firmado en 2013 por los «Grupos Anarquistas Coordinados », una organización pública que posteriormente el Estado decidió que era un grupo terrorista. Detenidos durante la Operación Pandora. Desde aquí un apoyo y un saludo.
¿Esta el señor Maroto incitando al odio?. GaraKrakenbergerORG
Apelamos a la responsabilidad de nuestros políticos para no utilizar un tema como el de la inmigración y la exclusión social como arma arrojadiza, ante las graves consecuencias
que ello puede tener en la cohesión social y la convivencia pacífica entre la ciudadanía. 19 Noviembre 2014 Gara
Uno de los puntos más importantes de la Agenda acordada entre el Gobierno y las FARC para sus
diálogos sobre la Paz en La Habana, es el problema de la PARTICIPACIÓN. Se está entendiendo como la
apertura de posibilidades para que algunos ex combatientes se inserten en la manera tradicional de hacer
política en Colombia. Sin embargo, los mismos sub temas de la Agenda dan pie para entender el tema de
manera mucho más amplia y analizar los verdaderos obstáculos del pueblo raso de Colombia para
participar libre y conscientemente en decisiones que le conciernen. Aquí se analizan CUATRO
MURALLAS que cierran las posibilidades de participación y se sugiere a los dialogantes buscar la manera
de derribarlas.
UNA PROPUESTA Y UNA INVITACIÓN: EDUCACIÓN POPULAR COMO ALTERNATIVA PARA ACTIV...Marco Alvarado Torres
La educación popular es una herramienta para la construcción autónoma de proyectos de vida individuales, y colectivos partiendo desde la revalorización de su propio conocimiento previo.
El proceso de transición a la democracia no sólo se expresa en la emisión de nuevas leyes y la construcción de nuevas instituciones Es, sobre todo, una gran transformación cultural
1. ¿CIUDADANOS COMPROMETIDOS CON EL ESTADO DE DERECHO O POLÍTICOS
IMBECILES COMPROMETIDOS CON EL TOTALITARISMO Y LA IGNORANCIA?
Se escucha, con inusitada frecuencia, entre los ciudadanos, especialmente de las clases medias, de
todas las edades, en capacidad de razonar, que no les interesa la política. Dicha apreciación
conduce a algunos bien pensantes, previo análisis de la situación, a proponer un mayor desarrollo
de la cultura ciudadana haciendo hincapié allí donde con más énfasis debe aplicarse: en las aulas
escolares, habida cuenta de que loro viejo no aprende a hablar…
Lo curioso de la situación, después de mucho vaivén dialectico, es que una importante fracción
del pensamiento conservador y de la curia, inserta en menesteres que no son de su competencia,
pretendan a propósito, prescindir de los ciudadanos, es decir, de la democracia: tienen la
convicción de que los ciudadanos son una manada de ignorantes que desconocen a los demás, que
no saben de la cosa pública, que son desinformados e incoherentes. Olvidan, muy pronto estos
“sabios”, que han sido los ciudadanos, en su suprema “estulticia”, quienes los han elegido para que
los representen en los cuerpos colegiados, de conformidad con lo estatuido por el estado de derecho.
La democracia, tal como la conocemos, se ofrece equitativamente a todos los ciudadanos, sin
excepciones, en el entendimiento de que todos obraran, de acuerdo a su leal saber y entender, para
mejorar las condiciones de vida de las colectividades donde les ha tocado vivir. Las instituciones,
los mecanismos de la democracia y la misma actividad política deben combinarse para hacer
efectivo el libre funcionamiento de las ideologías para que funcione, sin tropiezos, la oferta y la
demanda en éste particular mercado.
