1. El uso del punto y coma
La pausa del punto y coma es más larga que la
que hacemos en la coma, pero más corta que la
del punto.
El punto y la coma se unieron para separar
oraciones ligadas con la misma idea;
especialmente, cuando las oraciones tienen
comas.
Ejemplo:
La primera parte de la obra era interesante; la
segunda, insípida; la tercera, francamente
aburrida; y el final era lamentable.
Cuando llegamos a la casa, el salón estaba lleno
de gente; el jardín resplandecía de luces de
colores; y los manjares olorosos lucían en las
bandejas de planta”
2. Axkaná leyó distraído los grandes titulares de las
noticias; luego, mientras los papeles se le caían
de las manos de las manos, se puso a mirar
hacia afuera.
(M.L. Guzmán. La sombra del caudillo)
Lo máximo e insignificante se abandona al
arbitrio; lo medio y secundario se confía al
consenso público; y el mínimo e indispensable
se legisla.
(A. Reyes. El deslinde.)
El punto y compa se usa para separar dos
oraciones de una extensión considerable
que suelen contener comas, pero que son
opuestas. Se coloca antes de la oración que
contradice, antes del elemento adversativo.
Ejemplo:
Su voz, aunque admonitoria y enérgica, sonaba
afectuosa, tranquila; pero, no obstante,
Tarabana saltó con no poco olvido de sus
buenas formas…
(M. L. Guzmán. La sombra del caudillo.)
3. De un lado hay una postura activa; del otro, una
postura que superficialmente llamamos pasiva.
(A. Reyes. El deslinde.)
El punto y coma se utiliza en series o
enumeraciones que contenga coma interna,
es decir, las categorías principales se separan
con este signo.
Ejemplo:
Por lo demás – proseguía el otro, cambiando de
latitud – las Antillas constituían un archipiélago
maravilloso, donde se encontraban las cosas
más raras: casas atadas a la roca por cadenas
de hierro, para que los ciclones no las
arrastraran hasta el mar; un vasto cementerio
sefardita en Curazao; islas habitadas por
mujeres que permanecían solas durante meses
y años, mientras los hombres trabajaban en el
Continente; galeones hundidos, árboles
petrificados, peces inimaginables; y, en las
Barbados, la sepultura de un nieto de
Constantino XI, último emperador de Bizancio,
cuyo fantasma se aparecía, en las noches
ventosas, a los caminantes solitarios…
(A. Carpentier. El siglo de las luces.)
4. Este importante signo se utiliza para cerrar una
idea.
Ejemplo:
Alrededor de los personajes principales, se
movían negros, guajiros, monteros, notarios de
provincia; toda una humanidad de idioma propio,
con caracteres susceptibles de ser expresados
musicalmente.
Cada cosa –tómese la palabra en su más amplio
sentido –es algo que se puede desear, intentar,
hacer, deshacer, encontrar, gozar o repeler;
nombres todos que significan actividades
vitales.
Referencia Bibliográfica
Romero, A. M. L (1991).
Técnicas Modernas de
Redacción. México: Harla.