Pelayo era un noble visigodo que huyó a Asturias para escapar de la intriga política. Los cristianos que huían de la invasión árabe lo eligieron como su líder. Pelayo derrotó a los moros en Covadonga y estableció el reino de Asturias. Gobernó durante más de 20 años preparando su ejército para defenderse de futuros ataques. Murió en Cangas de Onís en 737.