MIELOMENINGOCELE Y MENINGOCELE
ESPINA BIFIDA OCULTA
FISIOPATOLOGIA DE LA ESPINA BIFIDA
ETIOLOGIA DE LA ESPINA BIFIDA
PRONOSTICO DE MARCHA DE ESPINA BIFIDA
DIAGNOSTICO DE ESPINA BIFIDA
TRATAMIENTO MEDICO DE ESPINA BIFIDA
TRATAMIENTO FISIOTERAPEUTICO DE ESPINA BIFIDA
CLASIFICACION DE ESPINA BIFIDA
La Espina Bífida es una malformación congénita que afecta las vértebras y la columna espinal. En esta, una o varias vértebras no se unen para cerrar la columna dañando la médula espinal. Este afecta el Sistema nervioso central y al bebé nacer debe ser operado en las proximas 24 a 48 horas ya que la membrana está compuesta por líquido cefalorraquideo. En esta operación se abre el saco, se introduce el área expuesta y se cierra.
Existen 3 tipos de Espina Bífida:
1. Espina Bífida Oculta; Esta abertura es pequeña, por lo cual no se puede salir el cordon espinal o ramificaciones nerviosas. Este paciente jamas necesitará de una silla de ruedas y en muchas veces no se entera de tener la condición.
2. Espina Bífida Manifiesta; Abertura cervical, toráxica o lumbar de la columna vertebral. En este caso la abertura es grande y se podrá salir el cordon espinal, ramificaciones y/o meninges.
3. Mielomeningocele: Esta contiene líquido cefalorraquideo, con una capa muy finite y exposición del cordon espinal, ramificaciones o meninges.
Estos pacientes presentan debilidad muscular de la lesion hacia abajo, Insensibilidad o Hidrocefalia (sobreacumulación de líquido cefalorraquideo en la cabeza).
Pruebas para detectar estas enfermedades congénitas:
1. Sonograma
2. Alfafetoproteína
3. Amniocentesis
Prevención: Desde los 10 años, o desde que comience la etapa reproductiva tanto en la mujer como en el hombre, hay que comenzar a tomar 400 mcg de ácido fólico diario. Gracias al uso de el ácido fólico se ha disminuido a un más de 50% el riesgo de estas enfermedades congénitas.
Las personas con espina bífida e hidrocefalia necesitan utilizar los recursos sociosanitarios para participar de forma plena e inclusiva en su entorno.
MIELOMENINGOCELE Y MENINGOCELE
ESPINA BIFIDA OCULTA
FISIOPATOLOGIA DE LA ESPINA BIFIDA
ETIOLOGIA DE LA ESPINA BIFIDA
PRONOSTICO DE MARCHA DE ESPINA BIFIDA
DIAGNOSTICO DE ESPINA BIFIDA
TRATAMIENTO MEDICO DE ESPINA BIFIDA
TRATAMIENTO FISIOTERAPEUTICO DE ESPINA BIFIDA
CLASIFICACION DE ESPINA BIFIDA
La Espina Bífida es una malformación congénita que afecta las vértebras y la columna espinal. En esta, una o varias vértebras no se unen para cerrar la columna dañando la médula espinal. Este afecta el Sistema nervioso central y al bebé nacer debe ser operado en las proximas 24 a 48 horas ya que la membrana está compuesta por líquido cefalorraquideo. En esta operación se abre el saco, se introduce el área expuesta y se cierra.
Existen 3 tipos de Espina Bífida:
1. Espina Bífida Oculta; Esta abertura es pequeña, por lo cual no se puede salir el cordon espinal o ramificaciones nerviosas. Este paciente jamas necesitará de una silla de ruedas y en muchas veces no se entera de tener la condición.
2. Espina Bífida Manifiesta; Abertura cervical, toráxica o lumbar de la columna vertebral. En este caso la abertura es grande y se podrá salir el cordon espinal, ramificaciones y/o meninges.
3. Mielomeningocele: Esta contiene líquido cefalorraquideo, con una capa muy finite y exposición del cordon espinal, ramificaciones o meninges.
Estos pacientes presentan debilidad muscular de la lesion hacia abajo, Insensibilidad o Hidrocefalia (sobreacumulación de líquido cefalorraquideo en la cabeza).
Pruebas para detectar estas enfermedades congénitas:
1. Sonograma
2. Alfafetoproteína
3. Amniocentesis
Prevención: Desde los 10 años, o desde que comience la etapa reproductiva tanto en la mujer como en el hombre, hay que comenzar a tomar 400 mcg de ácido fólico diario. Gracias al uso de el ácido fólico se ha disminuido a un más de 50% el riesgo de estas enfermedades congénitas.
