Durante la niñez intermedia, los niños continúan fortaleciéndose y mejorando su coordinación y habilidades motrices, lo que les permite participar en juegos vigorosos que involucran luchas, patadas y persecuciones. Aunque estos juegos bruscos suelen incluir risas y gritos, la niñez intermedia suele ser un período saludable debido al desarrollo de vacunas efectivas contra enfermedades infantiles.