El documento discute cómo las empresas pueden gestionar la incertidumbre económica mediante la planificación estratégica flexible. Sugiere que las empresas proyecten escenarios económicos posibles y analicen riesgos para optimizar recursos y prevenir contingencias. También recomienda que ajusten sus planes periódicamente según la situación actual, pero que planifiquen a mediano plazo para estar preparados cuando mejoren las condiciones.