Este documento describe las competencias docentes necesarias para el siglo XXI. Identifica habilidades como la planificación, la enseñanza efectiva, la educación en valores, el uso de tecnología, la interacción con estudiantes, el trabajo en equipo, el conocimiento de la comunidad, el liderazgo docente, la autoevaluación, el involucramiento de padres, y el desarrollo profesional continuo.