Se observa desde las instituciones y con marcado acento desde el mundo político el deterioro del
ejercicio de los derechos ciudadanos, la desinformación política y el aumento de la abstención en
las lides democráticas. ¿Por qué tanto desinterés? ¿Podría afirmarse que el desinterés ciudadano
por los asuntos colectivos está vinculado a la falta de cultura cívica y a la conciencia de que su
participación en los asuntos públicos es mínima e irrelevante? Los dos fenómenos apuntan al
meollo del asunto que nos ocupa, además de la convicción generalizada de la corrupción de los
gestores políticos. La convicción de que la participación es irrelevante encuentra asiento en la
creencia de que el voto personal cuenta poco o no cuenta nada entre millones de votos, y, de otra, en
la percepción mediata, de que los beneficios obtenidos no son los esperados. Debe contarse además
con la desaparición de los espacios de politización en los centros de trabajo, en la escuela y en las
universidades, en la desestructuración de la familia, el individualismo a ultranza, el egoísmo y la
desinformación propiciada desde los centros de poder por los medios de comunicación. Son
muchos los factores que afectan hoy las decisiones ciudadanas y la cultura cívica. El deterioro de la
cultura cívica tiene consecuencias desastrosas para la vida en común: falta de legitimidad de las
decisiones que afectan al conglomerado social, rapto de la actividad política por parte de quienes
detentan el poder económico, perdida de derechos democráticos y perdida de la gestión pública.
Para acercar los ciudadanos a la vida pública se requiere voluntad política para escuchar y
llevar a la práctica las exigencias de la colectividad. La tesis conservadora al respecto es la que
afirma que: “la democracia no funciona cuando se hace lo que los electores exigen…” Según esta
teoría, la indiferencia ciudadana, seria señal del buen funcionamiento del sistema democrático, es
decir que, la democracia nada tiene que ver con la participación y la voluntad general…
Debemos recordarle a los gerifaltes que, mal que bien, la sociedad funciona porque parte
importante de las acciones humanas no se rigen por cálculos mezquinos, sino por valores éticos y
emocionales: nos indignamos ante las injusticias; sentimos vergüenza ante nuestros yerros; nos
sentimos culpables cuando violamos las normas, etc. Hechos que solo son posibles cuando hay
concordancia entre nuestras acciones y nuestro pacto social. Por ello la disposición a participar en
la vida pública y en especial en la actividad política depende de la percepción ciudadana de la
importancia que se otorgue a las exigencias de la colectividad. Quien sabe que no se le escucha, no
se molesta en hablar. No es estúpido, es sensato. Las instituciones deben ser más sensibles a la
2. vocación pública del ciudadano.
En resumen, el problema de la falta de cultura cívica tiene que ver menos con los ciudadanos que
con las reglas de juego con las que se manejan. Forma parte del diseño y rediseño con que los
partidos políticos de una parte, y las instituciones por otra, ponen en práctica de acuerdo a sus
particularísimas necesidades. Está en el origen de los supuestos liberales que inspiran la
democracia, es la forma como el liberalismo pretende resolver el conflicto democracia-ciudadano:
“protegiendo” al ciudadano de la política. Permítaseme, para tener una visión grafica del problema,
traer a colación, la historia de Kalil:
Un misionero llega a África con la misión de llevar la palabra de Dios a los aborígenes de una
aldea perdida en la manigua. El misionero lleva seis meses tratando de explicarle a sus alumnos qué
es una obra buena y qué una obra mala. Pasado el tiempo, decide examinar a sus alumnos y
pregunta a uno de ellos:
Kalil, ¿qué es una obra buena y qué una obra mala?
-A lo que el aludido responde:-
-Una obra mala es que otro robe las vacas de mi señor…
¡Muy bien Kalil! Y, ¿Una obra buena?
-¡Que mi señor robe las vacas de otro!
Y es que para los liberales la pérdida de libertad empieza cuando las decisiones de otros, de la
comunidad política, recae sobre mi y sobre lo que entiendo por libertad, y mi libertad aumenta
cuando aumentan mis competencias, especialmente las que están excluidas por el contrato social.
En estas condiciones, para los conservadores, los más liberales, es natural que la actividad política,
antes que una garantía de libertad y convivencia, se entienda como un peligro, una amenaza a los
intereses de las elites políticas y económicas.
La democracia exige la participación de todos en las decisiones que recaen sobre todos. Es decir
que, han de ampliarse los ámbitos democráticos para revalorizar la participación ciudadana en la
vida pública. La educación para la ciudadanía es básica si queremos priorizar la democracia
participativa y hacer de las nuevas generaciones de ciudadanos personas comprometidas “CON
LAS COLECTIVIDADES CON LAS QUE LES HA TOCADO VIVIR”.
Carlos Herrera Rozo.