Los lípidos son una fuente importante de energía para el cuerpo y se almacenan como reserva. Incluyen ácidos grasos esenciales que el cuerpo no puede sintetizar como el ácido linoleico y linolénico. Los lípidos comparten la característica de ser hidrófobos o poco solubles en agua, lo que les permite formar estructuras como membranas biológicas. Existen dos grandes grupos de lípidos: los derivados de ácidos grasos y los no saponificables.
En la presente entrada dispones de una secuencia de diapositivas que sirven de base para explicar los LÍPIDOS INSAPONIFICABLES y las PROTAGLANDINAS. Contiene útiles imágenes de apoyo dentro de cuadros dinámicos.
En la presente entrada dispones de una secuencia de diapositivas que sirven de base para explicar los LÍPIDOS INSAPONIFICABLES y las PROTAGLANDINAS. Contiene útiles imágenes de apoyo dentro de cuadros dinámicos.
1. Grasas o Lípidos<br />Las grasas conocidas también como lípidos, simultáneamente con los carbohidratos se constituyen la mayor fuente de energía para el cuerpo. Las grasas son la primordial sustancia de reserva en el cuerpo, también son indispensables para otras actividades como la impregnación de algunas vitaminas y la síntesis de hormonas.Pero también existen grasas esenciales y no esenciales, las esenciales son aquellas que el cuerpo no puede sintetizar, y son: el ácido linoleico y el linolénico, aunque habitualmente no se encuentran ausentes del cuerpo ya que lo podemos encontrar en nuestros alimentos diarios como las carnes, pescados y huevos.<br />Los lípidos son un grupo de sustancias heterogéneo desde el punto de vista estructural, pero que comparten una característica química fundamental para su actividad dentro de los organismos: debido a que al menos una parte importante de su estructura es apolar los lípidos son total o parcialmente hidrófobos. Esto les hace ser poco solubles en agua, y provoca que se mantengan próximos entre sí, formando estructuras que apenas se mezclan con el resto de los componentes celulares. Gracias a estas características químicas, los lípidos son los principales constituyentes de las membranas biológicas.<br />No son polímeros, a diferencia de los ácidos nucléicos y las proteínas.<br />Existen dos grandes grupos de lípidos biológicos: los que derivan de un tipo de sustancias denominadas ácidos grasos (lípidos saponificables) y los que no tienen ácidos grasos en su estructura (lípidos no saponificables).<br />Los ácidos grasos son el tipo de lípidos que presenta una estructura más sencilla. Consisten en una cadena hidrocarbonada de una longitud relativamente larga que tiene, en su carbono terminal, un grupo carboxilo, lo que les proporciona su carácter ácido. Esto también hace que los ácidos grasos tengan un comportamiento químico peculiar: la cadena hidrocarbonada (la mayor parte de la molécula) tiene carácter apolar y es, por lo tanto, hidrófoba, mientras que el grupo carboxilo es claramente polar, y soluble en agua. Este tipo de moléculas ilustra muy bien un comportamiento químico bastante común entre los lípidos: su naturaleza anfipática. <br />Las cadenas hidrocarbonadas que forman los ácidos grasos se denominan saturadas si todos los carbonos están unidos entre sí por enlaces simples, mientras que reciben el nombre de insaturadas si poseen algún enlace múltiple (doble o triple, aunque lo normal es que se trate de dobles enlaces). <br />La presencia de uno o varios dobles enlaces en un ácido graso tiene consecuencias en su estructura: como estos enlaces son rígidos, la molécula no puede girar libremente en torno a ellos, y adquiere una configuración menos flexible. Además, la presencia de un doble enlace supone que aparezca una isomería geométrica (cis-trans), según los grupos voluminosos unidos a ese doble enlace se encuentren orientados hacia el mismo lado o hacia lados opuestos de la insaturación. El resultado, desde el punto de vista de la estructura tridimensional de la molécula, es que ésta pasa de ser lineal (como lo son los ácidos grasos saturados) a ser angular. La mayor parte de los ácidos grasos insaturados presentes en los seres vivos se encuentran en configuración cis, como el ácido oleico y el ácido linoleico.<br />En los seres vivos, los ácidos grasos siempre tienen un número par de átomos de carbono (existe una justificación metabólica, relacionada con su proceso de síntesis, para ello), y los más frecuentes tienen entre doce y veinte átomos de carbono. Cuando existen, los dobles enlaces aparecen preferentemente en ciertas posiciones.<br />