Las personas con espina bífida e hidrocefalia necesitan utilizar los recursos sociosanitarios para participar de forma plena e inclusiva en su entorno.
La espina bífida es una afección que afecta la columna vertebral y suele ser evidente en el nacimiento. Es un tipo de defecto del tubo neural (DTN).
La espina bífida puede aparecer en cualquier lugar a lo largo de la columna si el tubo neural no se cierra por completo. La columna vertebral que protege la médula espinal no se forma y no se cierra como debería. Eso suele producir daño de la médula espinal y los nervios.
La espina bífida puede provocar discapacidades físicas e intelectuales, que van de leves a graves. La gravedad depende de lo siguiente:
El tamaño y la localización de la abertura en la columna.
Si parte de la médula espinal y los nervios están afectados.
Tipos de espina bífida
Los tres tipos más comunes de espina bífida son los siguientes:
Types of spina bifida: Spina bifida occulta, meningocele, myelomeningocele
Mielomeningocele
Cuando se habla de espina bífida, la mayoría de las veces se habla de mielomeningocele. El mielomeningocele es el tipo más grave de espina bífida. Con esta afección, un saco de líquido sale a través de una abertura en la espalda del bebé. Parte de la médula espinal y los nervios están en ese saco y presentan daños. Ese tipo de espina bífida provoca discapacidades que pueden ser de moderadas a graves, como problemas que afectan la forma en que se va al baño, pérdida de sensibilidad en las piernas o los pies, o no poder mover las piernas.
Meningocele
Otro tipo de espina bífida es el meningocele. Con el meningocele, un saco de líquido sale a través de una abertura en la espalda del bebé. Pero la médula espinal no está en ese saco. Por lo general, el daño de los nervios es escaso o nulo. Este tipo de espina bífida puede provocar discapacidades menores.
Spina Bifida Occulta
La espina bífida oculta es el tipo más leve de espina bífida. En este caso, la espina bífida está “escondida”. En esta enfermedad, hay un pequeño hueco en la columna, pero no hay una abertura ni un saco en la espalda. La médula espinal y los nervios suelen ser normales. Muchas veces, la espina bífida oculta recién se detecta en la niñez avanzada o la adultez. Ese tipo de espina bífida no suele provocar discapacidades.
Diagnóstico
La espina bífida se puede diagnosticar durante el embarazo o tras el nacimiento del bebé. La espina bífida oculta puede no ser diagnosticada hasta finales de la infancia o la edad adulta, o tal vez nunca ser diagnosticada.
Durante el embarazo
Durante el embarazo, hay pruebas de detección (pruebas prenatales) que se usan para determinar si el bebé tiene espina bífida u otros defectos congénitos. Hable con su médico si tiene alguna pregunta o inquietud sobre estas pruebas prenatales.
1. Enfermedades del recién nacido
Espina Bífida
¿Qué es?
La espina bífida en es una deformación congénita (el niño nace con esta enfermedad) del tubo
neural.
El tubo neural es un estrecho canal que padece una serie de transformaciones durante la vida
intrauterina, en la tercera y cuarta semana del embarazo, y formará el cerebro y la médula
espinal. La espina bífida se produce cuando la parte del tubo neural que formará la médula
espinal no se cierra completamente.
Es una malformación grave ya que afecta al sistema nervioso central (la médula espinal), el
aparato locomotor y es sistema genitourinario. La afectación del sistema nervioso central
produce en un 90% de los casos, hidrocefalia y una pérdida de sensibilidad y fuerza más o
menos importante en función del nivel de localización del mielomeningocele.
Causas
En la actualidad, hay consenso en que esta malformación se debe a la suma de dos factores: la
predisposición genética y la deficiencia de ácido fólico antes de la concepción o la alteración de
su metabolismo por fármacos o tóxicos. No es hereditaria. La posibilidad de tener un niño con
alguno de estos defectos es de 1,8 a 2 por cada 1.000 nacimientos entre la población general.
Si hay antecedentes familiares de algún tipo de defecto del tubo neural, hay mayor riesgo de
tener un bebé con este defecto.
