El documento clasifica las cuentas contables en tres grupos: 1) Según el grupo al que pertenecen, como activos, pasivos y patrimonio; 2) Según el saldo que tienen por naturaleza, como cuentas deudoras y acreedoras; y 3) Según el balance en el que se presentan, como cuentas del estado de pérdidas y ganancias y del balance general. Cada grupo contiene elementos como activos, pasivos, gastos e ingresos.