Centro de Recursos e Informacion para la Integracion Educativa Mexicali
El autismo en público
1. El autismo en público
Fuente: Boletín Mensual, Autismo Teletón. Feb. 2011
Publicado en Paso-a-Paso, Vol. 21 No. 4
Tener un hijo con autismo tiene un impacto fuerte en la familia. Además de lidiar con lo
que emocionalmente representa este diagnóstico, deben enfrentarse al manejo diario de
su hijo. Esto puede incluir dificultades para comunicarse, exceso de sensibilidad a
diferentes estímulos, dificultad ante nuevos lugares y/o cambios en su rutina… Por si esto
fuera poco, el autismo no se nota a simple vista; pero las conductas extrañas sí y por ello
algunas veces la gente se le queda viendo o hacen comentarios dolorosos e
inadecuados.
Algunos ejemplos de comportamientos que pueden presentarse en situaciones públicas
son: Hacer sonidos extraños; Brincar constantemente en el cine, transporte, restaurante;
Tocar o golpetear objetos que le llamen la atención, por ejemplo texturas de paredes,
ropa de otras persona, etc.; Berrinches de gran intensidad y/o duración; Tirarse al piso y no
querer levantarse.
Es común que algunas personas se le queden viendo a tu hijo cuando actúe de manera
“rara” o diferente, e incluso comenten sobre ello. Te sugerimos:
- No dejes que te afecte. Recuerda que tu hijo y tu familia son tu prioridad, ignora los
comentarios crueles.
- Informa. Muchas veces las personas hacen comentarios por ignorancia o porque no se
les ocurre pensar que pueda tratarse de una discapacidad. Diles: “mi hijo tiene autismo
que es una condición de discapacidad y por eso se comporta así”
Las actividades sociales y públicas suelen ser difíciles para las personas con autismo
porque:
- Por lo general hay muchos estímulos visuales, auditivos, sensoriales.
- Casi siempre implican cambios en la rutina.
- Frecuentemente incluyen tiempos de espera.
- Resulta difícil saber qué va a pasar.
- Hay gente que no conoce y ellos le hablan, lo tocan o se acercan a él.
Algunos consejos
1. No se aíslen. Ahora más que nunca necesitas la cercanía de tus familiares y amigos.
Explícales sobre las dificultades de tu hijo y los ajustes que se pueden hacer.
2. Control de las conductas más disruptivas. En conjunto con el especialista, realicen un
plan de apoyos positivos y modificación de conducta, de tal forma que elijan las
prioridades y puedas manejar los retos mayores, primero en casa y poco a poco
generalizando en otros lugares.
3. Diviértete. Busca espacios de esparcimiento para ti y tu familia. Haz algo que disfrutes,
regálate momentos para ti.
4. Cuida de tu salud. Cuida tu alimentación y haz ejercicio, es importante que tú estés
bien.
5. Date permiso. Recuerda que eres un ser humano y que puedes cometer errores. Tus
intenciones son las mejores. Cuando te equivoques, ¡aprende de ello y sigue adelante!