La sordoceguera es una discapacidad multisensorial que impide el uso de la vista y el oído. Afecta aproximadamente al 5-10% de la población. Las personas sordociegas se comunican a través de sistemas alfabéticos como el dactilológico o el braille, o no alfabéticos como la lengua de signos. Requieren servicios especializados como apoyo psicológico, educación en sistemas de comunicación, rehabilitación, vivienda adaptada y empleo protegido.