Este documento presenta el progreso de Erik, un niño de 7 años con autismo, a través de 4 años de estimulación intensiva. Ahora Erik ha desarrollado habilidades de lenguaje, juego, empatía y cognición. Su madre atribuye su éxito a la terapia conductual intensiva, la estructura, la anticipación y el mantenimiento de una actitud positiva. El documento también ofrece consejos para otros padres sobre cómo estimular a sus hijos con autismo.