2. Tipos de defectos del tubo neural
Defectos cerrados
o Oculta o defecto de fusión vertebral: es un pequeño defecto en la formación
de una vértebra y casi nunca afecta a la médula espinal ni a los nervios
espinales que salen de ella. La mayoría de ocasiones pasa desapercibida para
la persona y se puede detectar de manera casual mediante una radiografía. La
padecen aproximadamente un 15% de las personas sanas
o Espina bífida cerrada: se produce al final del primer trimestre de embarazo y
se caracterizan por presentarse como bultos en la zona lumbar baja, en
ocasiones con algún mechón de pelo. Provocan una mínima lesión neurológica
en las piernas pero, en muchas ocasiones, afectación de la vejiga (en forma de
vejiga neurógena) que, además, puede no producir escapes de orina y por lo
tanto pasar desapercibida.
Defectos abiertos
o Meningocele: es un quiste o saco que contiene membranas de la capa
protectora de la médula espinal (meninges), que asoman por la apertura de la
columna vertebral. En el saco hay líquido cefalorraquídeo y, normalmente, no
hay daño en los nervios. . Las personas que la padecen pueden tener
discapacidades menores.
o Mielomeningocele: el quiste contiene tejido nervioso y líquido
cefalorraquídeo. La médula no se ha desarrollado completamente y está
dañada, lo que ocasiona parálisis y pérdida del sentido del tacto, por debajo de
la lesión. El grado de la parálisis depende del sitio donde se encuentra la
Espina Bífida.
Esta es la forma más grave de Espina Bífida compatible con la vida, una de las causas más
frecuentes de discapacidad física en la infancia, y la más frecuente de vejiga neurógena e
intestino neurógeno.
Cuando consultar al médico
Si se tiene alguna anomalía en alguna zona de la espalda: vellosidad, mancha roja de
nacimiento o hipopigmentada (color blanco), un hoyuelo o fosita profundo o un
abultamiento de grasa
En caso de dolor en la espalda o en las piernas
Debilidad en las piernas
Deformidades en espalda, pies y piernas
Mal funcionamiento de la vejiga o los intestinos
3. Si se quieren tener hijos, ya que las mujeres con EB deben tomar una dosis más alta
de ácido fólicopara prevenirla.
¿Se puede prevenir?
Los estudios científicos explican que si las mujeres en edad fértil consumieran 0,4 mg de ácido
fólico al menos 3 meses antes de quedar embarazada y durante el primer trimestre del
embarazo, podrían reducir hasta en un 70% la probabilidad de tener un hijo con espina bífida.
El ácido fólico es un tipo de vitamina B esencial para el organismo. El cuerpo necesita mayor
cantidad de vitaminas en periodos de rápido crecimiento, ocmo el embarazo y el desarrollo del
feto.
Como muchos embarazos no son planeados, se recomienda a las mujeres en edad fértil una
dieta rica en ácido fólico: verduras de hoja verde, carne o cereales.
¿Se puede detectar antes del nacimiento?
El diagnóstico prenatal de la espina bífida es posible mediante un serie de pruebas que se
realizan a la embarazada. Estas pruebas tienen sus limitaciones y algún caso de espina bífida
puede no ser identificado:
Los niveles de alfafetoproteína en la sangre materna son muy elevados si el feto tiene
un defecto en el tubo neural
En la ecografía prenatal se pueden observar alteraciones en la columna vertebral y en
el cerebro
La amniocentesis
¿Cómo se trata?
No hay un tratamiento definitivo para la espina bífida pero si procedimientos que ayudan a
minimizar las consecuencias de la enfermedad y mejorar la calidad de vida del paciente.
Si el defecto se diagnostica intraútero se practica una cesárea electiva para minimizar el riesgo
de lesiones añadidas si pasara por el canal del parto.
Lo primero que hay que hacer es el cierre quirúrgico del defecto; con esta intervención
quirúrgica no restauraremos el déficit neurológico, pues es imposible, sino prevenimos la
4. infección secundaria del sistema nervioso central. En el caso de que exista hidrocefalia se
deberás colocar al bebé una válvula de derivación ventricular.
En el tratamiento posterior se debe reducir al mínimo las deformidades y maximizar las
capacidades del niño para promover su autoestima e independencia, evitando la
sobreprotección.
En muchos casos necesitan un soporte para su movilidad: muletas, soportes o sillas de ruedas.
En los últimos 40 años con el tratamiento multidisciplinar de estos niños se ha conseguido que
el 90% sobrevivan hasta la edad adulta y un 80% tienen una inteligencia normal.
Por otro lado, las discapacidades físicas pueden afectar profundamente el desarrollo
emocional y social de un niño. Es importante que los médicos, profesores y padres entiendan
las capacidades y limitaciones físicas del niño. Para promover su crecimiento personal, se debe
motivar a los pequeños para que sean independientes, participen en actividades con otros
niños sin discapacidad y se responsabilicen de su propio cuidado.