La nueva Ley sobre Teletrabajo en Perú (Ley 30036) regula esta modalidad de trabajo tanto en el sector público como privado, estableciendo que es voluntario y reversible. Requiere el consentimiento del trabajador para cambiar a teletrabajo y permite que este solicite volver a trabajar de forma presencial. Además, la ley estipula que el empleador debe proporcionar equipos y compensar gastos relacionados al teletrabajo.