Freud dividió el desarrollo psicosexual infantil en tres fases: la fase oral, la fase anal y la fase fálica. En la fase oral, los niños obtienen placer de la succión y la incorporación de objetos como el pezón materno. En la fase anal, el placer se obtiene de la retención y eliminación de heces. Freud creía que estas primeras experiencias moldean la personalidad de una persona y pueden conducir a características como la generosidad o la obstinación. No hay diferencias significativas en el