La respuesta argumenta que la formación de competencias ciudadanas es necesaria para que los ciudadanos conozcan sus derechos y deberes. Sin esta información, las personas dependerían de lo que otros les digan y podrían actuar de manera equivocada. La formación en competencias ciudadanas puede transformar la cultura de una sociedad al cambiar la manera en que las personas se relacionan y analizan qué acciones son correctas de acuerdo con sus derechos y deberes, contribuyendo a una sociedad más democrática y equitativa.