Este documento discute los desafíos de educar en la era digital. Señala que los estudiantes de hoy son "nativos digitales" que aprenden de manera diferente que las generaciones anteriores. Argumenta que la educación debe enfocarse más en desarrollar competencias como la creatividad y el pensamiento crítico, en lugar de sólo transmitir contenidos. También sugiere que los docentes deben adoptar nuevos roles de facilitadores y los estudiantes roles más activos en su propio aprendizaje a través de enfoques como el aprendizaje basado