Este documento discute la importancia de una alimentación balanceada y saludable para los niños. Señala que aunque las escuelas y otras instituciones cuidan la dieta de los estudiantes, los padres tienen la responsabilidad final de revisar y complementar la alimentación de sus hijos. También sugiere que enseñar a los estudiantes a revisar sus propias dietas los puede hacer más conscientes y responsables de lo que comen.
ELABORACION DE GOMITAS , dulces, terapeuticas y con alcohol
Alimentación infantil y estilos de vida sedentarios
1. ¡Interesante tema!
¿Cómo bien? ¿Comemos bien y lo necesario? ¿Nos podemos quedar tranquilos cuando
dejamos la alimentación de nuestros hijos en manos de otras personas o instituciones?
Esto y mucho más, es lo que nos ha enseñado este modulo.
Como conclusión, y analizando el menú del colegio de mi sobrino, es cierto que por lo menos
en este, la alimentación la cuidan hasta el punto de recibir premios de calidad por ello.
Las recomendaciones de ingesta por tipos de alimentos se cumple en la mayoría de los casos,
aunque de cualquier manera, como padres y adultos tenemos nosotros en definitiva, la
responsabilidad de revisar y complementar la alimentación que nuestros hijos comen tanto
fuera como dentro de casa.
Una actividad que estaría bien, seria enseñar a los alumnos a que ellos mismos revisasen su
menú durante un mes tanto en el comedor del colegio, como lo que comen en casa y así
concienciarlos y hacerlos también responsables de su alimentación.
Con la actividad 3.2 he comprobado que realmente estamos sobrealimentados y no gastamos
la energía que deberíamos al cabo del día, ya que normalmente estamos inmersos en una vida
ajetreada, pero en horario y no en actividad y esfuerzo físico como se tenía antaño. Cada vez
pasamos más horas en oficinas, sentados con ordenadores, móviles o tv y por lo menos en mi
caso el deporte no forma parte de mi rutina diaria como me gustaría.
En definitiva, este bloque me ha concienciado sobre la cantidad de comida que consumimos
innecesariamente en los países desarrollos, muchas veces por ser presas del consumismo o del
aburrimiento, estrés y ansiedad tan presente en nuestra sociedad.
Para tratar y sensibilizar a los alumnos, propondría que ellos mismo hiciesen la actividad 3.2 y
después, que pusieran un equilibrio entre la comida y el gasto energético diario si fuese
necesario. Aprovechando para sustituir alimentos de mayor aporte calórico por otros que sean
igual de ricos en nutrientes y con menos calorías.