El documento describe el valor de las fuentes iconográficas para la reconstrucción histórica. Explica que las imágenes pueden servir como testimonio histórico si se estudian teniendo en cuenta el objetivo de su autor. Además, presenta el método iconográfico para interpretar imágenes a través de sus detalles y significados naturales, convencionales e intrínsecos. Finalmente, señala algunas críticas a este método y la necesidad de trascenderlo usando otros enfoques como el psicoanálisis.